Por: Txema Mañeru
El que suela frecuentar El Giradiscos sabrá de sobra mi afición por Malpaso Ediciones y especialmente en su inmejorable lista de obras musicales. Por ella han pasado hasta la fecha nombres obligatorios de esto como Keith Richards, Pete Townshend, Frank Zappa, Steven Tyler, John Lydon, Joy Division o Johnny Ramone. También pasó merecidamente el gran Neil Young con un indispensable volumen para los seguidores del canadiense como es "Memorias de Neil Young: El Sueño de un Hippie". Un Neil Young que es también plena actualidad musical al haber entregado hace poco un estupendo disco titulado "The Monsanto Years" (Warner Music) junto a la banda de los hijos de Willie Nelson, Promise Of The Real. Sigue peleón en él y en muchas ocasiones parece que estemos escuchando a los mismísimos Crazy Horse. Junto al doble "Psychedelic Pill" lo mejor que ha grabado en la última década. Pero volviendo a sus "Memorias", en sus más de 400 páginas caben todas
las fobias, pero sobre todo, las filias de Neil y una de las más importantes es su pasión por los coches de época de los que es un coleccionista empedernido.
Pues aún va más allá esa pasión en la temática de este goloso libro que nos trae también la gente de Malpaso con su magnífica y habitual presentación de lujo. Por cierto que en octubre habrá otro magnífico libro musical titulado "33 rpm, Historia de la Canción Protesta", a cargo de Dorain Lynskey y que promete emociones fuertes. Es conveniente, pues, seguir pasando a menudo para www.malpasoed.com para conocer o conseguir sus estupendos libros.
Pero en "Special DeLuxe" tenemos mucho más que esa enorme afición de Neil por los coches de época. Estos automóviles clásicos se utilizan como hilo conductor de una apasionante aventura de 372 páginas y 40 capítulos en la que circula por las autopistas de su infancia, su vida familiar, sus experimentos musicales y sexuales, así como de muchas de las historias que ocurren en los backstages del rock'n'roll. Esta vez, además, el libro tiene otro detalle que lo hace muy especial. Habitualmente el material fotográfico es de primera calidad y son muchas las páginas consagradas a él. En este caso esto ha sido sustituido por las ilustraciones del propio Neil Young de estos maravillosos coches de época. Son casi un centenar las ilustraciones de estos. Llama mucho la atención la aparición de bastantes coches fúnebres como el que utilizó para entrar clandestinamente en los Estados Unidos.
Otro punto destacado es la utilización en medio de
muchos capítulos de fragmentos de letras, mayormente, de sus propias canciones, pero también algunas de clásicos. En ambos casos con historias relacionadas sobre lo que Neil nos quiere expresar. Tenemos ingenio, originalidad y sinceridad en una obra que según The Austin Chronicle es la que se lleva por goleada el trofeo a la más entretenida de sus tres libros de memorias recientes.
No podemos dejar de reproducir un breve pero esclarecedor fragmento como éste. "Cuando grabábamos con los Crazy Horse la música no era un trabajo, sino una forma de vida. Nos desvivíamos por la música, las chicas, los coches y los unos por los otros: las canciones relataban nuestros sentimientos, tanto los buenos como los malos. No aspirábamos a la perfección, joder". La verdad es que la ha alcanzado en un buen número de sus 52 discos y esperemos que todavía la vuelva a alcanzar algunas veces más. En este "Special DeLuxe" también hay más de un momento cercano a
la perfección. ¡Conduce hacia él!