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Por: Txema Mañeru.
¡Menudo viaje por el espacio que se han pegado estos cowboys amantes del cosmic-country de Flying Burrito Brothers y de las voces y música de raíces de The Band! El caso es que los madrileños debutaron hace ya una década. Tras un EP homónimo, publicaron un precioso vinilo de color de 180 gramos, con una excelente presentación y portada en formato "gatefold", como fue “No Hard Feelings”. El caso es que eso fue allá por 2018 y hasta el pasado año estuvieron bastantes inactivos. Entonces sacaron su segundo LP, el destacado “Empty Fantasies”, lleno de guapas fantasías musicales y paseos por lo mejor de la música de raíces americanas, aunque con destellos cercanos también a formaciones como Steely Dan, Paul Weller, Tom Waits o el northern soul.
No sé qué se les ha pasado por por la cabeza en este momento, aunque creo que ha influido mucho su viaje a los Estados Unidos y conocer y tocar en ciudades como Memphis, Nashville o Houston, pero el caso es que ahora se destapan con un disco doble con la producción (y algo más como acostumbra) de Paco Loco, quien toma el relevo en dichas labores de Josu García (Loquillo, Tercera República). Estas nuevas veinte canciones habían venido precedidas por varios singles. Es el caso del tema que cierra la obra, "Tras La Puerta de Atrás", que ha sido un nuevo paso adelante en su, ahora, muy acelerada trayectoria que hace poco ha sido galardonados con el Premio Madroño del Ayuntamiento de Madrid. Más reciente es el doble single formado por "Outlaw City" y "Five Tears Of Dust". La primera es un guapo southern rock, al estilo de sus queridos Allman Brothers o la Marshall Tucker Band, que nos hace viajar a una peligrosa ciudad sin ley. Buenos riffs y magnífico solo y hasta algún devaneo hacia el rock progresivo con cuidados coros y un bajo poderoso y muy marcado. Se nota que es un estilo que también les gusta.
Queremos comentar también que la banda ha colaborado con sus compañeros de escudería, en MusicHunters Records, Desterrados, en su homónimo EP de 5 canciones. En la banda hay músicos curtidos en formaciones tan contrastadas como las de Trogloditas o Rosendo y lo suyo es el rock’n’roll. Colaboran juntos en una estupenda "Valió La Pena", con excelente trabajo vocal, que para mí es una de las cumbres del disco. Pero es mejor aún su versión del "Hurt" (aquí "Herido", en buen castellano y con gran cantante, por cierto) de Nine Inch Nails pero en clave Johnny Cash. Habrá que seguirles la pista y verlos en directo.
Pero regresando a “Space Cowboy” decir que sus variados sonidos se mueven por el rock clásico, country, southern rock, americana, blues, soul y hasta toques progresivos y jazz como los de sus queridos Steely Dan. Así comienzan, con una breve pero interesante introducción como es "Flavour International Space Station", que nos pone en rampa de lanzamiento por este enorme viaje musical en una especie de emisora radiofónica. Siguen con una "Madison Ave" de cálidos e interesantes aires country-rock con chula mandolina y cálidas acústicas y voces a dúo. Buena melodía encontramos en "Burned-Down Casino" mientras quee casi se pueden oler los aromas a tierra que desprende su "Flowers" con otra melodía que te embelesa.
Tras la breve pausa que supone "Space Cowboy", las cuidadas voces viajan en total libertad por los más de 5 minutos de "Free", resaltados por punteos y pasajes realmente rockeros combinados con toques y arreglos soul. Eso es justo antes de cerrar el primer disco con ese single mencionado titulado "Five Tears Of Dust" de aires country-folk y cuidadas armonías con ecos a The Band o Crosby, Stills, Nash & Young.
Para meternos en la harina del segundo volumen nos encontramos con otra breve y agradable apertura con el clarinete de "Woody’s" y su ritmo casi de jazz de comienzos del siglo pasado. "Try" es una preciosidad lenta y melódica con más clarinete y pedal steel guitar que pudiera firmar casi Frank Sinatra. Un viaje que continúa por la breve y paisajística "Pretty Valley", con más voces a lo CSN&Y y cuidado piano, para luego llevarnos a esa mencionada "Outlaw City" con la que adentrarse en los sonidos de "Nashville, Tennessee", y no sólo en su título, como demuestra su hermosa melodía llena de swing y excelente segunda línea vocal femenina.
Ahí llega ya el viaje final con la mayoría de temas más extensos del disco. Comienzan con "Time To Get Away" para ponerse después a luchar en su particular "Civil War" con otra chula melodía que le pudiera gustar hasta a Joe Henry (incluso tiene un tema espléndido de igual título). Las dos últimas piezas se van hasta los cinco minutos y son "Rainha Do Sul", con su ritmo entre brasileño y latino y algún punteo a lo “Abraxas” de Santana, y el ya citado "Por La Puerta de Atrás". Un tema pausado y hermoso trufado de sensibles guitarras y con un estribillo realmente emotivo. La verdad es que en castellano suenan y también enganchan, pudiendo llegar a seguidores hasta de Los Secretos. Han comenzado una extensa gira recomendable como puesta en escena de este magnífico disco y porque son de las bandas que más me están gustando en esta nueva década.
