Por: Txema Mañeru
Uno de los más importantes grupos del indie-rock americano de la última década saca su séptimo disco de estudio para celebrar los 15 años de vida. Los californianos sacaron hace menos de un año un artefacto ideal para conocerles y también hizo las delicias de sus seguidores más fieles. Te hablamos del doble recopilatorio “This Will All Blow Over In Time”, que, además de todos sus singles, trae un buen puñado de interesantes rarezas.
Pero siempre ha sido un grupo con muchas ideas y con una amplia discografía y ya tienen un nuevo disco que a tenor de su título, “New Age Forms 1” (CKWTWO / PopStock!), hace indicar que tendrá una segunda parte, y bien que lo celebraremos porque este breve disco, de tan solo 8 canciones, nos ha dejado con ganas de más. Como siempre llama poderosamente la atención la fantástica y versátil voz de Nathan Willett, muy inspirado además con el piano y ayudando con las guitarras de vez en cuando a David Quon y al multi-instrumentista Matthew Schwartz, cuyo instrumento clave son los ricos y abundantes teclados.
Este nuevo trabajo comienza estupendamente con su primer y mejor single. Se trata de "Complainer" y llama poderosamente la atención por la voz en falsete de Nathan. Buen estribillo, toques funk, coros brillantes y un aroma general deudor del mejor Beck del “Odelay”. Esos teclados de los que hablábamos son parte fundamental de "Fine Fine Fine", un tema muy rítmico y de nuevo con matices funk al estilo casi del mejor Prince y destacados coros. Cierra la cara A "Beyond The Pale", una muy buena canción lenta con el piano de Nathan en primer plano, bien secundado por los teclados de Schwartz. Una emocionante composición que puede gustar a seguidores de Adele, Rufus Wainwright o del James Blake más orgánico.
Abren la cara B otros efectivos singles como "Dirt In My Eyes" y "4th Of July". Me convence aún más "Calm Your Nerves", un tema poseedor de una melodía mágica que todavía mejora en el estribillo y con algún toque glam, a clásicos como Jeff Buckley o a jóvenes prometedores como Kyle Craft. También está logrado el final con "Tricky Devil", un buen y melódico lento con buenos y misteriosos arreglos y sintetizadores y un final in crescendo que va aumentando la emoción. Eso sí, acaba antes de lo que desearíamos, dejándonos a la espera de ese posible y esperamos real “New Age Forms 2”.
