Entrevista 15 Aniversario: Adolfo Díaz (Airbag)


“No buscaría el éxito de otra manera que no fuera haciendo lo que yo quiero hacer” 

Fotos: José Carlos Nievas.

Hay grupos cuya mera existencia te hace esbozar una sonrisa, no fallan, siempre traen bajo el brazo canciones directas, pildorazos de casi tres minutos que saben a pura felicidad. Frescas, efervescentes, capaces de invitarte a saltar y bailar, dejando los problemas de lado para celebrar la vida. 

En esa categoría sobresalen los malagueños Airbag, algo que vuelven a demostrar en el recientemente publicado “Vida Extra”, un brillante EP de apenas tres composiciones donde con la energía habitual dan un repaso a las modas cambiantes, los viejos amigos que decidieron hacerse mayores y a las parejas ancladas en la monotonía, en el marco de un trabajo que deja con ganas de más composiciones, pues por su efectividad, ya se sabe, siempre nos saben a poco. 

Airbag, personificados en Adolfo Díaz, estaban más que invitados a nuestro 15 aniversario, antes inclusive que supiéramos de la edición de “Vida Extra”; el verano pasado coincidimos con ellos en la Costa del Sol en dos citas muy distintas, Los Enemigos y Canela Party, conciertos que hablan a las mil maravillas de su variado y gran gusto musical. Se mostraron cariñosos, directos y casi tan elocuentes como lo son en sus grabaciones. A día de hoy, no lo vamos a esconder, es uno de nuestros grupos nacionales favoritos por lo que es un inmenso honor contar con ellos en esta humilde conmemoración. 

¿Qué valoración general harías de la actual situación del "mundillo" musical? 

Adolfo: Está muy vivo en cuanto a lo artístico, pero creo que hay cierta saturación, hay como demasiadas cosas, hay tanto que me da pereza bucear en todo. También el formato de sacar canciones sueltas sin parar ha acabado descolocando muchas cosas que estaban muy establecidas, ahora hay mucha gente andando como pollos sin cabeza en la industria. Fábricas de vinilo desbordadas, las promociones no funcionan como antes, la crítica especializada no da abasto para acaparar todo lo que sale. Se sacan miles de novedades cada día y la gran mayoría pasan sin pena ni gloria. Hay mil colaboraciones, hay veces que ya no se sabe de quién es la canción ni en qué disco viene. Creo que esa agonía de querer sacar y sacar canciones cada poco para estar siempre en el candelero está pasando factura. De hecho, esta misma semana se hizo viral un vídeo con agencias de promoción de artistas diciendo que no han vivido un año peor que este. Y lo mismo los medios especializados, que tienen excesivo trabajo, y que además no se ve recompensado luego. Esto es solo una consecuencia más de que la música haya perdido gran parte de su valor, al ser consumida rápido, gratis y con poca atención. Le das 10 segundos de oportunidad a una canción y si no te entra pasas a otra cosa. 

El algoritmo de las plataformas te está diciendo cada día lo que vas a oír, lo cual por un lado está bien porque descubres novedades y cosas, pero otro lado te cerca de alguna manera en un gheto musical en el cual alguien, o algo, elige por ti lo que vas a oír en tu coche, tu casa o en la oficina, es casi igual que la era de las radios comerciales, pero más individualizado y dirigido hacia ti y tus gustos generales. 

Dicho esto, la música sigue teniendo mucho poder, al final los conciertos de la gente que interesa están llenos, hay chavalería haciendo cosas buenas e interesantes y que funcionan, y no hablo solo de música urbana, trap, etc, que es la moda y por supuesto es lo que impera. También hay un resurgir de la música de guitarras fuertes, que está regenerando público. Y también hay grupos clásicos y muy veteranos que siguen llenando recintos y sacando discos. 

Siempre se ha hablado del directo como último refugio para mantener con vida a las bandas, ¿Crees que hay una red de salas y condiciones favorables a lo largo del Estado? 

Adolfo: Depende de en qué ciudades, Málaga es un desastre en red de salas, solo existen salas profesionales a las afueras y son de tamaño grande, con lo cual a los nuevos grupos les sirven de poco, a no ser que sea para acompañar a algún grupo más grande cuando vienen a la ciudad. Para la escena de una ciudad es básico que haya una o dos salas de pequeño o mediano aforo en el centro, ahí es donde se hacen las escenas.

En Málaga solo hay bares como el Velvet, que buenamente hacen lo que pueden y apoyan a los grupos nuevos, pero no dejan de ser bares donde caben 100 personas y no tienen instalaciones adecuadas. Ahora parece que han surgido algunas salas más, y al menos tenemos las de aforo grande. Luego en Madrid o Barcelona hay mucho más, pero los precios de alquiler se han disparado. Tocar para un grupo como nosotros en alguna de estas ciudades nos puede costar 1000, 2000 euros o incluso más, solo de alquiler de sala, que entiendo que se les pague porque te ofrecen un servicio profesional y hay mucha gente viviendo de ese trabajo, también entiendo que todo ha subido, aún así, algunos alquileres me parecen exagerados. Pero como hay tanta oferta y saturación, siempre hay gente que pagamos eso para poder tocar. Es otra consecuencia del exceso de cosas que hay y la famosa “ley de oferta y demanda”. 

¿Cuál es el papel que en ese sentido crees que juega la proliferación de festivales? 

Adolfo: Bueno, los festivales son un buen complemento a los conciertos en sala, son otro concepto, para mí son como un escaparate donde gente que no te conoce te pueden ver y pueden subirse al carro de tu música. Nos gusta tocar en festivales también, ahora quizás hay demasiados y llevando siempre a los mismos grupos y estilos, por eso algunos festivales no funcionan ya, arriesgan poco y la fórmula se agota. Al fin y al cabo, son un negocio que busca ser rentable. En mi opinión hay que buscar siempre un punto de diferenciación, algo que te haga distinto y especial a otros festivales. Igual no es fácil a corto plazo y tardas en verle color, pero a la larga creo que se valora más. 

Ahora que la venta de discos es irrisoria, las plataformas siguen robando a los creadores con porcentajes ínfimos por reproducción y en los festivales apenas se paga a los artistas más minoritarios, salvo honrosas excepciones. ¿Por dónde pasa la durabilidad de los proyectos y las carreras de larga duración? 

Adolfo: La durabilidad de tu proyecto depende de cada uno y de las ganas que tenga de seguir adelante. Nosotros seguimos porque no lo podemos dejar, así de sencillo. Nos gusta demasiado esto y queremos aprovechar lo que nos quede. Aunque hay factores que influyen, evidentemente. Si hubiéramos estado perdiendo dinero durante 20 años lo hubiéramos dejado ya seguramente, al menos de forma profesional. El artista tiene el poder decir “no” a quien te pague poco y te de malas condiciones. Supongo que hay bandas que aceptan tocar en festivales por “visualización”, pero nosotros no somos una de ellas. A nosotros nos cuesta dinero salir a tocar, y si no nos compensa, no vamos. No tenemos necesidad porque no dependemos 100% de la música. 

A la hora de disfrutar de la música como oyente, ¿prefieres acercarte a los clásicos con los que te hiciste melómano/a o bien prefieres escuchar propuestas novedosas? ¿Por qué?

Adolfo: Un poco de todo, me va por rachas, hay veces que me apetece bichear cosas nuevas y otras veces que me tiro un mes oyendo a un solo grupo. Siempre vuelvo a cosas clásicas y a mis grupos favoritos, pero también descubro mucha música que para mí es nueva, pero que son discos de hace décadas, la música es inagotable e increíble en toda su diversidad. 

Todo oyente tiene algún secreto no confesable de bandas y/o músicos que le emocionan y que no suelen estar bien vistas, ¿Cuáles serían los tuyos y por qué? 

Adolfo: Me gustan cosas super horteras a ojos de según quién, por ejemplo, me emocionan algunos discos de Dire Straits, y hay gente que se escandaliza por eso. La verdad es que Dire Straits tienen todo lo necesario para que no me gusten: canciones larguísimas, sonido depurado, imagen de mierda, fans que no tienen nada que ver conmigo… pero es que tienen canciones increíbles y, para mí, si te llega una canción sea por lo que sea, eso está por encima de todo. “Making Movies” es uno de mis discos favoritos. Luego escucho muchos géneros que no todo el mundo se espera, me encanta el reggae, dub, exótica, hip hop, el último concierto en el que lloré de emoción fue en Iron Maiden. 

¿Cuál fue ese primer contacto con la música que te empujó a dedicarte a ella? 

Adolfo: No estoy seguro, pero desde pequeño fue como una obsesión, desde que oí a Elvis y los Beatles en el coche de mi padre, supongo. Recuerdo que luego, aún de niño, vi a un grupo cargados con guitarras en el aeropuerto de Barcelona, me dijo mi padre que serían “un grupo de música”, y se ve que le dije que yo de mayor quería ser como esos. No paré hasta conseguir un teclado y luego una guitarra eléctrica. 

Cita cinco nombres básicos en tu reproductor en los últimos meses. 

Adolfo: Estoy oyendo muchas bandas nacionales de guitarras, lo nuevo de Mujeres, Aiko el Grupo, Kora Yako, Nadie Patín, Yawners, por ejemplo. De grupos de fuera estoy pasando una fase de no encontrar muchas cosas que me haga ponerlos de nuevo. 

¿Qué artistas malditos, minoritarios o relativamente novedosos nos recomendarías encarecidamente no perder de vista? 

Adolfo: El grupo que más infravalorado veo es Jamie 4 President, acabo de hacerles la nota de prensa de su nuevo Lp, que es buenísimo como los anteriores, no tienen la atención que merecen la calidad de sus canciones y no lo puedo entender. 

Airbag siempre ha sido una banda underground que ha contado con el favor de un público fiel. ¿Qué consejo le daríais a una banda novel que pretenda vivir de la música? 

Adolfo: No me veo quién para dar consejos, yo tampoco puedo vivir bien de la música solamente, así que en ese sentido no soy el más indicado. Lo único que puedo decir es que lo mejor es ser uno mismo y hacer lo que te guste, primar lo artístico y quedarte a gusto contigo mismo, si luego llega la recompensa en forma de éxito estupendo, pero yo no buscaría el éxito de otra manera que no fuera haciendo lo que yo quiero hacer. 

Sois de Estepona, afincados desde hace años en Málaga capital. ¿Sentís que musicalmente hablando algo se está moviendo y cada vez al sur de Granada? ¿Qué elementos son necesarios para ir creando una pequeña escena en ciudades como la vuestra? 

Adolfo: En Málaga y en otras ciudades veo mucho movimiento de gente joven, haciendo música urbana pero también recuperando sonidos de guitarras, rock. Hubo un momento que creía que no había relevo y que el rock era cosa del pasado, pero en los últimos años estoy recuperando la fe. Por citarte solo unos cuantos grupos muy muy jóvenes de Málaga: Quirkyoddgirl, Lord Malvo, Mal Viaje, Gentileza, Sarria, Vis Viva… lo único que hace falta es continuidad y perseverancia, trabajo… ya salieron adelante otros grupos como La Trinidad, que siguen siendo jóvenes y ya tienen una trayectoria a nivel nacional en la escena indie rock, o DelaOssa a nivel de música urbana. Yo creo que en Málaga falta una red de negocio que no existe o es deficiente y escasa, hay muy pocas salas profesionales en zona centro, no hay apenas agencias de management, sellos discográficos, los técnicos de sonido profesionales escasean, no hay casi roadies, backliners, tampoco agencias de alquiler de backline, hasta hace 10 años apenas había locales de ensayo profesionales, nosotros montamos unos casi por necesidad y por dar ese servicio que veíamos que claramente faltaba en la ciudad. Esa es la diferencia que tenemos logísticamente con respecto a Granada, por ejemplo. 

¿Cuál es el primer recuerdo que tienes de nuestra revista digital? 

Adolfo: El primer recuerdo es que os interesasteis por nosotros en su día, cosa que no puedo decir de otros medios. (Risas) 

¿Qué valoración haces de nuestra evolución como web asentada dentro de la oferta de prensa musical, nacional y gratuita? ¿Qué es lo que más te gusta de El Giradiscos? ¿Y lo que más te irrita? 

Adolfo: Siempre lo digo, seguir adelante después de tantos años es un logro, siendo gratuita más aún. Lo que más me gusta es que sea ecléctica y no se cierre a modas y/o estilos en pro de una audiencia mayor, me gusta que los que escriben sobre música sea porque les flipa lo que oyen y se entusiasmen. No me irrita nada, me irritaría que no le hicierais caso a nuestra música. 

Espacio libre para una felicitación, crítica o lo que venga en gana… 

Adolfo: ¡Enhorabuena, por muchos años más, y que nos sigamos viendo en conciertos!