Por: Artemio Payá
Esperado nuevo trabajo de Lucero, uno de los secretos mejor guardados del rock americano mas rugoso y canalla. Tres años después de su notable "All a Man Should Do" continúan sin el acomodo de la sección de vientos, y si en su anterior trabajo se encerraron en Ardent Studios, recordando a Alex Chilton y juntándose con Jody Stephens, ahora reivindican otro de los templos musicales de Memphis y han alumbrado "Among the Ghosts" en Sun Records.
Hubo un momento en el que Universal Music llegó a apostar por ellos y parecía que podrían aumentar su público con mas promoción, pero han vuelto por carreteras secundarias y este es su tercer álbum en tres discográficas diferentes, pero seguir siguen a lo suyo: la inconfundible voz cargada de carisma y autenticidad de Ben Nichols, las impecables guitarras que ora beben del country clásico, ora del rock cazallero de los Replacements y sobre todo una clase que tira de espaldas.
De primeras, la portada, cargada de misticismo y tenebrosidad, incita a abrir la carpeta y sumergirse en la música. Aparte de la huella sonora hay que destacar una vez más las letras de Nichols, que siempre auguran un viaje por el sur de los Estados Unidos con historias alejadas de tópicos y cargadas de oscuridad, pérdida y amores retorcidos. El disco se abre majestuosamente con la canción que da título al disco, con calma y al contrapunto se va acelerando a la vez que las rasposas cuerdas vocales de Ben nos van conduciendo a la épica, las historias no solo se cantan sino que también se cuentan.
El viaje es corto, únicamente diez cortes, lo suficiente para que nos quedemos con ganas de mucho más y que por el camino disfrutemos de la acertada "Everything Has Changed", reflexionemos con las preciosas baladas "Always Been You" o "My Dearest Wife", o que seamos incitados a un road trip sureño con "Long Way Back Home" ( lo mejor del disco) y con la energía de "For the Lonely Ones", que nos recuerda en cada trabajo que a Nichols también le sienta de maravilla el traje de Paul Westerberg. Me he dejado en el tintero "Loving", canción compuesta para la película del mismo nombre dirigida por Jeff Nichols (hermano del cantante), un emocionante recuerdo a un hito de la lucha por los derechos civiles en los Estados Unidos.
Debido a la poca repercusión de cada uno de sus elepés, los fans de la banda no saben nunca cuando arrojarán la toalla, pero de momento es bonito comprobar que siguen en plena forma, lástima que desde 2007 no nos visiten para poder revivir lo que fueron esos bolos que nos dejaron a todos con la boca abierta.
