¿Estrategia de marketing o declaración de intenciones?La banda londinenese presenta nuevo tema “Every teardrop is a waterfall”, rompiendo así un silencio de casi tres años que sólo se vio interrumpido por el single navideño “Chritsmas lights”.
En este caso, lejos de retomar el intimismo pop que mostró dicho single (y que hizo pronosticar una vuelta a los orígenes de la banda), “Every teardrop is a waterfall” se presenta como continuación lógica de la senda marcada por Viva la Vida (2008), caracterizándose por sintetizadores, sonidos envolventes, percusiones, coros, voces dobladas y una mezcla de guitarras acústicas y eléctricas que tejen un himno electro-pop que va subiendo hasta la eclosión de luz y color (como ya hicieran en su anterior álbum con Lovers in Japan/Reign of love o Viva la Vida).
Sin embargo, aquí no concluye la expectación y el alboroto levantado por la salida de este tema, pues se han abierto dos grandes debates: el primero se centra en la posibilidad de que “Every teardrop is a waterfall” no sea realmente un adelanto del quinto albúm (cuyo proceso de grabación y producción se está realizando con mucho cuidado ante la atenta mirada de Brian Eno), pues como el mismo grupo deja entre ver en su página web puede ser un incentivo para atraer fans hacia su gira veraniega (incorporándolo así en su tracklist), mientras que el otro gran debate se ha focalizado sobre el hecho de una enorme similitud del comienzo de su tema y la canción I go to Río de Peter Allen (versionada por MYSTIC en su famoso Ritmo de la noche) cerniendo así el fantasma del plagio que parece acompañar a Coldplay en los últimos años.
Ante esto, la banda británica ha tratado de adelantarse a estas críticas y ha zanjado el tema confirmando la compra del sampled del tema de Peter Allen, aunque existen malas lenguas que dicen que han esperado a que se formara el debate para crear atención, a modo de estrategia de marketing.
Debates aparte, lo único realmente claro es que tenemos a nuestra disposición un nuevo tema de esta ya mítica banda, que lejos de aquel pop-rock alternativo que les hizo famosos a inicios de milenio (Yellow, Trouble, Shiver…) ha seguido una camino muy similar a U2, en el cual se han decantado por la vertiente más comercial y sobreproducida de la industria, que se vale de su calidad musical contrastada y del siempre manipulable cariño de los fans.
Por Rúben López
