Zahara

Sala Joy Eslava, Madrid Jueves, 13 de noviembre de 2014 

Canta Zahara en Del invierno que “no hay manta, café, no hay nada ardiendo”. Pero, la verdad, ni falta que hace. No si es ella quien nos trae el deshielo, aunque esta vez no llegue en agosto sino en noviembre. 

Madrid ha sido testigo de ello. Y, con él, las más de novecientas personas que se concentraban en la Joy Eslava ante su esperado regreso a los escenarios de la capital. Tú me llevas fue el tema elegido para abrir una noche llena de buena música en directo y más de una sorpresa. 

La primera de ellas fue la recuperación de una de sus canciones más antiguas. La ubetense compuso Cartas entrelazadas con diecisiete años, y la publicó en su primer disco allá por el año 2005. Pese a mostrarse algo reticente a rescatarla ahora que ha entrado en la treintena, e incluso reconocer que en ese momento se arrepentía de haber dejado al público elegir el repertorio de la gira -del cual esta canción fue la segunda más votada-, Zahara hizo las delicias de los allí presentes con la interpretación de este tema de “amor adolescente”, como admitió. Una interpretación que combinó con fragmentos de En qué estrella estará, de Nena Daconte, y que remató con Only girl (in the world) de Rihanna, de la que dijo textualmente que tenía “un buen culo”. Una muestra más de que conserva intacto, si no mejorado, su característico sentido del humor. 

Otro de los puntos fuertes de la noche fue una de las colaboraciones a las que nos tiene acostumbrados. Tras anunciar la presencia de una persona que la había apoyado desde el principio, entre el público era inevitable intentar adivinar de quién se trataba, hasta que subió al escenario el siempre fantástico Quique González. Fue precisamente allí, en las tablas de la Joy Eslava, donde ambos habían tocado juntos por última vez en Madrid. Algo que volvían a hacer esa noche con La luna debajo del brazo, que sin embargo supo a poco. 

Pero aún quedaba mucha noche por delante, y no faltó tiempo para presentar un tema nuevo, Oh, salvaje, incluido en su próximo disco que verá la luz el próximo año. No faltó tampoco tiempo para una versión de You're the one that I want de la banda sonora de Grease, e incluso para las canciones de La fabulosa historia de. Desde Olor a mandarinas, que el público se empeñó en cantar a dúo con ella, y que hubo que repetir porque más de uno se equivocó con los tiempos verbales, hasta Funeral que en directo recordaba más que nunca a El amor no es lo que piensas, de Deluxe (Xoel López). Sin olvidarnos de las más que míticas Merezco o Con las ganas, esta última dedicada a todos aquellos que se la han pedido alguna vez y a los que no había podido complacer, recordemos que estuvo bastante tiempo sin ser capaz de tocarla en directo. 

Variedad de repertorio, y también de formatos. Pudimos verla, como ella misma había anunciado previamente, con banda, trío y en acustiquísimo. Fue, en definitiva, una noche que nos dejó a todos con las ganas, con ganas de más; algo que, de todos modos, se ve recompensado con el hecho de que, de aquí a unos meses, podamos disfrutar de su próximo trabajo. 

María Solano Conde