Por: Javier González
Es Luis Brea un autor de canciones pop-rock de los que otorgan galones a un estilo en el que muchas veces la repetición de esquemas se hace tediosa. A él le gustan las canciones de guitarras fuertes, escritas con amplitud de miras algo que le permite vampirizar otros géneros que una vez pasados por su brillante prisma, ha permitido que nos haya legado ya varias decenas de composiciones dotadas de personalísimas interpretaciones.
Sabíamos que llevaba una temporada girando en formato acústico, buscando nuevos cauces, haciendo sonar viejas tonadas y probando canciones que puedan formar parte de un posible próximo disco, ante tal tesitura movidos por la curiosidad, decidimos tirar del hilo hasta conseguir su contacto para someterle a un cuestionario que nos acerque al aquí y ahora del Luis Brea prepandemia.
¿Cómo va todo Luis, hace mucho que no te entrevistamos y teníamos ganas de saber de ti?
Luis: Bien, ahora mismo estoy escribiendo cosas nuevas y haciendo acústicos, básicamente.
Sabemos, como bien dices, que sigues girando en formato acústico durante los últimos meses. ¿Qué tal está funcionando el asunto?
Luis: Muy bien, la verdad. Estoy muy contento sinceramente. Está habiendo muy buena respuesta por parte de la gente. Empecé en esto tocando en acústico y es volver a reencontrarme. Por otro lado, no es un acústico en que las canciones bajen de intensidad, tienen caña. El público tiene más juego, puede cantar, hay más interacción. En este formato me permito manejar mejor los ritmos del concierto. Es todo diferente, pero sin menos intensidad. Toco las canciones como se parieron. Además, dejo espacio a la improvisación, algo que me gusta. La gente está viniendo a verlo y lo estamos pasando bien, así que me siento muy contento.
Debemos entender éste formato como una necesidad artística o puramente económica. ¿Quizás tengas menos cargas económica y mayor rentabilidad?
Luis: El hecho de ir solo hace que te entre otra onda diferente. Vas a tu rollo con una acústica, tú, la gente, y sitios más pequeños. Es un formato en que disfruto mucho, la verdad. También es cierto que cuanto más reducida sea la logística, es más fácil todo. Es llegar allí, hacer prueba de sonido y más tarde enchufarte para jugar con tu discurso, con tus letras. Es una forma de enfocarlo diferente a la de tener que mover a más gente, te quita responsabilidad. Es una cosa que te hace estar más tranquilo. Me apetecía hacerlo en este momento porque hemos estado girando fuerte durante cuatro años, muy fuerte, con muchos conciertos. Como no puedo parar, yo particularmente, decidí empezar hace dos años con estos conciertos. La respuesta de la gente está siendo muy buena. Me estoy permitiendo hacer cosas nuevas y enfocar el próximo disco con calma.
Ahora que lo dices. ¿En qué punto te encuentras? ¿Cómo va el proceso de composición?
Luis: Bien, la verdad. Ten en cuenta que estoy tocando y componiendo, lo cual no me parece poco (Risas). Es suficiente. En este momento me apetece dedicar tiempo a hacer cosas interesantes, para eso hay que dedicarle tiempo y amor, que a veces es lo mismo (Risas). Muchas veces el ritmo de la industria, tal y cómo funciona, disco-gira-disco … no sé si eso… haya quien lo pueda aguantar. Quien pueda, a por ello. Pero creo que no tiene sentido para los músicos jugar bajo dichas reglas. Ahora me apetece parar, plantearme las cosas, saber dónde estoy y dónde quiero ir. Que lo haga así hace que tenga un valor artístico y un sentido para el público.
En 2018 editaste “Supermariachi”, un Ep, de apenas cuatro canciones, que no vio la luz en formato físico. ¿Seguirás tirando por esa vereda?
Luis: Ahora mismo los proyectos de nuevas generaciones, hablo de hip-hop y Trap, sacan canciones sueltas. No tienes porque ceñirte al formato del vinilo de diez canciones. También es verdad que he sido padre por segunda vez, que es algo que te da felicidad, pero es un impacto emocional muy grande. Te da trabajo y tu atención se divide en más cosas. Cuando hago canciones las hago de manera autoexigente, me lleva tiempo convencerme de que debo enseñar una cosa. Me imagino que cuando tenga algo lo sacaré en formato disco.
Da la sensación de que con “Usted se encuentra Aquí”, un maravilloso trabajo, hubo un pequeño retroceso con respecto a tu anterior trabajo, “Luis Brea y El Miedo”, sin que la calidad musical haya tenido que ver en eso. ¿A qué crees que se debió ese hecho?
¿Te permite tu carrera vivir exclusivamente de la música?
Luis: No sabría qué decirte. Estoy ahí todavía. Es una pregunta muy personal. A veces depende de los conciertos que tengas. Ahora mismo con los acústicos veo que sí tiene sentido. Pero en general tiene que pasar tiempo para que una banda sea rentable. Hay que currar para que sea mínimamente rentable. No sé cómo no hay un documental sobre esto. Acerca del hecho de mover cinco y seis personas en furgoneta con logística incluida, durante años para que eso cuadre. No sé si es rentable en otros casos, pero sí tengo claro que te requiere un esfuerzo muy grande; y si encima tienes familia que se queda en casa, es complicado. Hay que luchar mucho. Hay bandas que lo consiguen pero creo que hay una gran gama de grises acerca de las rentabilidades de cada grupo. Ahora tengo la suerte de que la gente está respondiendo bien a los acústicos y sí, me está yendo bien, la verdad.
La primera vez que tuve noticias tuyas, trabajabas en el Fotomatón, donde nos regalaste maquetas de tus canciones. ¿Qué queda del Luis de proyectos como Aviación Española?
Luis: Queda la ilusión de aquel Luis que no sabía cómo dar salida a sus canciones. Me dejaban tocarlas en el Fotomatón, es cierto. Ahora he estado en muchos sitios y he visto cómo funciona todo lo que hay alrededor de este mundillo. Es interesante. Me despierto por la mañana y mientras desayuno, lo primero que hago es tocar la guitarra. Independientemente de la realidad del proyecto, necesito una guitarra y un café para escribir, para contar lo que siento. Ese Luis Brea siempre va a estar ahí, me sale de manera natural y es divertido. Lo interesante es saber cómo funciona todo esto y hacer las cosas a tu medida.
Eres uno de nuestros autores pop-rock favorito, tienes altura de miras y personalidad. Facturas un pop de guitarras fuertes pero tomando elementos de otros muchos estilos y con un trabajo vocal sobresaliente. Por favor, no te canses nunca de hacer canciones.
Luis: Tranquilo, eso siempre estará ahí. Entiendo que a veces mires fechas y dirás qué está pasando con ésta persona. También los artistas tenemos circunstancias personales, ya te digo que he sido padre dos veces en tres años y eso no es una tontería, así que hay que buscar espacios para componer. Tienes que volver a reorganizar tu agenda. Ahora estoy encontrándome con nuevas letras. Me apetece hacerlo con cariño sin prisas. Las prisas ya las he probado y tienen que ver con lo que contabas del Ep. No eres el primero que me lo ha dicho, que si se había cortado la emisión. Había un qué está pasando aquí. Desde dentro a veces no lo notas, pero desde fuera sí. Necesitaba parar y volver a encontrarme con mi esencia, con el hecho de estar a gusto en todos los sentidos. Es muy importante para durar y tener una carrera larga.
Muchas gracias, Luis, por dedicarnos tan amablemente tu tiempo.
Luis: Gracias a vosotros. Yo estoy encantado de charlar con vosotros.
