Roni Di Capo: “Roni Di Capo”


Por: Javier González

Qué bonito es hablar de rock sin aditivos desde el prisma femenino, más si cabe cuando uno lo hace escuchando por sus altavoces la potencia y solvencia con que lo factura Roni Di Capo. Un nombre tras el que se esconde la asturiana Verónica Costilla, quien hace unas semanas lanzo su primer trabajo compuesto exclusivamente por composiciones propias, bajo el homónimo y exótico nombre con el que pisa con firmeza las tablas, “Roni Di Capo”. 

Porque si algo tienen estas siete composiciones son precisamente fuerza, actitud y unas amplias dosis de rock and roll, pasando con igual acierto por la raíz más clásica del género y derivando hasta concepciones más amplias, porque no decirlo, casi abiertamente comerciales, pero con esas dosis de sinceridad y convencimiento que con unas pocas escuchas te demuestran que tras su propuesta no hay trampa ni cartón. 

Y es que las canciones que interpreta Verónica retrotraen de igual modo a los años cincuenta, rescatando de nuestra memoria la figura de grandes como Wanda Jackson y de divas del underground más cercanas a nuestros días como Imelda May (“No Fear”), quien por cierto pidió su presencia abriendo sus conciertos en nuestro país tiempo atrás, pasando por ramalazos casi punk que la acercan más a las pelis de serie b y a ciertas dosis de terror (“Wanna Have Some Fun”) hasta derivar en un soul vitaminado (“Garage Love”) y paisajes más fronterizos (“The Mission”). 

Una vez escuchado con calma, debo confesar que las expectativas que eran altas, han sido más que satisfechas. Hacía tiempo que un disco de verdadero rock and roll no me hacía mover las piernas de manera instintiva mientras escribía sobre él, algo que durante la escucha de “Roni Di Capo” ha sucedido en varios pasajes. Desde aquí y ahora, no resta más que dar la enhorabuena a Verónica por esos estupendos momentos en que se ponía a maullar como la gata rockera que es demostrando que lo suyo cobra fuerza y va muy en serio.

Hace mucha falta que en nuestra escena las chicas rockeras sigan afilando sus uñas para mostrarlas con fiereza en trabajos de gran altura como este “Roni Di Capo”, ya decimos, altamente disfrutable.