Smoking Stones: “50 Años de Satisfacción”

El próximo día 12 de julio The Rolling Stones cumplirán la friolera de cincuenta años sobre los escenarios. A buen seguro que dada tan importante efeméride desde su discográfica, y también a través de las redacciones de diversas publicaciones de orientación rockera, se anda trabajando contrarreloj para conmemorar dicha fecha de la mejor manera posible, ya sea con la puesta a la venta de alguna edición especial o a través de un buen puñado de artículos, que seguro se encargarán de volver a glosar la extensa trayectoria vital de sus Satánicas Majestades. 

Es por ello que no pudimos menos que esbozar una sonrisa al ver la inteligente y visionaria maniobra que nos habían planteado los barceloneses Smoking Stones semanas atrás al publicar “50 Años de Satisfacción” (Mitik Records), su particular homenaje a los Rolling Stones, que finalmente, y a tenor de la nómina de colaboradores de los que se han hecho acompañar para llevar a cabo el mismo, debe ser entendido como el reconocimiento nacional de gran parte de nuestra escena a la mayor banda de rock de la historia de la música. 

De Smoking Stones simplemente diremos que actualmente pasan por ser los mejores emuladores de los Stones originales en todo el planeta. Al menos eso afirma más que rotundamente en el interior del libreto que acompaña a este disco el periodista y locutor radiofónico Jordi Tardá. Quien no duda a la hora de hacer una defensa repleta de vehemencia de la veterana banda catalana. Es tal su argumento que desarma a las primeras de cambio. Hasta el punto de hacerme confesar que no seré yo quien se atreva a poner en tela de juicio su razonamiento. Aunque siendo realmente sincero de eso también tienen mucha culpa las múltiples escuchas que durante estos días he dado a estos “50 Años de Satisfacción”, llegando a caer rendido a sus encantos. En primera instancia por cómo suena y en segunda, quizás tirando de sentimentalismo, por lo que tiene de sincero tributo a una formación que sin lugar a dudas se encuentra entre las favoritas de mi devocionario particular.

Grabado en su totalidad con la banda tocando rigurosamente en directo, como mandan los cánones de todo álbum que pretende recoger un sonido con alma, crudo y orgánico, bajo la producción de otro amante de la banda capitaneada por Jagger y Richards, como es el mítico Aurelio Morata, el que fuera ilustre bajista de los siempre queridos Los Rebeldes, y rodeándose para la interpretación de casi la totalidad de los temas con parte de los nombres más importantes del panorama rock de nuestro país, entre los que se encuentran Carlos Tarque (M-Clan), Ariel Rot, Johnny Cifuentes (Burning), Dani Nel.lo (Los Rebeldes, Mambo Jambo), Coque Malla, Jaime Urrutia, Leiva o Carlos Segarra, por citar tan solo unos cuantos ejemplos, para dar forma a un trabajo que transpira por cada uno de sus poros puro espíritu stoniano.

Después de múltiples escuchas solo hay una cosa clara: Y es que resulta harto complicado resaltar unos cortes por encima de otros, puesto que la categoría y calidad es la nota predominante a lo largo del álbum. Algo que es patente desde los compases iniciales de “¿Quién no quiere ser un Stone”?, una dedicatoria nacida del puño y letra de los Smoking Stones para sus mayores, que te sumerge en el peculiar universo rockero y festivo de la banda británica, y que continua a través del aporte vocal de Carlos Tarque en “Happy”, la maestría de Ariel Rot en “Colgado” (“Hang Fire”), o la militancia del “abuelo” más genuinamente Stone de capital, Johnny Cifuentes, en “Follastars” (“Starfuckers”), para dejar claro, canción a canción, que este es un trabajo hecho por y para fieles de los Stones, sin por ello marginar a seguidores ocasionales que también disfrutarán con el material incluido. 

Quizás por simpatía personal con las propias canciones un servidor destacaría la belleza que transmiten las interpretaciones de “I´m Free”, gracias al buen hacer de Gerard Quintana (Sopa de Cabra), y “Flores Muertas” (“Dead Flowers”), de la que se hace cargo el ya citado Aurelio Morata, dos clásicos que vuelven a brillar con fuerza una vez más.

Mención especial hay que realizar también a ese joya incluida originalmente en “Between the Buttons” que es la canción “She Smiled Sweetly”, una de nuestras favoritas de siempre, que en esta ocasión vuelve a maravillar gracias a Marc Ros, vocalista de Sidonie, al que le sienta como anillo al dedo. 

Tampoco podemos dejar sin mencionar el gran trabajo de otro de nuestros más veteranos Stone, el eterno Gaby Alegret, cantante de Los Salvajes, quien vuelva a atacar su inseparable “Píntalo Negro” (“Paint it Black”), ni el de la única fémina invitada a pasarse por la grabación del álbum, Mónica Green, quien aporta su dulce voz negra a una encomiable y siempre efectiva “Jumpin´ Jack Flash”, representando sin duda alguna uno de nuestros instantes predilectos dentro de todo este homenaje. 

Como decimos “50 Años de Satisfacción” es un trabajo altamente recomendable, de principio a fin, básicamente por tres aspectos: 1) Por la calidad de las canciones y de las revisiones que en él se incluyen. 2) Por el simple hecho de que presenta un envidiable elenco de artistas que se acercan desde el respeto y la admiración hasta uno de los cancioneros más importantes de la historia del rock, sirviendo como banda de acompañamiento a todo eso los Smoking Stones, es decir lo más parecido a los Rolling Stones que existe sobre la faz de la tierra. 3) Porque si te gusta el rock, te gustan los Stones, y si te gustan los Stones es porque flipas con la atmósfera de sus canciones, su espíritu y esa sana macarreria que tan bien queda recogida en sus composiciones… y 4) Porque solo es rock and roll, pero nos gusta. 

Por: Javier González/ javi@elgiradiscos.com