James: Insuperable universo pop


Sala Apolo, Barcelona. Jueves, 15 de septiembre del 2022.

Texto y fotografías: Àlex Guimerà

En su quinto paso por Barcelona , los mancunianos James pusieron el cartel de "sold out" unas semanas antes. Es probable que el aforo reducido que ofrece la Sala Apolo resultara insuficiente para albergar una legión de fans nostálgicos de la banda (locales y extranjeros) liberados de restricciones y con ansias de concierto finalizadas las vacaciones. Fuera lo que fuese, el pasado día 15 de septiembre el curso de conciertos se estrenaba en la Ciudad Condal con la presencia de los británicos tras su actuación en La Riviera de Madrid  y previamente a conquistar el festival Visor de Murcia.

Para calentar motores la energía punk del cuarteto de Earlstown (Merseyside) The K's hizo saltar por los aires la sala con un puñado de seguidores ingleses gritando a pleno pulmón “The K’ s Are On Fire!”. Un grupo de guitarras muy interesante que rastrea los pasos de gente como The Jam o The Libertines.

Finalizado el breve set, aparecieron los protagonistas con una puntualidad (nunca mejor dicho) británica, presentando su actual formación de hasta nueve miembros cuya novedad en los últimos tiempos ha sido quizás la presencia femenina de las multinstrumentistas Chloe Alper y Debbie Knox-Hewson, las cuales han dado a James ciertos aires frescos y renovados.

Del resto de integrantes destacan, cómo no, el factotum y front-man perfecto que es Tim Both, con su enorme carga de carisma, dotes vocales, dinamismo en el escenario y capacidad de movilizar a los fans. Pero también el trompetista Andy Diagram, cuyo casco y atuendos freaks aportaban su toque a un escenario que completaban los guitarristas y multinstrumentistas Saul Davis y Adrian Oxaal, éste segundo alternando guitarra y violín, el baterista David Banyton-Power, que como indica su nombre tiene pegada poderosa, y el teclista Mark Hunter, aportando suaves pianos pero también los efectos discotequeros marca de la casa. Un arsenal instrumental mayestático para una banda popera, lo que se traduce en un directo fornido y pluscuamperfecto.

Si a todo a ello le juntamos un repertorio plagado de éxitos, apaga y vámonos. Si bien el concierto arrancó con temas “menores”, en su mitad encadenó uno tras otro algunos, que no todos, de sus pletóricos hits. Para el comienzo quedó una descafeinada "Attention”. proveniente del álbum “Girl At The End Of The World” (2016), o las lejanas “Top Of The World” y “PS”, alternadas con otras más fogosas como las recientes “Isabella” y “All The Colours Of You” o la lejana “Waltzing Along”, con un Tim subiéndose a la verja del público para cantar y anticipándose lo que se nos vendría.

Todo despegó a partir de la dulce “She's A Star”, desde la que no ya hubo tregua corte tras corte. Nos referimos en especial al momento que trajeron temas memorables como “Ring The Bells”, “Born Of Frustration” (con los gritos a lo indio “uuuh-uuh”) o su single de debut “Come Home”, todos ellos haciendo corear, saltar y desmadrarse, al público entero frente los míticos bailes espasmódicos del cantante. También sonaron otras más recientes como son “Curse Curse” (“Le Petit Mort” de 2014) o “Beautiful Beaches”, de su último LP, ambas con sus ritmos electrónicos y vueltas pegadizas. Para la recta final quedaron las inmortales “Laid”, “Gettin Away With It (All Messed Up)” y Sometimes”, alargadas, coreografiadas y cantadas en perfecta comunión entre banda y público.

Insuperable concierto de esta banda legendaria de música pop que surgió en los tiempos de los Smiths, emergió junto a la fiebre Brit-Pop y ha sabido mantenerse en forma en el nuevo milenio gracias a sus sentidas baladas, pero sobre todo gracias a sus pastillas pop de melodías redondas e instrumentación trabajada. Sensacionales.