
Primero fue el turno de Albert Sans, que nos deleitó con un acústico. Una reunión íntima que hicieron posible Albert a la guitarra, Jordi Galera al cajón gitano y Carlo Lambertini al bajo. Un aperitivo para lo que venía a continuación.
El trío madrileño les siguió. Esa noche en la sala “El Sol” los astros se alinearon para contemplar a Última Experiencia, que volvió a eclipsarnos a todos como habían prometido.
Comenzaron fuerte desde el primer acorde. Las últimas filas de personas ya avanzaban, y pronto comenzó a estrecharse el espacio que nos separaba de la banda. Los fans y amigos se colocaron cerca, coreando cada sonido, imitando cada gesto. Sonaron temas de su nuevo disco como “Tú y yo” y “Ha sido un placer”, y la multitud gritó enloquecida al escuchar el comienzo de “Madrid”, la canción mítica que fue dedicada por Miguel, voz del conjunto, a toda la gente de la capital, porque “al cielo te vas, pasando por Madrid…”

No era difícil adivinar las influencias que habían marcado a estos chicos, y prueba de ello fue la versión de un tema de Hendrix; aunque todos pasaron por el escenario: Hendrix, Cream, los Taste de Rory Gallagher, los Beatles, Eric Clapton…Y para terminar, el broche final: “Paranoid”, de Black Sabbath. Atendiendo a las peticiones del público, el trío salió emocionado para hacer un bis por partida doble.
Y era verdad eso de que no has escuchado al grupo hasta que vas a uno de sus conciertos. Y va a ser verdad que éste va a ser el año de Última Experiencia.
Como sospechaba, una Gran Experiencia.
Texto: Paula Rodríguez Martín
Fotos: Oscar Carriquí