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“Cualquier artista que no quiera caer en la etiqueta fácil siempre va a estar en tierra de nadie”
Por: Javier González
Fotografías: Lidia Arruego
Medalla no es una banda más. Llevan tiempo demostrando una fuerza y actitud a la que no se arriman ni de lejos muchos de sus contemporáneos. Conocen el significado de la palabra riesgo y parecen mirar dicho término con desprecio. Cada disco les hace crecer, afianza su discurso para pisar más fuerte el camino, dejándolo sembrado de unas huellas que pocas bandas son capaces de intentar seguir en el actual panorama patrio.
“Duelo”, el nuevo trabajo que han decidido autoeditarse, no es más que la confirmación de todo lo expuesto más arriba, ahora en el discurso de la banda encontraremos una mayor hondura, rotundidad y una idea mucho más redondeada, basada en la habitual mezcla explosiva de sonoridades diversas, respaldadas por una lírica asfixiante y reflexiva, plagada de imágenes potentes ante las que caer rendido se convierte poco menos que en una obligación.
Nos ponemos en contacto con Medalla, quienes, al igual que sucede con su música, se lanzan de lleno ante nuestro cuestionario para demostrarnos que cuando dicen que van es para hacerlo a muerte.
Medalla vuelve a la carga con “Duelo”, un trabajo que os confirma como una de las maravillosas anomalías de nuestro panorama musical. ¿Qué valoración hacéis del camino recorrido hasta ahora?
Medalla: Primero gracias por el “maravillosa anomalía”, es todo un piropo para nosotros. Nos sentimos cómodos siendo un poco distintos a lo que nos rodea. Molestamos un poco en todas partes, pero conectamos mucho en lo personal con las bandas con las que compartimos escenarios y con nuestro público, que al final es lo importante. Han sido 4 discos en 7 años, puede parecer intenso, pero para nosotros ha sido un camino natural, con evidente evolución. Estamos muy contentos del camino que estamos haciendo y sobre todo muy orgullosos de la gente que nos sigue, público fiel con el que tenemos mucha conexión y que nos demuestra que merece la pena seguir en esto. Internamente hemos pasado por varias formaciones, pero en este disco repetimos como Sueiro, Marc, Joan y Peris, y esto creemos que se nota, nos comunicamos bien entre nosotros y esto influye de forma directa en la actitud y las canciones, compartir ensayos con colegas es una maravilla.
Es curioso, tras haber editado “Medalla” con El Segell del Primavera, “Arista Rota” con Limbo Starr, ahora en “Duelo”, apostáis por la autoedición. ¿A qué se debe esta nueva vuelta de tuerca?
Medalla: Desde el inicio de la banda hemos tenido este espíritu DIY y de hacer las cosas nosotros mismos. Puede dar la impresión que teniendo grandes nombres de sellos detrás ya lo tienes todo hecho, pero nada más lejos de la realidad. Seguimos trabajando como el primer día en todos los aspectos que rodean tener una banda, más allá de hacer canciones. Todos los miembros de Medalla venimos de otras bandas, son muchos años tratando con sellos, y el cambio a la autoedición forma parte de la evolución que comentaba antes. Nos fijamos en lo que pasa a nuestro alrededor y vimos que editar era una opción viable. Ya antes nos encargamos de mucha parte de la edición y nos gustaba estar encima un poco de todo, así que tomamos el paso y estamos contentos. Valoramos mucho el trabajo que han hecho los sellos con nosotros, ahora nos tocaba intentar hacerlo a nosotros y ver qué pasa. Es mucho y mucho trabajo, pero lo tenemos en nuestras manos, todo depende de nosotros y somos más responsables de lo que hacemos.
El sonido de Medalla bebe de multitud de influencias, metal, post-punk, rock, pop, etc… cada vez más afianzadas y con matices personalísimos que bien nos podrían hacer hablar de una sonoridad propia. A la hora de abordar una canción, ¿qué factores determinan los arreglos a incluir?
Medalla: A la hora de componer no nos ponemos muchos límites y raramente identificamos de que influencia ha salido cada línea, riff, ronda de acordes…suele ser cuando alguien de fuera te dice a qué le recuerda que te hace conectar con la influencia. Somos cuatro personas con influencias que no coinciden al 100% metiendo mano a un tema. Cuando pensamos en arreglos e instrumentaciones a incluir en el disco no pensamos mucho en el directo, queremos que quede bien el disco y ya veremos qué tal lo podemos defender en los conciertos. Además, nos gusta que la experiencia del público sea distinta en casa que en la sala de conciertos, el público nota que en directo tenemos una garra que no está tanto en el disco, y que el disco tiene matices instrumentales que en el directo que o no están o convierten en otra cosa. Sergio Pérez nos echa una mano para que todo quede bien ordenado y conectado, y nos ayuda mucho a hacer viable lo que tenemos en mente. Es un genio y su mano es sentencial en el sonido de los discos de Medalla.
En la reseña que realizó nuestro compañero Txema Mañeru, habla de que casi podríamos hablar de un disco conceptual, cosa con la que estoy de acuerdo, pues la temática de las canciones aborda un vacío existencial, propio del mundo actual, mezclado con una relación quebrada sobre la que dais vueltas. ¿Estáis de acuerdo con la afirmación? En caso de que sea sí. ¿A qué responde este hecho?
Medalla: Sí, “Duelo” es un disco conceptual. Al menos es un disco conceptual en el mejor de los sentidos. Tiene un mismo hilo conductor que traza un hilo visible y evidente entre todas las canciones, pero nos permitimos estirar un poco la fórmula de disco conceptual para no caer en el tópico teatral de la ópera rock, por ejemplo. Es decir, no tiene un inicio, nudo y desenlace: no obligamos al oyente a que siga un camino marcado y que entienda algo que establecemos nosotros como creadores. Más bien cada oyente conectará con las canciones según sus experiencias vitales. Estamos recibiendo feedbacks intensos de gente que se ha sentido muy identificada con alguna canción. El artwork del disco va muy ligado al concepto, y en esto ha jugado un papel vital Lidia Arruego, que se encargó de la dirección artística del proyecto. Cuando tienes el disco en la mano o ves los videoclips entras aún más en el universo “Duelo”.
El álbum está dominado por esa atmósfera, sin embargo, hay resquicios de esperanza como “Abandonarse a la Tristeza”, donde cantáis “Abrazar el fracaso te hará libre, te hará crecer”. ¿A quién se le ocurrió una frase tan dolorosa como bella?
Medalla: Las letras las escribe Sueiro. Esta canción fue una respuesta a todo el dolor que concentran muchas de las canciones del disco. No queríamos caer en la redundancia de hablar de la tristeza sin aportar ninguna respuesta y encontramos que partiendo del fracaso sólo se puede ir hacia arriba. En cierta manera es algo que se puede extrapolar a tener una banda: prepárate para fracasar y a partir de ahí todo irá a mejor.
Medalla: No conocíamos esta versión, ahora que lo dices sí que hay ciertos paralelismos. “Jardín de Puñales” es la canción más extrema del disco. Si te dijéramos que la hicimos pensando en algún referente mentiríamos. Simplemente sucedió. El flamenco tiene algo que nos seduce muchísimo y siempre en nuestros discos intentamos incluir alguna canción que tenga esa influencia un poco más flamenca, salvando las distancias, puesto que somos gente con mucha distorsión y escasa formación musical.
Me ha flipado mucho, la verdad es que son dos de mis formaciones del pop-rock nacional favoritas, sobre todo los Gabinete de la etapa siniestra, quizás por eso me gusten mucho también ciertos ramalazos de Biznaga…
Medalla: Biznaga son un grupo que nos encanta y admiramos. De hecho, en su primer y segundo disco hay muchas canciones que comparten atmósferas lúgubres como en algunas nuestras, como en “El Mal de Aurora” o “Una Nueva Época del Terror”.
¿Cómo está siendo la reacción del público cuando tocáis en directo ese pepinazo que es “Banderas a Media Asta”?
Medalla: Bastante apoteósico, más teniendo en cuenta que el estribillo no debe durar ni 10 segundos. Estamos abriendo los conciertos con el tema ahora, nos gusta empezar con fuerza.
Cerráis el disco con “Duelo”, un emocionante dueto junto a Valdivia, donde abogáis por la necesidad de parar y curar las heridas. ¿Es el alegato más potente que se podía hacer contra esta velocidad viciada e insensible del día a día en que vivimos?
Medalla: El ritmo y la presión diaria nos está matando, vivimos en una sociedad cada vez más enferma y los mensajes positivistas y de autosuperación a los que estamos constantemente expuestos son muy tóxicos. “Duelo” en parte es fruto de todo esto y contiene vivencias personales de gente cercana a Medalla que ha pasado y está pasando por esto. Con “Duelo” cerramos con un mensaje positivo, una canción en la que la luz del texto y de la voz de Valdivia te hacen salir a la superficie para tomar un respiro, con suerte un poco más sanador.
En un panorama con tan poco riesgo y tendente al mimetismo. ¿Cuál es el hueco que puede habitar Medalla? ¿No os jode un poco estar en tierra de nadie? ¿Creéis que eso puede lastrar la calidad de una propuesta tan notable como la vuestra?
La verdad es que bandas como El Columpio Asesino, Lagartija Nick, los más jóvenes Biznaga y vosotros tenéis cosas en común, a pesar de que hay particularidades entre unos y otros más que evidentes. ¿Sentís que tenéis cosas en común con ellos? ¿Para cuándo un verdadero festival de artistas comprometidos con el arte y la creación?
Medalla: Todas las bandas que has citado nos gustan y las tenemos de referente en mayor o menor medida. Seguramente tenemos en común no querer hacer las cosas de una forma pre-establecida y buscar recovecos en la forma de hacer canciones para que en 2023 siga teniendo sentido crear nuevas. Sobre la pregunta de los festivales, es difícil de decir. Nosotros con que no repitan el mismo cartel a lo ancho y largo del país nos conformamos, a veces parece que los carteles se hagan con inteligencia artificial.
En las próximas semanas estaréis arrancaréis una tanda de conciertos que os traerá a Madrid, entre otros lugares. ¿Qué tal se porta el público capitalino con vosotros?
Medalla: Pues genial siempre. Madrid es casa. Tenemos ganas de enseñar las nuevas canciones y cantarlas todes juntes con el puño en alto.
¿Qué planes de gira tenéis cerrados ya?
Medalla: Antes de terminar el año presentaremos el disco en Barcelona y Madrid. En 2024 tenemos fechas ya cerradas en Logroño, Oviedo, Lleida, Zaragoza, Ebrovisión… La máquina de plata no va a parar.
Habéis hecho una edición limitada en formato físico de “Duelo”. ¿Qué rentabilidad tiene algo así para una banda como Medalla? ¿Qué futuro le auguráis a la edición física?
Medalla: Para nosotros es una fuente de financiación importante, por eso le damos tanta importancia. También, esto es así porque somos 100% independientes. Si tuviéramos que repartir las migajas entre más, difícilmente sería viable. La edición física tiene futuro si se mima y se trata con cuidado. Da la sensación de que ahora se edita absolutamente todo en vinilo y quizá tampoco es necesario, si no que le pregunten a los vinilos de Adele en FNAC a 3€.
¿Qué alternativas justas veis a las plataformas en las que los artistas son los únicos que no cobran lo que merecen?
Medalla: Nosotros sobre todo vemos un problema de intermediarios y de contratos discográficos anticuados con porcentajes sobre la venta digital absolutamente fuera de lugar. No sabemos qué alternativa habrá en el futuro próximo, pero sí que es cierto que las cosas tienen que cambiar. Nuestra recomendación para todas las bandas es que la música tiene que ser vuestra. Vigilad lo que firmáis.
Mil gracias por vuestro tiempo, ha sido un placer poder escuchar con calma “Duelo”. Ojalá más propuestas como las de Medalla en nuestro panorama.
Medalla: Ahí seguiremos, al pie del cañón y sin ser AC/DC.
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