Cat Power Sings Dylan: "The 1966 Royal Albert Hall Concert"


Por: Àlex Guimerà

Publicado como Bootleg número cuatro, es decir, el primero tras el paquete con los pertenecientes del uno al tres, el concierto de Bob Dylan conocido como "The 1966 Royal Albert Hall Concert" es uno de los grandes hitos de la historia de la música, pues es fiel testigo de la transición del joven cantautor folk al rockero ingenioso y transgresor. Grabado justo el siguiente día de la publicación del "Blonde On Blonde", el 17 de mayo de 1966, en plena gira mundial, en realidad el lugar del concierto fue el "Free Trade Hall" de Manchester, aunque durante años en las ediciones pirata que fueron corriendo entre los fans se conocía como el "Concierto del Royal Albert Hall", debido a la falsa creencia de que las interpretaciones correspondían a los conciertos que en la misma gira pasaron por la prestigiosa sala londinense.

Compuesto de un primer set acústico y un segundo electrificado, de allí proceden los gritos de "Judas" cuando un fan increpó al bardo por haberse pasado al rock, a lo que este le contestó: "No te creo, eres un mentiroso". Tiempo después, Dylan desparecería de la vida pública tras sufrir un accidente de moto refugiándose en la vida hogareña en Woodstock, lugar en donde grabaría los legendarios "The Basement Tapes", junto a The Band. Atrás quedaba la época dorada de los sesenta del músico con una trilogía imbatible para la posteridad, y de la que había sido clímax ese tour de conciertos que gracias a Dios podemos recuperar.

Han pasado casi sesenta años y Robert Zimmerman tiene todo un reconocimiento unánime del panorama musical y cultural, ahora incluso es Premio Nobel, sigue regalándonos conciertos magníficos y enormes destellos de genialidad como es su último trabajo "Rough & Rowdy Ways" (2020). Varias generaciones de músicos han seguido sus enseñanzas y su legado es un manantial al que muchos solemos acudir con mucha frecuencia. Se ha escrito de todo alrededor de su obra, y sus canciones han sido versionadas como el que más.

Por ello parece que un disco de versiones de un directo suyo poco nos pueda aportar, si bien la encargada de hacerlo en esta ocasión es una habitual de los "covers", como es Cat Power, o Charlyn Marie. La cantautora de "The Greatest" lleva desde 2018, fecha de la que data su último trabajo de estudio con canciones propias ("Wanderers"),  sin publicar material nuevo, habiendo grabado entre medio una banda sonora junto a Eddie Vedder y a Glenn Hansard ("Flag Day" de 2021) y un disco de versiones de temas de Iggy Pop, Lana Del Rey o Nick Cave ( "Covers" de 2022). Por este motivo lo lógico era esperar una vuelta con temas propios, pero la de Atlanta nos dio la sorpresa con este trabajo clon del legendario concierto que viene acompañado por una gira en la que lo interpretará íntegramente.

No podemos dejar de planteamos si era necesario tal artilugio a estas alturas de la carrera de Chan Marshall, y si el disco va aportar algo nuevo a sus fans y a los del propio Dylan, o si estamos hablando de una estrategia comercial para ganar tiempo y poder componer un nuevo trabajo a la altura. Además recientemente habíamos tenido discos "dylanianos" a cargo de nombres consagrados como Ryan Adams o Lucinda Williams, lo que nos daba pistas de la poca originalidad del proyecto.

Pues tras una minuciosa escucha del álbum podemos afirmar que no tenemos respuesta a todas nuestras dudas, pero si que podemos decir sin lugar a dudas que este nuevo paquete de casi hora y media de duración es muy disfrutable y contiene un aura  que le da su toque especial. Grabado en directo el 5 de noviembre de 2022, esta vez sí, en el Royal Albert Hall, dicha fecha había sido reservada a la cantante para interpretar el mítico concierto con los dos sets y emulando fielmente al original, con las mismas canciones, el mismo orden e incluso idéntico comentario del espectador "purista del folk" en la segunda parte.

La escucha arranca con la cantante atacando "She Belongs To Me", con mucho intimismo y una harmónica que suena a las mil maravillas. Es la tónica del primero de los dos discos de este esforzado trabajo: solemnidad, romanticismo y cercanía. La guitarra acústica, eje del folk, queda eclipsada por la cálida voz de Marshall, quien logra transmitir su sentimiento por lo que canta a la vez que una harmónica es soplada de forma preciosa, adornando los compases de esas gemas que son "Visions Of Johana", "It'ss All Over Now" o "Desolation Row", que por mucho que dure siempre se nos hace corta. La cima de esta parte del show lo ponen dos de las canciones más bellas jamás escritas, "Just Like A Woman" y "Mr. Tambourine Man". Si bien en el concierto original escuchamos a un poderoso y dramatizado Dylan defendiendo sus poesías con una fuerza natural descontrolada, aquí su discípula se muestra mucho más calmada, comedida, reflexiva e incluso etérea.

Para la parte eléctrica, la solista se apoya en sus Hawks-Band particulares, que son el guitarrista Arsun Sorrenti, el bajista Erik Paparozzi, Aaron Embry (armónica y piano) , Jordan Summers (órgano), y el baterista Josh Adams. Seguramente la dulzura de la cantante no puede emular el descaro y la arrogancia que Zimmerman desplegó hace más de cincuenta años, ni los instrumentos se escuchan tan titánicos como en la versión original, pero hay que decir que tampoco es la pretensión de unos nuevos intérpretes que defienden el reto muy dignamente.

De este modo fluyen monumentos del rock como "Just Like Tom Thum's Blues", "Leopard-Skin Pill-Box Hat" o una "One On Two Many Mornings" que se endulza como nunca. La parte final es rompedora a cargo del blues "Ballad Of A Thin Man", que carece de esa mala leche que sólo Dylan sabe darle, y sobre todo con la eterna "Like A Rolling Stone", que a manos de otros siempre va a desmerecer pero que Marshall sabe llevarse a su terreno y nos logra convencer.

Es un fiel homenaje a Bob Dylan por parte de una de las grandes músicos folk-pop de nuestros tiempos, que de nuevo nos demuestra sensibilidad musical y capacidad de adaptación en pieles ajenas, para regalarnos este capricho personal que le agradecemos por el modo cómo lo ha ejecutado con una gran sensibilidad y respeto a tal hito en la historia del rock. La duda que todavía se nos plantea es con el título del disco, "Cat Power Sings Dylan: The 1966 Royal Albert Hall Concert", pues, ¿habrá más ediciones dedicadas al de Duluth? De momento sabemos que el extenso Tour de promoción pasará por Barcelona el próximo verano (Festival Alma 9 de Julio). A apuntar la fecha pues.