Melomanía: Anibal Sánchez (The Bright)

Hoy en nuestra sección Melomanía cerramos el circulo que semanas atrás abrimos con Myriam Gutiérrez, vocalista y cincuenta por cien del dúo The Bright. Esta semana por el rincón más sentimental de nuestra web se deja caer Anibal Sánchez, el otro componente de esta sociedad afincada en León a la que conocimos hace unos meses, gracias a un Ep repleto de calidez y sentimiento que nos hizo interesarnos de inmediato por su propuesta.


Las suyas son elecciones repletas de gusto y calidad compositiva. Tras leer detenidamente cada uno de los discos y canciones que ha decidido incluir en su listado, uno encuentra explicación lógica a todo lo bueno que ocurre cuando se tiene el placer de ver a The Bright sobre un escenario. Y es que este par de jóvenes desprenden un encanto y una clase en sus composiciones, como pocos son capaces de hacer. Todo aquello que interpretan está plagado de buen gusto, cada fraseo, cada arpegio es revestido de un barniz de sencilla belleza que enamora desde la primera escucha. Ante semejantes argumentos uno no puede más que rendirse incondicionalmente ante su propuesta.

The Bright editarán el próximo 29 de marzo su primer disco titulado, “Soundtrack for a Winter´s Tale”. Desde esta web esperamos con impaciencia ese día. Hasta entonces os dejamos con las personales elecciones de Anibal. Un consejo buscadlas en vuestra estantería y disfrutadlas una a una, son los temas favoritos de un tipo con mucho talento.

Discos:


The Band- The Band

Este es mi disco favorito, puedo decirlo bien alto. Recuerdo perfectamente cuándo lo compré. Había hecho un examen para un puesto de funcionario en la Seguridad Social que me salió fatal. A la semana siguiente tenía que volver a Madrid para leerlo, y volví a Madrid, pero pasé de presentarme. En su lugar me metí en Madrid Rock (poco antes de que la cerraran) y me compré este disco. Aquel día cambió mi vida en muchos sentidos, y aún creo que gran parte de culpa la tiene Richard Manuel, cantando "agárrate el sombrero y empieza a cabalgar” en "Across The Great Divide". Le hice caso, y aún no he parado.


Bluesbreakers- John Mayall with Eric Clapton

¡Si lo tuviera en vinilo seguramente ya estaría rayado! Lo compré con 17 años, en Carrefour, cuando aún se llamaba Continente. Se puede decir que aprendí a tocar la guitarra con este disco, me pasaba horas fijándome en lo que hacía Eric Clapton, esos fraseos maravillosos y llenos de gusto, y ese sonido increíble de Gibson Les Paul. Aún sigo copiando muchas de sus frases y trucos. Para bien o para mal, no he recibido una
clase de guitarra en mi vida, y creo que lo más parecido a un profesor que he tenido ha sido Eric con muchos de sus discos, pero sobre todo con este.


Gp/Grievous Angel Gram Parsons

Estos dos discos de Parsons (casi siempre se editan juntos) fueron los que me metieron en el country de cabeza. Llegué a su música indirectamente, siendo fan acérrimo de los Rolling Stones, por la influencia que tuvo en Keith Richards. Y reconozco que a la primera me costó: nada más darle al play, con "Still Feelin' Blue", empieza a sonar un fiddle country a todo trapo, y un ritmo lo menos rockero que uno se puede imaginar. Pero al final lo pillé, vaya si lo pillé. Me enamoré de Gram Parsons, su manera de cantar y de escribir, de su compañera de fatigas Emmylou Harris y de su increíble banda. Y empecé un viaje hacia atrás Buck Owens, Merle Haggard, Johnny Cash, Hank Williams... El country me atrapó para siempre.


Ragged Glory - Neil Young & Crazy Horse

En realidad podría escoger entre unos cuantos de su discografía, porque Neil es el mejor, pero este es especial para mí por varios motivos. Recuerdo que cuando tocaba con mi primer grupo, los Backliners, todos éramos muy fans de Neil, y se puede decir que éste era nuestro disco de cabecera. Llegamos a tocar hasta tres canciones de este álbumes nuestros conciertos, e incluso grabamos una versión del tremendo "Fuckin' Up" en nuestro primer y único disco. Cuando pude ver a Neil Young en directo, el año pasado en San Sebastián, empezó su concierto con "Mansion On The Hill". No pude cerrar la boca en todo el show. ¿Ya he dicho que Neil Young es el mejor?


Wildflowers - Tom Petty

¡Escoger un disco de Tom Petty es muy difícil! Cada vez que voy con Miryam en el coche a algún concierto, no pasa media hora de viaje sin que uno de los dos diga: "pon a Tom Petty". Nos gustan todos, aunque creo que éste es mi favorito, por la gran madurez que muestra, por estar tan bien grabado y producido, y por las maravillosas canciones, que tocan todos los palos que Tom Petty domina tan bien. Además es un disco muy variado, y eso es algo que se echa de menos en muchos artistas contemporáneos, hoy día parece que en cuanto te ponen una etiqueta tienes que hacer todas las canciones iguales. Tom Petty es uno de los que mejor demuestran que hay otra forma de hacer las cosas.


Canciones:


Hellhound on my Trail - Robert Johnson

Mi primer contacto con Robert Johnson fue en la Universidad. Un compañero de la Facultad, que tocaba la guitarra, se enteró de que yo también tocaba y me grabó un CD con todas las grabaciones de este bluesman diciéndome, "esto te va a gustar". Acertó, me quedé alucinado durante varios días escuchando esas maravillas, ese sonido oscuro que te transportaba de inmediato a la habitación de hotel en Texas, donde se grabaron todas esas canciones sobre el demonio, las mujeres, el vicio y el arrepentimiento, en los años 30. "Un sabueso del infierno me sigue la pista". Todavía me lo pongo a veces, a oscuras, con los auriculares, y me siento igual de transportado que la primera vez que lo escuché.


Only the Lonely- Roy Orbison

Uno de mis cantantes favoritos, y además una de mis primeras pasiones musicales, puesto que me encanta desde que era un niño. Antes de tocar ningún instrumento ni tener la menor idea sobre música apreciaba las melodías de sus canciones, como esta o "In Dreams", y además me resultaba un hombre con una apariencia muy simpática. Pero hace unos años me di cuenta de la verdadera dimensión de este gigante del rock and roll, y de la increíble voz que poseía. Aunque no puedo decir que por eso me guste más, ya me volvía loco escucharlo con siete años.


Just Like a Woman- Bob Dylan

Poco después de terminar la Universidad, tuve mi etapa obsesiva con Bob Dylan. Me podía pasar horas escuchando sus discos, y uno de mis favoritos era sin duda el Blonde On Blonde. Esta canción en concreto me parecía increíble, y me lo sigue pareciendo en todos los sentidos; la letra, la voz, los instrumentos. Una canción perfecta, además siempre me ha encantado la forma de escribir de Dylan sobre las mujeres, sabe presentarlas rodeadas de misterio y magia. Con Bob Dylan es fácil enamorarse de una chica solo por la descripción que te hace de ella.


Long Black Veil - Lefty Frizzell

Tengo varios motivos para escoger esta canción, grabada originalmente por Lefty Frizzell en 1959: en primer lugar ha sido versionada por alguno de mis artistas favoritos, como The Band o Johnny Cash, y cada uno ha sabido siempre darle su toque personal. Además se trata de una canción perfecta en muchos sentidos, y tiene una de las mejores letras que se han escrito jamás. Alguna vez la he tocado en directo, y es una
historia tan triste, dura e injusta que es difícil no emocionarse con ella.


Dar was the Night, Cold Was The Ground - Blind Willie Johnson

Para un ateo como yo, puede parecer raro incluir en esta lista un instrumental de guitarra sobre la crucifixión de Jesús, interpretado por un predicador negro y ciego a finales de los años 20. Pero este es otro de esos temas especiales, con una dimensión espiritual que va más allá de la propia música. Blind Willie Johnson es uno de los mejores guitarristas americanos, y este instrumental es un ejemplo de cómo se puede llegar a tocar el alma del hombre mediante un instrumento musical, algo al alcance de muy pocos, y que desde luego no tiene nada que ver con el virtuosismo ni la técnica.