Madrid, Sala Galileo Galilei, Lunes 28 de Febrero de 2011Gran expectación para ver el que se suponía que era el último concierto de Los Toreros Muertos en la sala Galileo. Colas en la calle y un lleno total, se quitaron las mesas para albergar a más gente dispuesta para divertirse con el grupo de Pablo Carbonell, Many Moure y Guillermo Piccolini acompañados esta vez por el batería César López Araque, que ya se encargaba de los tambores en la época gloriosa del grupo.
Ataviado con un mono de trabajo, un nervioso Pablo apareció en escena para darnos su particulares clases de inglés con “On the desk” y enlazarla seguidamente con su canción homónima y su brutal letra “acaba de entrar Manolete con una mano en el boquete”, una canción así hoy levantaría un escándalo considerable, pero entonces a mitad de los 80 vivíamos algo que hoy parece que esta en desuso, la libertad de expresión.
Agarró Pablo su guitarra (que le dio bastantes problemas durante la noche) para atacar el primer éxito de la noche “Mi agüita amarilla” que enlazó con “Esta tarde vi llover” de Los Panchos. El ambiente se caldeó con la anti-monárquica “Bum bum 1789”. Ya con la sala ardiendo Carbonell nos roció con agua, se subió a una mesa que tenia cerca para cantarnos eso de “Soy un animal”. Siguió la velada con las aparentemente inocentes “A tu casa” y “Pilar” o la angelical “Hoy es domingo” enlazada con una peculiar versión de “Another brick in the wall” de Pink Floyd reconvertida en “Otro ladrillo en la fachá”.
Vibrantes sonaron “Abalista” y una cambiada “Yo no me llamo Javier”, tras la cual hicieron un breve break para el cambio de vestuario de Pablo reconvertido en joven exploradora para hacer el celebre “Soy falangista”. “Manolito” fu
e reconvertida en himno gay introduciendo el “Y.M.C.A” de los Village People. Tras la surrealista “Tu madre tiene bigote” y la muy pop “Para ti” se despidieron momentáneamente.Volvieron con un aclamado bis, la anfetamínica “D.N.I.” y la inclasificable “Zis-zas”.
Un “hasta siempre” de Pablo y una aclaración “No creáis todo lo que dicen por ahí, nosotros somos como las farmacias de barrio que llevan de liquidación total 15 años”.
Pues eso que con un poco de suerte esto es un inicio, de momento los tendremos en junio en el festival “Mundo idiota” de este año.
Texto: Jorge Bravo Crespo
Fotos: Alberto Vicente
