FIB 2011 Parte (III)

Sábado 15 de Julio.Simle, Lori Meyers, MumFord $ Sons y Arctic Monkeys
Hoy ya es sábado y hemos pasado el ecuador del festival. Tenemos por delante una nueva jornada de música, que al igual que el día anterior estará principalmente marcada por nuestra presencia en el Escenario Maravillas (Escenario principal): Lori Meyers, Mumford & Sons, Arctic Monkeys y Primal Scream.

El día de hoy se verá marcado en parte por la “elección”, pues a primera hora de la tarde llega nuestra primera duda: Nadadora (grupo gallego de pop tranquilo, sosegado y de calidad, que originalmente cuenta con una voz femenina (Sara Atán) y masculina (Gonzalo Abalo)) o Smile (grupo de Getxo que fusiona rock, pop y folk bajo un espíritu alegre y surfero). Nos decantamos por esta última (pues ya hemos disfrutado de Nadadora en esta web en otras ocasiones).

Nos dirigimos así al Escenario Fiber Club (19:45), donde hacen su aparición el quinteto conformado por Smile. En los siguientes 45 minutos, la banda liderada por John Frank (vocalista, compositor y guitarrista británico de nacimiento, pero vasco de corazón) comienza a revisar los dos discos que tienen en el mercado: Painting the Sun one color, 2007 y All roads lead to the shore, 2011, cargando el peso del directo en este último. Disfrutamos así plácidamente de un concierto alegre y divertido (pues a inicios del concierto no seríamos más de 200-300 personas las que allí nos reuníamos, aunque poco a poco la gente se fue uniendo hasta el final del mismo). El concierto estuvo marcado por la intensidad de grupo, su unión y buen rollo (cantando alguna canción a partes iguales) y su afán por meter al público dentro del directo (ya fuera introduciendo el estribillo del “All you need is love” de los Beatles en su tema “All he need” o tirando piruletas en forma de corazón durante la misma). Fue así como fueron distribuyendo sus pequeños himnos alegres y bailables: “Island Paradise”, “Time to go”, “Every time”, “Do as I want to” (con ukelele pero sin silbido) o “Happy People”. En fin, banda recomendable y a seguir dentro del panorama patrio.

Concluido el concierto decidimos movernos al Escenario Maravillas para ver nuevamente a una banda nacional, en este caso nos referimos a los granadinos Lori Meyers. Encontramos ahora un escenario principal repleto de público en sus dos primeros cuartos de aforo (donde cogimos lugar preferente) y algo más difuso en el resto. En conclusión, estábamos ante el concierto de música en castellano que más gente iba a reunir en este FIB 2011, creando una preciosa estampa que estaba predispuesta a cantar y bailar los temas de la banda capitaneada por Noni. A las 21:30 se presenta el sexteto andaluz perfectamente trajeado (camisa blanca con chaqueta, pantalón y corbatín negro) abriendo el directo con “Viaje de estudios” (primera canción del primer álbum, lo cual venía a decir algo así como: “De aquí procedemos”). A partir de ese momento, se desarrolló un concierto de aproximadamente una hora que repasó sus cuatro discos (en el que no pudimos disfrutar de la presencia que más queríamos, mientras escuchábamos la ausente “Mujer esponja”), enlazando rápidamente los temas de los mismos con menos discurso del que Noni nos tiene acostumbrado (pero con la referencia futbolera de que el Granada es equipo de primera, eso sí). Hubo tiempo para todo, desde para cantar al amor y desamor (Luciérnagas y Mariposas, Mi realidad, Rumba en atmósfera cero, Tokio ya no nos quiere) hasta para la crítica a la sociedad de consumo (Religión, Corazón elocuente). Un concierto genial, diferente e intenso, que acabó con Noni en pantalones únicamente, plasmando el agradecimiento de la banda a la presencia y motivación del público.

Tras esto llega la segunda elección de la tarde: Bombay Bicycle Club (banda londinesa de rock independiente, que actualmente se ha abierta al folk y que está en vísperas de presentar su tercer álbum) o Mumford & Sons. Finalmente decidimos quedarnos en el Escenario Maravillas y hacer algo de tiempo (visitando la barra algo más que esporádicamente), pues nos decantamos por el concierto protagonizado por la banda llamada a priori a ser revelación del FIB 2011, Mumford & Sons (23:00). Decimos revelación, pues la organización ha escogido al grupo como una de las cabezas del Festival tanto en el cartel físico, como en las entradas, promoción y web. Realmente, el caso de Mumford & Sons es reseñable, pues con sólo un disco (Sigh no more, 2009) esta banda inglesa de folk rock ha gozado de un impresionante apoyo de crítica y público (su tema “Little Lion Man” cuenta con más 25 millones de visitas en Youtube y “The Cave” con casi 10 millones). Con altas expectativas recibimos así en el escenario a Marcus Mumsons y sus “hijos” (tres virtuosos compañeros de viaje). A lo largo de casi una hora desplegaron completamente su primer disco haciendo uso de guitarras acústicas, bajos, banjos, mandolinas, acordeones, drobos, contrabajos, baterías y percusiones. Resonaron especialmente: Little Lion Man, The Cave, Winter Winds, Sigh no more o Timshel en un concierto preciosista que asombró a más de uno y que pone una baliza a este grupo, que no debe ser perdido de vista cuando el próximo año estrene su segundo álbum de estudio.

Tras Mumford and Sons, el escenario lo recogería otra banda británica, Arctic Monkeys. Arctic Monkeys era posiblemente el grupo más importante que había de tocar en el festival para un alto porcentaje de público (más concretamente público anglosajón de entre 18 y 28 años, es decir, la mayoría del público del FIB). Sin embargo, en nuestro caso no era así, pero ¿quién va a perderse a esta banda en directo? A las 00:30 aparecieron en el escenario este cuarteto de Sheffield. Era hora de presentar en España su cuarto disco Suck it and see, 2011, escogiendo un sistema muy parecido al usado el día anterior por The Strokes, es decir, arropando el último disco con los grandes hits de sus trabajos anteriores; aunque estos si abrieron el espectáculo con “Library pictures”, procedente de su último álbum. Tras ello, los “monos árticos” realizaron una selección acertada de sus mejores temas: “Brainstorm”, “Teddy Pickers”, “The View From The Afternoon” o “Bet You Look Good On The Dancefloor”, acompañadas por los cortes más sobresalientes de su último disco: “She is Thunderstorms”, “Don't Sit Down 'Cause I've Moved Your Chair”, “Brick by brick” y “The Hellcat Spangled Shalalala”. En total un concierto de 17 canciones llenas de agilidad, ritmo, cambios y parones bruscos típicos de esta banda alternativa en origen (pues fue apadrinada por el fenómeno myspace), que culminó su obra volviendo al escenario (algo no hecho por The Strokes y que empañó su gran concierto) tocando: “Suck it and see” (que da nombre a su último álbum) y dos de sus mayores hits “Fluorescent adolescent” y “505”. Gran concierto de los británicos hacia todos sus fans, donde poco se les puede tachar.

Concluido el concierto le llegaba la hora a Bobby Gillespie y su banda, Primal Scream. La mítica banda escocesa venía preparada para poner en directo su álbum más reconocido, Screamdelica, 1991, tercer disco de la banda (considerado uno de los mejores 30 discos de la historia por diferentes listas y críticos) que dejó en parte de lado el rock y abrazó el acid house, el gospel y el dub, creando temas tan conocidos como “Loaded”, "Higher Than The Sun" o “Come together”. Sin embargo, con este concierto nos invadió el agotamiento (más de 7 horas de conciertos ese día y tercera jornada del FIB a la espalda) y no pudimos más que ver su inicio. En fin, había que recargar fuerzas pues mañana llegaría la cuarta y última jornada del festival con dos grandes nombres propios: Portishead y Arcade Fire.


Por: Rubén López Sánchez
Fotos: Natalia del Olmo (Smile) y Archivo Fib / Óscar L. Tejeda (Lori Meyers, Mumford & Sons, Arctic Monkeys y Primal Scream)