Quäsar: El embrujo granaino

Madrid, Sala Ramdall, 21 de Marzo de 2012.

De las cenizas del mítico grupo punk de los ochenta TNT, Jesús Arias y Ángel Doblas han formado Quäsar, un proyecto, completado con la presencia en directo de Guillermo Crovetto, a las voces, César Rodríguez, guitarra, y Antonio Cervera, a la batería, que nace con la única finalidad de dar salida a un ambicioso proyecto que bajo el nombre de “Eclipse” pretende unir en un álbum de cuarenta canciones la herencia flamenca y árabe, junto con el rock, el punk y hasta la música sinfónica. De momento doce son los temas que, en una suerte de adelanto, han visto la luz dentro de “Eclipse parcial de Luna” y que ahora están presentando.

Una pena que el público no acudiera en gran cantidad a ver un espectáculo hecho con mimo, igual de bueno, o incluso superior, a proyectos similares como el Los Evangelistas, que están contando con una mayor repercusión mediática, y con una calidad artística brutal, fuera de toda dudas, que nos dejó, a los pocos que nos acercamos a verlo, alucinados.

Empezaron con una introducción pregrabada “Seguiriya del Hierro I”, donde el cantaor Jaime Heredia (El Padrón) canta una canción que debía haber correspondido al maestro y recordado Enrique Morente, pero que no fue posible que grabara por su repentino y dramático fallecimiento.

La velada continuó con el punk rock de “Agonía, Agonía” y “Electric Miles”, para recordar seguidamente a TNT con la chulesca “Deberías de tener Cuidado” y la apocalíptica “1984”, dando forma a un espectáculo de lo más ecléctico tal y como se demuestra en los ritmos sintéticos de “Dos Lunas” o en la balada “El jardín Extranjero”.

Uno de los mejores temas de la noche fue “Vivir a Medias” tema de Jesús Arias que ya grabaron en su momento el grupo Sin perdón, donde militaba José Antonio García “El Pitos” legendario cantante de TNT y 091, ahora en Guerrero García.

Para “Mare Tranquilitatis”, Jesús invitó a la gente a tomar Lsd y drogarse solamente de esa manera podrían disfrutar del tema más psicodélico de la noche, con grabaciones de astronautas de la Nasa incluidas. Poco tiempo después sonó “Eclipse” el corte que da nombre al ambicioso proyecto, que todavía no está terminando, sonando como adelanto de todo lo que nos espera y que no hace más que dejarnos con muchas ganas de disfrutar de la obra completa.

Una de las sorpresas de la noche fue la fusión que hicieron del “Helter Skelter” de los Beatles con alguns versos de Federico García Lorca, sorprendente, impactante, sin duda alguna una de las mejor recibidas de la noche.

Hasta tuvieron tiempo de acordarse de un grupo punk que no pasó de ser maquetero por culpa de la maldita heroína. Estamos hablando de La Noche de los tiempos de los que hicieron una maravillosa adaptación de “Situación Limite”.

El lado reivindicativo tuvo también cabida durante la velada, mostrando que en la música de Quäsar está muy presente. Una muestra de ello es “Exxon Valdes” nombre del petrolero que arrasó las costas en el 1989 y que han estado a punto de cambiar por el del “Prestige”. Por la misma senda continuaron al proclamar que la siguiente canción era “Una crítica a los bancos que nos están jodiendo la vida” como dijo Jesus Arias, para introducir “Europa, Europa”.

El momento más especial de la noche fue cuando descubrieron una foto de Enrique Morente y le rindieron un merecido homenaje, contando con el apoyo vocal de Gloria Mur que cubrió las partes vocales de Estrella la hija de Enrique en la magistral “En un sueño Viniste”.

No fue el único homenaje que tuvo lugar durante su actuación puesto que también recordaron a Eduardo Benavente de Parálisis Permanente, para el mismo no dudaron en llamar a la que fuera su pareja y recientemente triunfadora en la Sala Kapital, Ana Curra, quien demostró su fuerza en el escenario al atacar “Unidos”.

Para los bises volvieron a recurrir otra vez a TNT de los que rescataron “Gilmore 77 y la coreada “Cucarachas”, pertenecientes al seminal “Manifiesto Guernika”, sin duda alguna uno de los mejores trabajos que se facturó en la década de los ochenta en nuestro país, con las que dieron por concluido el espectáculo.

Un concierto de diez que sin duda mereció más público del que se acercó la pasada noche hasta la sala de calle Ferraz para presenciar todo un acontecimiento. A buen seguro que mucha gente prefirió quedarse en su casa chateando o viendo el fútbol. Una auténtica pena.

Texto y fotos: Jorge Bravo Crespo “El Gurú”