Entrevista AER

“Creo que nuestro disco tiene una base rockera muy hispana”

Hace unos meses que AER ponía al alcance del gran público “Recuerdos del Futuro”, el disco que supone el primero en su particular discografía. Un compendio de once composiciones cargadas de sinceridad y visceralidad capaces de remitir por sí mismas a las mejor tradición del pop-rock de los ochenta y noventa, ya sea de facturación nacional o internacional, puesto que en sus canciones es sencillo encontrar ramalazos que podrían emparentarles sutilmente con grupos del calado de The Cure, The Smiths, El Último de la Fila o El Niño Gusano.

Desde “El Giradiscos” no quisimos dejar pasar la oportunidad de vernos las caras con Eduardo Zubiaur, guitarra, vocalista y principal compositor del grupo, para que nos hablara, en el marco de una extensa entrevista, de todo lo relacionado con el primer trabajo de AER.

En primera instancia nos gustaría saber, ¿qué ha ocurrido a lo largo de estos tres años en que ha tardado en ver la luz el primer álbum de AER?

Eduardo:Durante todo este tiempo hemos vivido un proceso de búsqueda, tanto humana como en lo que respecta al sonido del grupo. Pues no todos los componentes del mismo nos conocíamos de antes. Una vez que el núcleo estuvo formado comenzamos a hacer una serie de presentaciones en directo en formato trio. En una de ellas nos vieron Manuel Carretero y Javibu Colmenero, productores de “Recuerdos del Futuro”, quienes se interesaron por el proyecto. Fueron ellos quienes empezaron a aportar una visión externa sobre ciertos aspectos que había que cambiar en el seno de la banda, armonizando de esa forma nuestro estilo y casi nuestro directo. Todo ese proceso unido a la necesidad de elegir un repertorio nos ha llevado bastante tiempo.

¿En qué momento fueron apareciendo las composiciones que finalmente han dado vida al álbum? 

Eduardo: La mitad de las canciones han ido apareciendo desde el año 2009 hasta ahora. Sin embargo el resto son anteriores a ese período de tiempo. Por ejemplo “Coche” es una composición que yo hice estando todavía en El Polaco, mi anterior grupo. Era una rumba que quise integrar en su momento pero que dicho sea de paso a mis ex–compañeros no les gustaba nada. Nosotros no íbamos por ahí. Sin embargo yo sentía que me encontraba a gusto con esa búsqueda que estaba iniciando. Después me vine a vivir a Madrid para seguir componiendo canciones nuevas, las que finalmente han entrado a formar parte de “Recuerdos del Futuro”.

Antes de seguir avanzando y aunque suene tópico creemos que es obligado preguntarte por el título del disco, “Recuerdos del Futuro”. ¿Qué querías expresar con él? ¿De dónde surge ese nombre?

Eduardo: Básicamente al buscar el nombre lo que uno pretende siempre es que llame la atención. El título está extraído de un libro que se llama “Recuerdos del Futuro”, una obra del autor suizo Erich von Däniken en cuya introducción se pregunta si “recordará la crisálida que será mariposa”. A mí me evoca algo de ciencia-ficción, casi de viaje en el tiempo, un concepto que también me interesa bastante. Es una forma de querer decir que nos gustaría que el disco fuera recordado en un tiempo seria la señal de que todo ha salido bien.

Un disco que a nosotros nos parece que transita a mitad de camino entre el pop y el rock. Entre lo minimalista y lo ruidoso. Sonando británico pero con un punto hispano, casi latino. ¿Qué percepción tienes tú del mismo? 

Eduardo: La verdad que estoy muy de acuerdo con lo que decís. Sinceramente siempre prefiero escuchar lo que dicen los demás de mis discos que aportar mi opinión. Creo que tiene una base rockera muy hispana que se muestra con cierto orgullo, sobre todo por la cantidad y calidad de los artistas que hemos tenido aquí. En cierta medida me siento parte de la cadena de música rock española.


A la hora de enfrentarnos al mismo nos han llamado la atención algunas canciones que hemos seleccionado para que nos hables de ellas. En primera instancia vamos a destacar el single de adelanto, “Coche”, incluido en nuestra selección de lo mejor del año por su acertada fusión de rumba y rock. ¿De dónde surge un tema así? ¿Qué grupos te sirvieron de inspiración a la hora de elaborar esta composición?

Eduardo: Te contestaré primero a la segunda pregunta. Mi referencia a la hora de hacer esa canción fueron Gypsy Kings y también Rinôçérôse, que meten mucho ritmo en sus canciones, hasta el punto de incluir rumbas electrificadas. Me interesa la rumba porque es un ritmo muy callejero, canalla y efectivo a nivel música. Tiene percusión y armonía. Sinceramente hace tiempo que empecé con esa búsqueda que exactamente no sé de dónde viene. Quizás sea algo muy sentido y pasional que pongo en relación con ese tipo de canciones brasileñas como la Bossa Nova que son tristes pero en realidad se bailan a pesar de ser dramáticas. 

Otra curiosidad que encierra el álbum ese acercamiento al pop latino que encierran “Ser o no Ser” o “Una vida está Esperando”.

Eduardo: Me gusta que me hagas ese comentario. Estoy muy de acuerdo con él. Básicamente porque creo que es algo patente sobre todo en la parte del estribillo de “Ser o No Ser”. La verdad es que no tengo un discurso articulado a este respecto. Es una cosa que alguna vez he pensado vagamente y sí que veo ciertas conexiones con ciertos músicos del continente americano que me han interesado desde hace años.

También nos ha gustado mucho la visceralidad de cortes como “Todo se puede Arreglar”, “Tanto te Dirán” o “Aprendiendo Latín”. 

Eduardo: Esa visceralidad es una muestra de que no nos gusta esconder nada. Nos gusta que las cosas sean claras y que haya una sofisticación, pero jugando con lo importante. Dejando las tonterías a un lado. 

Un corte de los más interesantes de “Recuerdo del Futuro” es “204”, sobre todo por el empleo de elementos literarios propios del surrealismo, que hacen pensar irremediablemente en referentes musicales como El Niño Gusano. ¿Estamos en lo cierto?

Eduardo: Por supuesto que estáis en lo cierto. Es un grupo que no olvido. De vez en cuando me los pongo y sigo flipando. Es más en ocasiones me sabe mal que me sigan gustando porque no me gusta para nada la nostalgia. Pero es escucharles y sentir que me encantan. “204” es un tema que va en esa onda y para mí es un orgullo que me comparéis con ellos, porque además son de mi ciudad. 

Un surrealismo que también está presente en el pequeño juego onírico que aparece oculto tras la última canción.

Eduardo: La verdad es que eso no me lo habían comentado en ninguna entrevista (Risas). Quizás también sea una influencia del Niño Gusano. Recuerdo que cuando sacaron “El Escarabajo más grande de Europa” me lo compré y flipé al descubrir que el disco empezaba y acababa exactamente igual. Quería meter esos pequeños guiños en “Recuerdos del Futuro”. En realidad son señuelos que me gusta ir dejando por el camino y que funcionan a modo de pequeñas pistas. 

Un hecho curioso es que el adverbio de negación “No” aparece en todas las composiciones incluidas en “Recuerdo del Futuro”. ¿Te habías dado cuenta de ese detalle?

Eduardo: Sinceramente no me había dado cuenta. En realidad soy una persona muy negativa. De hecho AER es un concepto significa nada. Pero a la vez es el principio de todo. Al principio fue AER, Al principio fue nada. Mi madre me dice que debería ser más seguro de mi mismo y yo le digo que lo soy pero en negativo (Risas). También es cierto que me encanta Nietzsche, quizás me haya gustado de siempre porque era un afirmativo en negación.

Hablemos un poco de la parte técnica si te parece. De la producción se han encargado Manuel Colmenero y Javibu Carretero, productores de Vetusta Morla entre muchos otros. ¿Qué crees que han aportado al sonido del disco? 

Eduardo: Desde un principio me hablaron de los aspectos que teníamos que pulir. Fueron a la vez críticos y halagadores con lo que hacíamos. Nos ayudaron a elegir lo mejor del repertorio, algo importantísimo porque llega un momento que tú como autor no lo ves. También echaron una mano a la hora de estructurar los temas. Me han hecho tocar todas las canciones con una guitarra acústica para ir al grano. Por otro lado me hicieron trabajar en algunos temas acortándolos o haciendo que introdujera más estrofas. En definitiva supieron dotar de una mayor cohesión musical al grupo. Por no hablar de todo el equipo que pusieron en todo momento a nuestras disposición. 

Eduardo hace tiempo hablábamos con Álex, vocalista de Mr. Hyde otro grupo zaragozano, quien nos comentaba que aunque pareciera mentira seguían existiendo fronteras entre regiones que hacían muy difícil triunfar a los grupos de otras comunidades. ¿Qué opinión tienes al respecto? ¿Crees que es necesario irse a una gran ciudad, como ocurrió en tu caso, para tener alguna oportunidad de triunfar en el mundo de la música?

Eduardo: El temas de las fronteras es un hecho. Vivir en Madrid o Barcelona te da un mayor caché. Lo que ocurre es que no siempre se consigue aguantar, en muchos casos motivado porque vivir en grandes ciudades es mucho más caro. Por otro lado seguimos viviendo en un país que es plural, pero con una pluralidad que no llega a ser entendida por todo el mundo. En el fondo a nuestros políticos les interesa que no nos sintamos parte de un total. Mientras no nos consideremos una unidad ellos podrán jugar más fácilmente. Yo me fui de Zaragoza porque El Polaco se estaba disolviendo. Además a nivel personal me llegó el momento de salir de casa y buscar mis oportunidades. 

En “Recuerdos del Futuro” has contado con la colaboración de amigos de bandas zaragozanas como es el caso de Luis Cebrián (Louisiana) o Patricia Ladera (Miss Tragedia). ¿Cómo ves el panorama aragonés actualmente? 

Eduardo: Yo sinceramente veo que la escena zaragozana es pobre. Aragón tampoco se caracteriza por ser un pueblo muy abierto. No me refiero a las personas que son muy amables y generosas. Me refiero a la conciencia general. Yo me siento parte de todo eso pero me gustaría que nos recicláramos en ciertos aspectos para poder ayudarnos los unos a los otros. Sin duda alguna los grupos deberíamos apoyarnos más entre todos para crear una escena solida.

¿Qué bandas de tu tierra nos recomendarías escuchar encarecidamente? 

Eduardo: De lo que se hace allí me gustan Louisiana que son muy buenos. Son mis amigos es cierto, pero con ellos la amistad ha surgido mucho después de que conociera su música. También me gusta lo que hacen The Faith Keepers que es un grupo jovencísimo, hacen funk con un poco de desorden que es algo que me flipa. También Bigott cuya actitud me encanta, le envidio sinceramente porque creo que tiene una identidad muy clara y marcada. 

Últimamente has realizado multitud de conciertos en formato acústico. ¿A qué se debe? ¿Cómo te encuentras más a gusto en la intimidad con tu acústica o rodeado con la potencia de una banda? 

Eduardo: Eso es una cuestión que actualmente está muy de moda, personalmente nos defendemos bastante bien en ese formato. Lo que ocurre es que no hay nada como la banda al completo. Creo que es la mejor forma para entender el concepto. En el directo nos soltamos mucho más la melena sonando más fuertes e intentando saltarnos los corsés que impone el disco. 

¿Qué planes de futuro manejas a corto y medio plazo?

Eduardo: De momento estamos en plena gira de presentación. En breve presentaremos nuestro segundo videoclip, el de “Tanto te Dirán” que lo ha hecho Beatriz Abad. Vamos a seguir jugando con inteligencia para darnos a conocer.

Por: Javier e Iván González.
Fotos: Iván González.