Pony Bravo disco a disco

Pony Bravo es el nombre del grupo musical surgido en Sevilla en el año 2006. El grupo está formado por Daniel Alonso, Darío del Moral, Pablo Peña y Javier Rivera. La formación fue creada por Daniel Alonso (compositor y artista gráfico) junto a tres de los miembros del grupo Renochild (publicaron en el 2004 un único disco, Shuttle, editado por Pulpo Negro Records). 

Una de las características que más llaman la atención de este grupo es que se pueden encontrar sus discos en descarga totalmente libre con una licencia Creative Commons a través de su página (http://enelrancho.com/), fomentando de esta manera la cultura y el hecho de llegar a un público cada vez más mayoritario que ven en Pony Bravo a un grupo que se expande cada día más y más. 

Con Si Bajo de Espalda no me da Miedo y Otras Historias (Monterrey, 2008) se presentaron al público con un disco con el que, partiendo de las bases The Doors o Triana, aportaron un cancionero repleto de riqueza musical y con un estilo personal y propio, algo muy complicado ya de por sí tratándose de un primer álbum; en estas 12 canciones nos encontramos a un grupo muy seguro de sí mismo, donde podemos disfrutar de un cóctel donde no faltan la psicodelia o el krautrock, y con ese acento sevillano que imprime una identidad propia a los temas. Para servidor se trata de uno de los mejores discos de debut de los últimos años. 

Tras dos años vuelven con Un Gramo de Fe (El Rancho, 2010), un disco aún si cabe más experimental que su predecesor, ahondando en una nueva vuelta de tuerca a su sonido originario, llenándolo de diversos matices que hacen de la escucha de esta nueva entrega algo muy especial. 

Aquí encontramos más krautrock, más psicodelia y más funk, pero todo al límite, mucho más místico y surrealista (no hay nada como escuchar Noche de Setas para comprobarlo), alcanzando momentos álgidos y reafirmando que Pony Bravo son una rara avis, persiguiendo el status que se merecen con cada nueva entrega. 

Y llegamos a su tercer disco De Palmas Y Caceria (El Rancho, 2013 y distribuido por BCore), su disco cumbre y por el que lo están petando vayan donde vayan, erigiéndose como Mejor Disco Nacional del pasado año para la prestigiosa revista musical Mondo Sonoro y apareciendo en portadas como la longeva Rockdelux

En este tercer disco su particular batidora musical toma ingedientes de sus obras anteriores y los mezcla con música “afrocubana lisérgica dub” (o algo así), logrando para la ocasión un disco más complejo sobre todo para aquellos oídos que no estén abiertos a tanta experimentación; en mi caso particular, al adentrarme poquito a poco en este intrincado mapa sonoro que recorre gran parte de nuestras raíces andaluzas y parte del extranjero, me ha ido entrando más y más, haciendo de la escucha de este De Palmas Y Cacería una experiencia arriesgada pero altamente satisfactoria. 

Para finalizar, hay que destacar el impecable diseño de los discos físicos a cargo de su cantante y teclista Daniel Alonso, en los cuales se unen imágenes que beben del imaginario americano y sevillano, a través de montajes fotográficos, y que dan lugar a escenas cargadas de impacto y polémica. 

No podemos olvidar la labor de Raúl Pérez en sus estudios La Mina (Sevilla) que ha producido los tres discos del grupo, el cual aporta su toque siempre personal a las canciones, resultando de todo ello un sonido muy particular y que seguro no sonaría así de bien si estuviera otra persona detrás de los mandos de sonido. 

Por Francisco José Arcos Serrano