Creados a finales de los años ochenta por su cantante y guitarrista Scott Hill, único miembro original que permanece y mantiene el proyecto, las influencias que aglutinaban, desde el hard rock a la psicodelia, les convirtieron en ejemplares de un sonido guitarrero, árido e hipnótico. Junto a bandas como Kyuss o Nebula se convirtieron en máximos representantes del llamado stoner-rock, sonido con las características ya comentadas.
Ahora, tras una carrera con más de una decena de discos publicados, vuelven a pisar nuestros escenarios. Concretamente tendremos la oportunidad de disfrutar con su vibrante directo en la Sala But madrileña el 6 de octubre mientras que un día después aparecerán sobre las tablas de la sala Razzmatazz en Barcelona. Dos citas que recomendamos no dejar pasar.
