Johnny Casino: “Vibrations, Yours And Mine”



Por: Txema Mañeru 

No nos andaremos por las ramas. Johnny Casino se ha convertido por derecho propio en uno de los nombres clave del rock’n’roll australiano de los últimos cuarenta años. Y eso es mucho decir cuando hablamos de un país con una tradición inigualable en el estilo, que comenzó en los sesenta con Easybeats o Bee Gees y siguió en décadas posteriores con AC/DC, Radio Birdman, Bored!, Hoodoo Gurus, The Beasts Of Bourbon, The New Christs o Wolfmother. Lo injusto es que su valía y reconocimiento artísticos no han sido corroborados por el merecido apoyo popular que le ha sido esquivo. Además, en la última década nos ha entregado algunos de sus mejores LPs . Algo que vuelve a ocurrir con este “Vibrations, Yours And Mine” (La Vila Nova Recordings / Beluga Records / Golden Robot Records), que tiene brillante edición en LP a cargo del prestigioso sello sueco Beluga Records y que igualmente se puede conseguir en su johnnycasino.bandcamp.com, donde estará a su vez la cuidada edición en compacto editada por el sello australiano Golden Robot Records. 

Con lo de sus discos más destacados de la última década me refería, especialmente, al vinilo doble "Johnny Casino And The Secrets". Un extenso recopilatorio que sacó FOLC Records con 18 de sus mejores temas grabados de nuevo, especialmente, en Sydney para la ocasión. Además venía con el regalo de un compacto con golosas caras B y rarezas. A esto hay que sumar su trabajo de hace 3 años, un "Time And Time Again" (FOLC Records) que cuando lo escuché con fruición en su momento me pareció el mejor disco de su enorme y muy recomendable discografía. Y es que Johnny estuvo ya en los noventa al frente de una de las mejores bandas del característico sonido high-energy Detroit, pero vía Australia, como son Asteroid B-162, y en el nuevo milenio destacó con el súper-grupo The Egos, junto a gente de The Onyas y de otros recientemente recuperados como son The Meanies. Por en medio se embarcó en la aventura yanqui con Johnny Casino’s Easy Action, sumado a unos buenos trabajos como Johnny Casino & The Secrets y en su versión española, Johnny Casino & Los Secretos.

Su disco anterior se grabó durante un largo periodo de tiempo en Australia y Gandía, un fantástico trabajo de piano a cargo de Jeremy Craib en frenéticos temas de rock and roll como el pistoletazo de salida titulado "You’ve Still Got Nothing To Say", o con el órgano en un "Shutdown Breakdown" de contagioso estribillo. Había espacio también para tiernas y logradas baladas como "This Christmas Time (She’ll Fly Away)" o la cumbre total del genial, panorámico y espectacular tema titular, aunque los 9 minutos finales supongan otra gozada total..

Pero ahora es el momento de extendernos con este “Vibrations, Yours And Mine” del que tuvimos un reciente y magnífico adelanto con "Trouble Weights A Ton", guapa versión de la joyita de Dan Auerbach (The Black Keys) que cuenta con la gran compañía de la mágica pedal steel de Hendrik Röver (Los Deltonos). Espectral y mágico tema lento que no será el único en el que Hendrik lo borda con la pedal steel. Con este nuevo disco seguro vamos a pasar largo tiempo disfrutando de él, lo que se hace fácil con nuevas dianas como el magnífico y emotivo arranque con una espectral y hermosa "I Hear You Calling", en la que de nuevo sentimos la presencia de Hendrik. Sí, estamos ante su disco más desnudo y confesional. Por ello en esta ocasión solo ha necesitado la ayuda del músico todo-terreno cántabro para mostrarnos las emociones que le rondaban por su cabeza. De hecho ha sido grabado en solitario y prácticamente en directo en el estudio, aunque luego decidiera ponerse en contacto con Hendrik para añadir algunos detalles a los que propio Johnny incorporó algún que otro instrumento a este disco de bella desnudez. 

Es un álbum para amantes de losers outsiders como Nikki Sudden, Epic Soundtracks, Dave Kusworth, Rowland S.Howard, Kevin Junior y otros de esta ralea. Emoción crepuscular en un "Postcards" que trae hasta una trompeta con ecos Morricone. Sigue navegando por aguas infectadas de fantasmas como indica otra relajada pero inquietante "Ghost Ships". Sus contactos son cada vez más permanentes con nuestro país como demuestra el magnífico título del también crepuscular instrumental "Cerca Pero Tan Lejos (A Song…)". Se nos confiesa lleno de miedo en una aterradora "I Scare Myself" con unos deliciosos coros de fondo que aumentan esa sensación de temor que luego se liberará con unos guitarrazos cargados de rock y rabia que suben el tema a altísimas cotas de intensidad emocional. Vuelve a la desnudez y los momentos más íntimos con "Hit The Ground Running", de nuevo con brillante ayuda de Hendrik, y regresa al lado más rock con el guapo riff de guitarra de "Sundown". Tonos country en la siempre maravillosa y melódica "Wichita Lineman", de Jimmy Webb, pero con base en esa primera versión de Glen Campbell, aunque seguro que a Johnny le encanta también la preciosa y emotiva versión instrumental de José Feliciano. Eso sí, vuelven a dominar sus personales y logradas composiciones como demuestra el gran final con el tema más largo del disco, un "Tears In A Town She Calls Home" que te hace realmente llorar con sus coros casi góspel y sus exquisitos punteos por encima de los 6 minutos. Magnífico colofón al disco más especial y personal de la extensa trayectoria de este genio menor que debiera ser mucho más conocido.