Entrevista X Aniversario El Giradiscos: César Luquero

Estaría bien que los periodistas musicales fuésemos capaces de elaborar narraciones atractivas que estimulasen al lector .

Por: El Giradiscos

Los vínculos que nos unen a César Luquero van mucho más allá de la admiración que profesamos hacia él como uno de los periodistas musicales con más criterio y estilo literario de cuantos actualmente pasean palmito por nuestra prensa. 

César tiene amigos cercanos muy vinculados a nuestra web, personas que antes de que le conociéramos de una forma más concreta, ya nos avisaron de su grandeza y cercanía, algo que hemos podido comprobar por nosotros mismos, trabajando junto a él y en unas cuantas conversaciones musicales, donde el cariño y la empatía han sido las protagonistas, logrando que finalmente brotara una bonita relación de amistad entre nosotros. 

Siendo amigo, con semejante trayectoria y tratándose de uno de los mejores en su faceta dentro de nuestro rock, no podíamos dejar pasar la oportunidad de invitarle a celebrar este humilde aniversario ,a lo que él, encantado de la vida, dijo que sí con la franca sonrisa que le caracteriza. 

Igual que se pregunta si vinilo o CD, y en tu papel de profesional del gremio, ¿que virtudes, y lo contrario, encuentras en la prensa digital y en la escrita?

César: Pues no sabría decirte, puede que ninguna de las dos tengan virtudes o defectos en sí mismas. Dependerá de cómo se enfoquen los temas, de cómo esos enfoques se adapten a los soportes periodísticos, del grosor del presupuesto y de cómo se gestione este, de la capacidad de cada medio para crear y coordinar equipos especializados en la materia que abordan. 

En los últimos años ha habido una enorme proliferación de todo tipo de webs, blogs, de temática musical, ¿la irrupción de tanta oferta es algo siempre positivo o tiene algunas desventajas esa posible saturación? 

César: Que haya mayor oferta no implica que el conjunto de esta sea más valioso. Y que el acceso a dicha oferta sea prácticamente ilimitado no tiene por qué implicar saturación. 

Y en ese mundo donde la manera de escuchar música es mucho más atomizada y el disco ha desaparecido casi como concepto, ¿qué papel crees que debe de jugar el periodista/crítico musical en la actualidad?

César: Seguramente se nos pueden atribuir otros roles, pero estaría bien que fuésemos capaces de elaborar narraciones atractivas, a ser posible con sustancia, que estimulen al lector a seguir tirando del hilo o a pisar otros charcos. Digo que estaría guay, no que sea fácil de conseguir. 

Dada esa evidente falta de relevo generacional en el interés por la prensa musical, ¿crees que se trata de una cuestión cultural por parte del lector o existe un desapego de la prensa por los intereses más populares? 

César: No lo tengo claro, probablemente es un camino que puede transitarse en ambos sentidos: del lector hacia la prensa cultural y a la inversa. Quizá sea reflejo del calado real que tiene el asunto de las canciones entre la mayoría.

¿Y cuál es tu percepción respecto al espacio, y al contenido, que se le otorga a la cuestión musical en esos medios generalistas? 

César: Percibo que el margen de mejora en ambos casos parece amplio. 

¿Dónde situarías tus primeros recuerdos en los que pensabas que te gustaría ser quien firmara tal o cual artículo? 

César: Siendo chaval, mientras leía o escuchaba la radio. Sobre todo la radio. 

Y dentro de esa ya larga carrera en diferentes medios, ¿cuál es el momento, el comentario o la situación, que con más cariño y/o emoción recuerdas? 

César: Son unos cuantos. La mayoría tienen que ver con los lazos que terminas estrechando con la gente que vas conociendo, ya sean compañeros de faena, músicos o personas que pasaban por allí.

¿Y el momento o situación que siempre has soñado que te gustaría que se produjese? 

César: Hacer un programa de radio en condiciones laborales decentes. 

Si se puede contar, ¿cuál ha sido ese personaje (del ámbito musical) con el que te has topado que sin esperarlo te haya sorprendido gratamente y por qué?

César: Recuerdo con mucho cariño las entrevistas –siempre largas y tendidas– con Javier Krahe. Era exactamente igual a sus canciones: brillante, insumiso, divertido, ágil, de una lucidez dolorosa.

Otro aspecto consustancial, por la propia esencia del aspecto musical, es el factor social, las amistades… ¿crees que a veces en la forma de realizar la tarea informativa se impone demasiado ese aspecto frente a una mirada más profesional, más objetiva?

César: A veces lo parece, sí. 

¿Qué valoración haces de esa necesidad de información al instante frente a los textos con más calma y reposados?

César: Pueden ser complementarios, convivir civilizadamente y llevarse bien. Ambas opciones están ahí, nos gusten más o menos. 

Hoy en día, todos sabemos, creo, qué tipo de artículos son los más leídos o los que tienen más repercusión, ¿de qué manera lidias con esa corriente que propugna por encima de cualquier otra consideración la polémica, el ruido en redes; la imposición del clickbait, en definitiva?

César: Creo que la mayor parte de las cosas que escribo no buscan esos objetivos. Suelen ser reportajes o entrevistas amplias casi siempre destinadas al papel, con enfoques nada polémicos ni ruidosos ni imposiciones del clickbait ese. Pero el mérito no es mío, sino de los editores que apuestan por este tipo de contenido. Espero que puedan seguir con la apuesta mucho tiempo. 

Sabemos que económicamente ésta no es una profesión bien pagada es un hecho. ¿Compensa al menos en parte el esfuerzo, el poder dedicarte a tu pasión que es la música?

César: Cada vez cuesta más que compense porque el sector está hecho un páramo, pero sigue siendo fuente de alegría más allá de lo económico. Y también compensa porque puedes aprender cosas que no sabías y profundizar en aquellas que ya conocías. 

De entre todas las funciones que realizas relacionadas con la música, desde dj hasta redactor o jefe de prensa de artistas y festivales. ¿Cuál es la que más te llena? ¿Cuál es aquella con la que más disfrutas? 

César: Escribir, en ambos casos. Me sigue gustando y cuando veo que algo me ha quedado más o menos apañao me da mucho gustito. Otras veces es un poco tormento porque cuesta llegar a ese punto en que ves que está más o menos decente y que puedes entregarlo. Antes era el programa de radio lo que más rollo me daba.

Más allá del cariño y el buen rollo que solemos desprender cuando coincidimos. ¿Eres consciente del gran cariño y el respeto que sentimos hacia todos tus textos? 

César: Siempre es un gusto veros, me llega ese cariño y lo agradezco de veras. Sois muy amables. Lo del respeto hacia lo que escribo me abruma un poco, pero os lo agradezco también. 

¿Qué valoración haces del trabajo que desempeñamos en El Giradiscos? 

César: Me gusta leeros y creo que hacéis un trabajo necesario, cubriendo información que en algunos casos suele ser desplazada hacia los márgenes. Tenéis un plantel de colaboradores muy majo y vuestras miras son amplias. Felicidades por el décimo aniversario.