Si no es Stiff… No merece un tributo, con este titulo chuleta se presenta el recopilatorio de versiones del sello Stiff Records que se ha editado con ocasión del XI festival Cultura Pop, que cada año se celebra en el distrito de San Blas.Un CD único e irrepetible de tirada limitada que contiene 24 versiones del mítico sello a cargo de 24 bandas. Antes de seguir rememoremos un poco la historia del sello que revolucionó la industria en el Reino Unido.
En 1975 la industria musical británica se tambaleaba, sufría una crisis debido a multitud de circunstancias. A la sombra, en los bares, o pubs, empezaban a surgir numerosos músicos. Eran distintos, parecía que no encajaban con el ideal de músico de rock de la época, no les preocupaba la imagen, a primera vista no eran exitosos ni glamorosos (Véase: Slade, Bowie, T-Rex…etc.) sino que aparecían desaliñados, vestidos de calle en apariencia muchísimo mas informal. Sus canciones eran demasiado cortas y ligeras al contrario de los temas de Led Zeppelin o Pink Floyd por ejemplo. Eran algo completamente diferentes a lo existente entonces. Este fenómeno fue denominado “Pub Rock”.
Dos pipas (técnicos de sonido) Jake Riviera y Dave Robinson decidieron imitar el modus operandi de la industria estadounidense del momento, sacando singles fuera del mercado comercial. Ficharon a músicos del movimiento como Brinsley Schwarz, Nick Lowe, The Damned o Elvis Costello. Tras la filosofía de “Somos un sello, no un museo” editaban singles que eran descatalogados a las dos semanas, siempre fieles a su política fichaban y editaban a los artistas más excéntricos del Punk y de la New Wave.
No fue el primer sello independiente, pero si fue uno de los que mas éxitos cosechó. Con lemas publicitarios como “Si no es Stiff no vale una mierda” se cerraron las puertas de la TV (muy estrictos con las normas de conducta los británicos), pero con ello ganaron la curiosidad de mucha gente que quería escuchar esos singles.
Su época de esplendor transcurrió desde 1977 hasta 1981, después los músicos con mayor renombre fueron abandonando el barco hacia las compañías grandes, lo que propició su inevitable hundimiento, allá por 1986.La edición de versiones que nos atañe, se convertirá a buen seguro en una de esas extrañas y valiosas gemas discográficas, dada su condición de edición limitada. Recoge 24 de sus clásicos, entre los que además de los ya nombrados se encuentran temas de Madness, Graham Parker, Prisoners, el presente en esta edición del festival Wreckless Eric y muchos más. Versionados por jovenes bandas nacionales y dos colaboraciones internacionales, por si fuera poco, contiene un libreto de 24 páginas con colaboraciones de ilustres personajes del panorama musical.
Solo se podrá adquirir en la Web del festival a un precio verdaderamente bajo.
Por Vanvan
