Javier Corcobado

Madrid. Sala El Sol. 7-04-10
Nuevamente se presentó Javier Corcobado ante su audiencia de la capital, en una serie de conciertos que le llevarán por más ciudades españolas para terminar dando el salto a México. El año pasado ya tuvimos la oportunidad de verle presentando su último disco “A nadie” y como siempre fue un concierto de los que no te dejan indiferente. Precisamente su última obra ha sido premiada por los Premios de la Música al Mejor álbum de Rock Alternativo. Siempre es bienvenido un reconociendo a tu carrera, y su última obra bien lo merece.

La sala El Sol se llenó de incondicionales de Corcobado que nunca fallan a la cita de este cantautor underground, además de poeta, el año pasado editó un libro de poesía muy recomendable titulado “Cartas a una revista pornográfica viuda”. Unos minutos más tarde de la hora indicada, Javier dio paso a los primeros acordes y susurros en portugués del tema “Negué”, del disco Fotografiando el corazón. Tan introspectivo como siempre, continuó la tormenta sónica con “Soy un niño” con la que ya aprovechó para presentar a esta magnífica banda que le acompaña, el productor y bajista Fino Oyonarte, los teclados de Susana Cáncer, Jesús Alonso a la batería y la colaboración de Justo Bagueste al saxo.

Ver a Javier Corcobado es toda una experiencia, nunca me cansaré de volver a verle una y otra vez. Tanto tocando sus más recientes composiciones, con aires de bolero o cabaret, o repasando su extensa discografía, un placer también es disfrutar de sus letras, “¿Por qué estoy tan triste?”, “A nadie”, “Carta al cielo” o revisando un “La navaja automática de tu voz” en clave de medio tiempo. La poesía desgarradora de “Orquesta de perros”, “En el coño del mar” o disfrutar canciones en formato acústico de “Coches de choque” o la coreada “Caballitos de anís”.

Para los bises, vuelve a contar con la colaboración del saxo de Justo Bagueste para el tema “Sombras” y a continuación una emotiva “Ella ya me olvidó”, haciendo subir la temperatura del local con su desgarradora interpretación. Y ya para acabar con la eléctrica “Dame un beso de cianuro” de su disco “Corcobator”.

Excelente concierto de un artista único en el panorama del rock estatal, recientemente reconocido por la industria y eternamente por sus fieles seguidores.

Texto: Alberto Vicente
Fotos: Iván González