Xoel López + Do Amor

El Náutico. O Grove, playa de la Barrosa, San Vicente do mar.
Ganas teníamos de conocer esta mítica sala, un espacio a pie de playa, que su dueño Miguel de la Cierva tiene en este espectacular rincón de Galicia, en O Grove. Afortunados son los que lo habitan, donde los amantes de la buena música y la noche pueden disfrutar con buena música y buena compañía a ras de playa con la luna como una invitada más. Noche tras noche se disfruta de esta calma, aún cuando toca concierto, siendo principalmente en verano cuando se deja caer por allí todo tipo de artistas configurando una programación de lujo.

Por tanto, no es de extrañar que por este bello paraje haya pasado lo más granado de nuestros artistas nacionales e internacionales. Fijo de esta sala, por ejemplo, eran los míticos conciertos de Antonio Vega con su banda, también se podía ver a su dueño Miguel, improvisando junto al Maestro encima del escenario. Todo muy familiar, muy sencillo, de hecho, entrar a El Náutico da la sensación de estar en el cuarto de estar de la casa de un buen amigo, con su chimenea, sus trastos en cualquier rincón y la calidez de sus escenarios.

El próximo mes de agosto vendrá cargado de buenas actuaciones, Iván Ferreiro, Coque Malla, Santi y Julián de Love of Lesbian o La Orquesta Poligonera serán algunos de los artistas que se podrá ver en El Náutico.

Nosotros tuvimos el placer de disfrutar con Xoel López y con los brasileños Do Amor, anunciados como la banda acompañante de Caetano Veloso. Se reservaron dos noches para estas actuaciones, seguramente de las más importantes del verano. Xoel lleva inmerso en su proyecto “La Caravana Americana” desde más de dos años, viajando por America, acercándose a distintas culturas y conociendo a artistas locales, absorbiendo su propia escena dentro de un lenguaje común que es el de la música. De todo ello saldrá un documental y como dice el propio artista; “cerrará el ciclo” con tres conciertos por España.

Xoel se presento con nueva banda, ahondando en las percusiones y los coros, todo ello llevaba a un sonido muy orgánico y directo, que en seguida te atrapa y te dejas llevar por un tipo honesto, con enorme talento, que disfruta con la música que hace y que se preocupa por seguir investigando con tal o cual sonido, que puede ir desde el pop-rock a sonidos latinoamericanos, música tropical, etc, toda una amplia gama con la que Xoel sale victorioso, añadiendo su estilo personal en su forma de cantar y sin dejar de lado las letras de sus canciones, ya mejoradas, como es natural, de sus primeros comienzos. Hizo un repaso a canciones como “Reconstrucción”, “El cielo de Madrid”, o “Pájaros negros”.

Ya a mitad del concierto, repasó junto a su amigo y compañero Félix Arias, (guitarrista, cantante y principal compositor del grupo Guru-Deva), y su otro proyecto llamado Lovely Luna, las canciones de su último trabajo “Chang y Eng”, con canciones de este como “Parando el tráfico”, “Rosa”, “Usted” o la preciosa versión de Blind FaithCan´t find my way home”. Ya para la recta final, Xoel fue sacado al escenario por un público que exigía que continuara la fiesta en la playa de la Barrosa, no tuvo otro remedio que afrontar el “Que no” ya el sólo en el escenario, junto a “Joven Poeta” o “Amor valiente”. Casi rozaban las cuatro de la mañana cuando dio por terminado el concierto, no por falta de ganas, eso seguro.

Antes de Xoel los brasileños Do Amor, grupo en el que algunos de sus componentes formaban parte de La Banda de Cê y que estuvieron acompañando a Caetano Veloso durante tres años. El grupo lo componen cuatro jóvenes integrantes, en el que su radio de acción es la escena alternativa de su país. Manejan con soltura el pop-rock, la bossa psicodélica y el funk, sonido heredero de grandes grupos de culto como Os mutantes.

La pasada noche no les hizo falta mucho tiempo para caldear el ambiente en una sala que comenzaba a llenarse, haciendo bailar a un público feliz, encantado con esta propuesta musical extravagante.
En definitiva, gran noche la pasada en El Náutico, buena música, excelente entorno y mejor compañía. ¿Se puede pedir más?.

Texto y fotos: Alberto Vicente.