¡Vaya preciosidad de tocho de 400 páginas! Los discos de Blue Note Records siempre se caracterizaron, además de por su calidad musical, por su especial y elegante presentación. Las fotos de Francis Wolff y los magníficos diseños de Reid Miles fueron claves en su éxito y son claves en que este libro, además de ideal para conocer la historia musical del sello, sea una absoluta gozada visual. El artefacto firmado por Richard Havers sale al mercado para conmemorar el 75 Aniversario del más importante sello de jazz de la historia.
Realmente todos los libros de la Editorial Blume se caracterizan por una gran presentación visual. Lo podrás comprobar a la perfección si te pasas por www.blume.net. Así comprobarás que además de libros musicales (David Bowie, Keith Richards, Abba, Rolling Stones) tienen montones de preciosos libros sobre Gastronomía. Varios de ellos acaban de salir además como es el caso del Atlas mundial del vino. También está calentito para postres navideños el de Micah Carr-Hill, Green & Black's Orgánico-chocolate, con el subtítulo de La Nueva Colección de Recetas. Otra delicia para amantes del queso es Los mejores quesos artesanos del mundo , pero tienes muchos más.
Pero volviendo a Blue Note, Uncompromising Expression, el libro comienza con hasta tres destacados prólogos muy musicales. El primero lo firma un clásico del sello como es el saxofonista Wayne Shorter que además de su amplia trayectoria en solitario fue parte vital de Weather Report y acompañó a Miles Davis en algunos de sus mejores trabajos. El segundo lleva la firma de otro excelente y destacado músico, pero mucho más joven como es el pianista Robert Glasper. El tercero es para el prestigioso productor todo terreno (hasta con los Rolling Stones) y actual director del sello, Don Was.
Tras un destacado capítulo de situación histórica titulado El Crisol del Jazz llega un capítulo que hace historia como es El Lugar Adecuado para la Persona Correcta. Ahí nos enteramos como el sello fue fundado el 6 de enero de 1939 por esa persona correcta que es Alfred Lion, un joven berlinés enamorado apasionadamente del jazz. Esta pasión le llevó a instalarse en los Estados Unidos y a hacernos a todos los melómanos un regalo de Reyes de incalculable valor. Nos hablan de sus primeras grabaciones a 78 revoluciones. Ya en El Evangelista del Jazz nos llegan los pianistas de boogie woogie, Albert Ammons y Meade Lux Lewis. Enseguida se le unió el amigo de la infancia Francis Wolff que se encargó de todo el entramado visual.
Fueron creciendo según lo hacía la música jazz comenzando por góspel, swing y be-bop hasta llegar al jazz moderno. En Un Mundo de Hombres se adentran en los 50 y al año siguiente aparecieron sus primeros LPs, un formato que aún miman con lujosas y limitadas ediciones. Este capítulo y el siguiente, Un León en Invierno, son los más amplios ocupando prácticamente un total de 250 páginas entre los dos. Las fotos a página completa son destacadas y abundantes. Además comienzan las amplias fichas de discos decisivos que aparecen cronológicamente. Los primeros son los de Sidney Bechet en el 50 y luego van desfilando Bud Powell, Thelonious Monk, Milt Jackson, Art Blakey, Miles Davis, John Coltrane, Sonny Rollins, Jimmy Smith, Cannonball Adderley, Freddie Hubbard, Jackie McLean, , Kenny Burrell, Dexter Gordon, Grant Green, Lee Morgan, Andrew Hill, Herbie Hancock, Wayne Shorter, Horace Silver, Ornette Coleman, Don Cherry, McCoy Tyner y muchos más.
Mientras se sucedían estos discos llegó otro momento clave cuando a fines del 53 Rudy Van Gelder comenzó a hacerse cargo de casi todas las grabaciones. Wolff explicaba muy bien todo esto diciendo que crearon un estilo, incluyendo grabación, fabricación y portadas, y que todo ello supuso la diferencia. En El Eslabón Crucial se narran estos hechos y la ausencia progresiva de Lion. Surgen los nombres de Chick Corea, Lou Donaldson y demás.
Llegan los 80 en Llega el Momento, Llegan los Hombres…y las Mujeres. En 1985 se produjo la revitalización del sello gracias a Bruce Lundvall, montando un espectacular concierto conmemorativo. En esa misma década la escena de clubs londinense convierte el jazz de Blue Note en selecta música de baile. A los nombres clásicos se van incorporando otros más progresistas como Joe Lovano, Medeski Martin & Wood o Jazzmatazz y aparecen mujeres como Cassandra Wilson y Norah Jones. El catálogo nunca ha dejado de crecer e incluso se ha abierto puntualmente a otros estilos como se puede comprobar si te pasas por www.bluenote.com. Así en los últimos tiempos hemos tenido discos de Van Morrison o el de Elvis Costello & The Roots. Las dos últimas fichas amplias son para Robert Glasper Experiment en 2012 y el espectacular Liquid Spirit del mejor cantante del nuevo milenio, Gregory Porter, del pasado año. Además siguen manteniendo un impresionante catálogo y guapas colecciones como The Rudy Van Gelder Edition, Conoisseur Series, Blue Series o Vinyl.
Richard Havers es un veterano experto que trabajo en giras de Paul McCartney y de los Beach Boys y ha hecho libros sobre Marylin Monroe o sobre Frank Sinatra. También uno muy relacionado con este que trata sobre el otro sello clave del jazz, Verve. Todo, como ya hemos dicho con material fotográfico de primera y portadas gigantes de vinilos básicos. Además en papel de gran calidad y superior grosor ¡No sé cómo podrán superar este espectacular libro el día que Blue Note cumpla los 100 años! ¡Maravilla total!
Realmente todos los libros de la Editorial Blume se caracterizan por una gran presentación visual. Lo podrás comprobar a la perfección si te pasas por www.blume.net. Así comprobarás que además de libros musicales (David Bowie, Keith Richards, Abba, Rolling Stones) tienen montones de preciosos libros sobre Gastronomía. Varios de ellos acaban de salir además como es el caso del Atlas mundial del vino. También está calentito para postres navideños el de Micah Carr-Hill, Green & Black's Orgánico-chocolate, con el subtítulo de La Nueva Colección de Recetas. Otra delicia para amantes del queso es Los mejores quesos artesanos del mundo , pero tienes muchos más.
Pero volviendo a Blue Note, Uncompromising Expression, el libro comienza con hasta tres destacados prólogos muy musicales. El primero lo firma un clásico del sello como es el saxofonista Wayne Shorter que además de su amplia trayectoria en solitario fue parte vital de Weather Report y acompañó a Miles Davis en algunos de sus mejores trabajos. El segundo lleva la firma de otro excelente y destacado músico, pero mucho más joven como es el pianista Robert Glasper. El tercero es para el prestigioso productor todo terreno (hasta con los Rolling Stones) y actual director del sello, Don Was.
Tras un destacado capítulo de situación histórica titulado El Crisol del Jazz llega un capítulo que hace historia como es El Lugar Adecuado para la Persona Correcta. Ahí nos enteramos como el sello fue fundado el 6 de enero de 1939 por esa persona correcta que es Alfred Lion, un joven berlinés enamorado apasionadamente del jazz. Esta pasión le llevó a instalarse en los Estados Unidos y a hacernos a todos los melómanos un regalo de Reyes de incalculable valor. Nos hablan de sus primeras grabaciones a 78 revoluciones. Ya en El Evangelista del Jazz nos llegan los pianistas de boogie woogie, Albert Ammons y Meade Lux Lewis. Enseguida se le unió el amigo de la infancia Francis Wolff que se encargó de todo el entramado visual.
Fueron creciendo según lo hacía la música jazz comenzando por góspel, swing y be-bop hasta llegar al jazz moderno. En Un Mundo de Hombres se adentran en los 50 y al año siguiente aparecieron sus primeros LPs, un formato que aún miman con lujosas y limitadas ediciones. Este capítulo y el siguiente, Un León en Invierno, son los más amplios ocupando prácticamente un total de 250 páginas entre los dos. Las fotos a página completa son destacadas y abundantes. Además comienzan las amplias fichas de discos decisivos que aparecen cronológicamente. Los primeros son los de Sidney Bechet en el 50 y luego van desfilando Bud Powell, Thelonious Monk, Milt Jackson, Art Blakey, Miles Davis, John Coltrane, Sonny Rollins, Jimmy Smith, Cannonball Adderley, Freddie Hubbard, Jackie McLean, , Kenny Burrell, Dexter Gordon, Grant Green, Lee Morgan, Andrew Hill, Herbie Hancock, Wayne Shorter, Horace Silver, Ornette Coleman, Don Cherry, McCoy Tyner y muchos más.
Mientras se sucedían estos discos llegó otro momento clave cuando a fines del 53 Rudy Van Gelder comenzó a hacerse cargo de casi todas las grabaciones. Wolff explicaba muy bien todo esto diciendo que crearon un estilo, incluyendo grabación, fabricación y portadas, y que todo ello supuso la diferencia. En El Eslabón Crucial se narran estos hechos y la ausencia progresiva de Lion. Surgen los nombres de Chick Corea, Lou Donaldson y demás.
Llegan los 80 en Llega el Momento, Llegan los Hombres…y las Mujeres. En 1985 se produjo la revitalización del sello gracias a Bruce Lundvall, montando un espectacular concierto conmemorativo. En esa misma década la escena de clubs londinense convierte el jazz de Blue Note en selecta música de baile. A los nombres clásicos se van incorporando otros más progresistas como Joe Lovano, Medeski Martin & Wood o Jazzmatazz y aparecen mujeres como Cassandra Wilson y Norah Jones. El catálogo nunca ha dejado de crecer e incluso se ha abierto puntualmente a otros estilos como se puede comprobar si te pasas por www.bluenote.com. Así en los últimos tiempos hemos tenido discos de Van Morrison o el de Elvis Costello & The Roots. Las dos últimas fichas amplias son para Robert Glasper Experiment en 2012 y el espectacular Liquid Spirit del mejor cantante del nuevo milenio, Gregory Porter, del pasado año. Además siguen manteniendo un impresionante catálogo y guapas colecciones como The Rudy Van Gelder Edition, Conoisseur Series, Blue Series o Vinyl.
Richard Havers es un veterano experto que trabajo en giras de Paul McCartney y de los Beach Boys y ha hecho libros sobre Marylin Monroe o sobre Frank Sinatra. También uno muy relacionado con este que trata sobre el otro sello clave del jazz, Verve. Todo, como ya hemos dicho con material fotográfico de primera y portadas gigantes de vinilos básicos. Además en papel de gran calidad y superior grosor ¡No sé cómo podrán superar este espectacular libro el día que Blue Note cumpla los 100 años! ¡Maravilla total!
