El pasado lunes en la mítica Vía Láctea del madrileño barrio de Malasaña y ante la presencia de un buen número de medios acreditados, tuvo lugar la presentación de “Desde el Jergón”, la caja recopilatoria que recoge parte de lo mejor de la trayectoria de Los Enemigos, uno de los grupos más personales que jamás haya dado el rock de nuestro país a lo largo de toda su historia y que ahora, diez años después de despedirse elegantemente de los escenarios, ha decidido volver a juntarse con el propósito de acometer un gira para disfrute de sus fans más fieles.
Ya en el interior del céntrico garito capitalino tuvimos la oportunidad de intercambiar saludos con algunos de los rostros más conocidos de la escena musical madrileña, tal fue el caso de David Krahe, gerente de la “Vía”, guitarrista de Los Coronas y buen amigo de “El Giradiscos”, con el que charlamos brevemente acerca de la historia del local que dirige, y Diego Manrique, mítico periodista y locutor radiofónico, al que también saludamos, quienes no quisieron dejar pasar la oportunidad de arropar con su calor a los cuatro componentes de Los Enemigos en una mañana de lo más especial para ellos.

Los primeros en tomar la palabra para dar pistoletazo de salida a la presentación fueron los periodistas César Luquero, encargado de realizar el texto que acompaña a la caja, y el ya mencionado Diego Manrique, los cuales no dudaron en hacernos una breve introducción a la historia de Los Enemigos, que como era de esperar estuvo repleta de alabanzas y parabienes a través de los cuales dejaron claro su reconocimiento y cariño personal por su legado musical, evidenciando también una simpatía y amistad con los componentes de la misma que no daba píe a la más mínima duda.

El siguiente en coger el micrófono fue Josele Santiago, inspirado, socarrón y divertido a raudales durante toda la mañana. “La sensación es de perplejidad y de flashback, aunque el que se ha currado la historia ha sido Fino. Recuerdo que llegaba con pilas de cosas para que escucháramos y yo… no encontraba las diferencias entre unas y otras (Risas)”. Como decimos “El Maestro Pocero” estuvo sembrado en sus alocuciones, aunque también plenamente lúcido. “Me ha sorprendido la frescura y la desfachatez. También la actitud en escena y la amplitud estilística que teníamos. La mayoría de la gente tenía una visión nuestra que tendía mucho al decibelio, pero en los discos hay muchas joyitas escondidas y una falta de prejuicios sorprendente. Sobre todo para esa época. En la caja hay mucho más que una banda rockera y cañera”. En una línea parecida, pero con un poso más de asombro, se expresaba Chema. “Yo había cosas que las veía y pensaba “eso lo hemos hecho nosotros””.

Cuestionados por el momento actual y posibles planes de futuro, que pasarían por la grabación de nuevo material, las opiniones se movían en posiciones similares que ni confirmaban ni desmentían tal extremo. Fino comentó que “Ahora mismo vamos al día. Nos estamos dejando llevar por el momento. Disfrutándolo”, algo que completó Josele diciendo que “La fórmula sigue funcionando, sonamos mejor que antes porque, entre otras cosas, no nos hemos apartado de la música. Sinceramente no nos hemos planteado cosas a largo plazo. La idea es pasar por cuantos más escenarios mejor. Todavía no nos hemos empezado a comer la cabeza”. Añadiendo, tras ser cuestionado por el hecho de que si seguía componiendo, “Yo sigo escribiendo canciones porque esto es una especie de enfermedad. A veces es hasta feo porque ocurre algo y tú estás escribiendo una canción”, sin especificar si era para su fructífera carrera en solitario o para Los Enemigos, y volviendo a provocar la carcajada de los allí presentes, algo que ocurrió de nuevo ante una pregunta que les hablaba de una hipotética fecha de caducidad del proyecto “Enemigo”. “Cualquiera que tenga un poquito de moral no se la pone. Eso no está en nuestra mano. Ya vendrá”. Genio y figura hasta la sepultura.

De esta forma y no sin que antes el propio Fino nos diera un consejo, “La caja no es recomendable escucharla del tirón. Te puede dar una embolia porque es un documento muy intenso para ir descubriendo poco a poco”, consejo que provocó el enésimo momento desternillante de la matinal, se dio por concluida la presentación de “Desde el Jergón”.
Tras este instante llegó el momento de los saludos más pausados, las confesiones y los abrazos del personal, felicitando a todos y cada uno de los miembros de Los Enemigos.
Fue ese el instante que aprovechamos desde “El Giradiscos” para pedirles amablemente que nos dedicaran unos minutos en los que realizar una breve sesión fotográfica con la que acompañar este artículo. Ni que decir tiene que desde el primer momento nos dijeron rotundamente que sí, accediendo a los pocos minutos a un rincón de La Vía Láctea vetado hasta entonces y habilitado exclusivamente para la ocasión, algo que desde aquí agradecemos a David Krahe y al resto de personal del local.

Tampoco faltaron algunas confesiones “Off the record”, ampliando lo que ya habían comentado en la rueda de preguntas, ni un intercambio de teléfonos y correos electrónicos, con el objeto de realizar un reportaje especial con ellos que tendrá lugar previsiblemente en las próximas semanas en su local del ensayo y del que ya daremos debida cuenta a nuestros lectores, para que tengan la oportunidad de conocer de primera mano todo lo que deparará esta vuelta a los escenarios de Los Enemigos.
Por: Javier González.
Fotos: Iván González.