Por: Txema Mañeru.
Todos hemos oído hablar en multitud de ocasiones del infausto, pero muy popular, “Club de los 27”. No hace falta decir quiénes son los más célebres miembros de dicho club. Eso sí, no cabe duda que uno de los que más ha sido recordado, a pesar de haber transcurrido más de 50 años desde su muerte, es Jim Morrison, El Rey Lagarto. Hay muy buenos libros sobre su vida y obra en cualquier rincón del mundo. Tenemos también un buen ejemplo de aquí con la prestigiosa firma de Eduardo Izquierdo (Ruta 66) al que siempre vale la pena recurrir.
Pero Jim se merecía una obra de estas características, este tamaño y esta lujosa presentación, como nos acostumbran en Libros del Kulturm. Es cierto que estamos ante la antología definitiva de su obra con todas sus letras, poemas, diarios, fotografías y amplios extractos de sus 28 cuadernos de notas inéditos. Vamos, todo lo que el fan más encarnizado desea tener. Un total de 536 ricas y visuales páginas, a precio asequible. Si pasas por www.librosdelkultrum.com comprobarás que hay elegantes tochos similares, más o menos recientes, de Frank Zappa, Nick Cave, Joni Mitchell o Paul Simon, sobre todo, centrándose en sus letras, pero también de los más personales de Amy Winehouse o Taylor Swift. Los más parecidos son los de Zappa y Cave, pero esos solo se centran en el apartado de letras cuando aquí tenemos mucho más. Aprovechamos también, para recomendar un reciente libro de la editorial, muy distinto a lo habitual, e ideal para los amantes de la música clásica. Te hablamos de “Melodía Del Alma – En Cuatro Estaciones-“, con la firma de Aina Vega I Rofes que es, como reza en su portada, un sentido y sensible paseo por las emociones de la mano de grandes compositores. Además con todos los códigos QR para escuchar la mejor música clásica de la historia.
Pero volviendo a este especial libro decir que está editado en rica y buena edición bilingüe en colaboración con el Estate of Jim Morrison. Además, está desarrollado a partir de las directrices que el propio artista esbozó en “Plan for Book”, interesante documento que se incluye entre las reliquias exhumadas póstumamente de los cuadernos de Morrison. La lectura de esta ambiciosa antología se acompaña de un total de 160 fotografías que incluyen extractos de sus veintiocho cuadernos, escritos todos de su puño y letra, y publicados aquí por primera vez, así como de una amplia selección de fotografías y comentarios sobre la obra del propio autor.
Conviene hacerse eco de importantes opiniones al respecto como la de Barbara Vanderburgh, del USA Today: “La imagen del cantante consagrado al sexo, las drogas y el rock ‘n’ roll que inmortalizó a Morrison eclipsó sus no pocas vocaciones artísticas: poeta, cineasta, compositor y letrista. Esta antología [“definitiva”] promete corregir ese trillado sesgo. Jim Morrison: obra reunida reúne en un solo volumen la prodigiosa producción artística de Morrison. Creado en colaboración con el Estate of Jim Morrison y editado con una introducción de Frank Lisciandro (cineasta, fotógrafo y amigo de Morrison de su época en UCLA), el libro extrae gran parte del material de 28 cuadernos y cientos de páginas sueltas escritas a mano, y presenta fotografías, letras y tratamientos cinematográficos desconocidos. Gran parte del material no había visto la luz”. En People nos dicen: “Jim Morrison: Obra Reunida es una auténtica revelación para los fans, en particular para aquellos deseosos de ver más allá del personaje del Rey Lagarto y de descubrir sus otras facetas creativas”. The i news te afila también los dientes: “Tan sugerente como provocador y, más allá de la fanfarronería priápica, Morrison es también elegíaco”. Pat Carty va más al grano y afirma algo muy tangible: “Este es un hermoso artefacto que todo aficionado a The Doors codiciará”. Si tú lo ves, lo lees y eres uno de ellos estarás totalmente de acuerdo.
Algunos de esos “opinadores” de prestigio ya han elogiado el más que interesante prefacio de Tom Robbins, así como la completa introducción y buenas notas a cargo del editor Frank Lisciandro. Además, el prólogo de la propia Anne Morrison Chewning. Tenemos aquí, por tanto, todos los poemas y escritos auto-editados en The New Creatures, The Lords/Notes on Vision, An American Prayer y Ode to LA while thinking of Brian Jones, Deceased. Hay obra publicada e inédita y una amplia selección de los escritos de sus cuadernos: “The Anatomy of Rock”, “The Celebration of the Lizard”, “The American Night”, “DryWater” y “Tape Noon”. Todo un festín para gourmets, vamos. Hay que añadir también la transcripción, fotografías y notas de producción de la última grabación de poesía de Morrison en su vigésimo séptimo cumpleaños en el Village Recorder y The Paris Notebook, su último diario reproducido íntegramente. Suma y sigue con los extractos de los cuadernos escritos durante el juicio de Miami en 1970 y el guion y fotogramas de la película HWY, que nunca llegó a estrenarse. Por supuesto, no faltan las letras completas de las canciones publicadas y también las inéditas.
Por cierto, en este aspecto decir que el capítulo IV titulado “Letras” acaba con las buenas apalabras del propio Morrison distinguiendo entre poemas y letras de canciones: “Para mí, una canción viene con la música, luego me invento las palabras tan rápido como puedo para aprovechar la onda hasta que música y letra se funden casi simultáneamente. Con un poema no hay música necesariamente… Hay un sentido del ritmo y en ese sentido, cierta música, pero una canción es algo más primitivo. Normalmente tiene rima y una métrica elemental, en tanto que un poema puede hacer lo que quiera”.
Curiosos también los numerosos borradores manuscritos. La guinda un más que curioso Epílogo titulado “Mirando Atrás” que es una especie de autobiografía en verso. Lo mejor de él es que a su conclusión tenemos un montón de fotografías familiares realmente encantadoras y entrañables. Bueno, en este aspecto resaltar de nuevo que todo el apartado fotográfico, siempre en cálido y elegante blanco y negro, es una gozada con algunas fotos incluso a tamaño de doble página y eso que el formato es muy amplio, además de las siempre atractivas tapas duras. ¡Completo es poco!