Entrevista Amaral


“Con este disco hemos pretendido reflejar lo que es la banda en directo”
A finales de Septiembre del año pasado los zaragozanos Amaral nos entregaban “Hacia lo Salvaje”, su sexto trabajo de estudio, con el que ya han conseguido el triple disco de platino, y que probablemente represente el disco más guitarrero, visceral, y casi libertario, de cuantos contemplan su cada vez más extensa discografía.
Un álbum que en cierta medida es hijo de los tiempos que nos ha tocado vivir, en el que el dúo de mayor éxito de nuestro panorama alza la voz de manera más rotunda que nunca, a través de una serie de historias que no dudan en mostrar la crudeza y las ganas de revuelta que que agitaron al mundo durante los meses que duró la grabación de “Hacia lo Salvaje”, y que no son más que el reflejo de los anhelos de libertad que cada vez tiene un mayor número de gente.

Ante tal tesitura la semana pasada concertamos una cita con Eva y Juan para que nos hablaran de todos los pormenores de este álbum y de todo lo que rodea a la actualidad de la banda. Esto fue lo que nos contaron en el marco de una conversación de lo más agradable.
La última vez que nos vimos os encontrabais inmersos en el final de vuestra anterior gira. Desde entonces hasta ahora ha pasado  bastante tiempo y muchas han sido las cosas que han cambiado la primera y más significativa es que a finales de septiembre del año pasado publicasteis vuestro nuevo álbum “Hacia lo Salvaje”,  vuestro álbum más guitarrero, directo y visceral hasta la fecha, tal y como se puede atestiguar en las primeras tomas de contacto con temas como “Hacia lo Salvaje” o “Antártida”. ¿A qué responde este hecho?
Eva: Yo creo que todo ha surgido de una manera natural. Tampoco queríamos dar un giro de timón. Hemos pretendido reflejar lo que es la banda en directo porque creemos que se acerca un poco más a nuestro ideal sonoro. Para ello era fundamental darle una mayor importancia a las guitarras puesto que es una parte importante de nuestro sonido. Además es el lenguaje que conocemos. Era fundamental que tuvieran más importancia en el volumen y en la composición. Hemos aligerado en otros aspectos para sonar más contundentes y primitivos.
Por otro lado también consideramos que es un disco que podríamos calificar como de menos instantáneo que sus predecesores, en el sentido de que es necesario darle varias escuchas para que entre por completo y poder saborear todo lo que contiene. ¿Tenéis esa misma percepción vosotros?
Eva: Lo cierto es que eso es algo sobre lo que no hemos recapacitado mucho. Hemos incluido las canciones que más nos llenaban o las que más nos gustaban a nosotros. No sabemos si son más o menos directas. Tenemos la gran suerte de que haya gente con la suficiente paciencia de acercarse a nuestros discos y ponérselos varias veces. (Risas)
Eso lo valoramos como algo positivo. Normalmente nuestros discos favoritos son aquellos que no entran en primeras escuchas y que requieren de más tiempo para ser desmenuzados…
Eva: Eso es verdad. A mí, personalmente, me ha ocurrido en muchos casos. Los discos que más me han gustado a lo largo de mi vida, en primeras escuchas me sorprendieron demasiado. No eran lo que esperaba. Por eso son necesarias más escuchas para descubrir lo que hay dentro.
Además creemos que es un trabajo que refleja un poco lo que es el signo de los tiempos que nos ha tocado vivir y eso es algo que queda patente en las letras de las canciones. Historias crudas, de vidas rotas y de anhelos de libertad. ¿Podríamos decir que este es el trabajo más “social” o “libertario” de cuantos habéis editado?
Eva: Juan es bastante libertario. (Risas)
Juan: La verdad es que nosotros escribimos de una forma bastante impulsiva. De eso que comentas se puede dar más fácilmente cuenta cualquier oyente. Nosotros solamente nos paramos a pensar en que las canciones nos suenen reales y verdaderas. A partir de ahí entra todo. Hablamos de lo que nos gusta, de lo que no, de lo que le ocurre a nuestros amigos o de lo que vemos en la calle. No importa si las letras son más oscuras o claras, de una forma u otra, lo que nos guía es que tengan un punto real.
Por cierto debemos felicitaros por la calidad de los textos, personalmente creemos que en su conjunto han crecido muchísimo respecto a trabajos precedentes.
Eva: Muchas gracias. Cuando estás grabando un disco todo eso que comentas es una incógnita. No hay nada que esté hecho.
Juan: Todo eso viene luego. Nosotros componemos solos; ya sea cada uno por su cuenta o juntándonos Eva y yo. Después en directo llega el momento de ver si a la gente le llega o no lo que has hecho.
Eva: Nos ha sorprendido muchísimo la respuesta de la gente. Tanto por la recepción del disco como por lo que está ocurriendo en las primeras fechas de la gira.
Sin embargo, y a pesar de la evolución patente a la que hacemos referencia, rastreando en “Hacia lo Salvaje” también encontramos ese gusto por el folk que siempre ha caracterizado a Amaral y que queda patente en cortes como “Robin Hood”, “Cuando Suba la Marea” u “Olvido”.
Eva: Yo creo que siempre ha estado presente desde los comienzos del grupo. La parte más folkie del grupo es Juan, aunque a los dos nos gusta mucho. Eso acaba por filtrarse y tiende a aparecer, pero sin duda es él quien conoce muchos más grupos. Aunque en este disco hay menos “Rickenbacker” que en los anteriores.
Juan: Es verdad. En este trabajo hemos elegido otro tipo de “colores de guitarra”. En realidad las guitarras son secundarias, lo importante son las canciones. Yo siempre toco lo que creo que viene bien a la composición.
Eva: Siempre he pensado que las guitarras de Juan tienen mucha personalidad, por eso era importante potenciarlas precisamente. Ahí estaba nuestra evolución pero también nuestra identidad.
Desde el instante de la publicación del disco hubo una canción que se coló en  nuestra redacción, elevándose por encima del resto. Estamos hablando de “Riazor” la cual, merced a ese comienzo tan onírico y esa carga de fuerza y melancolía, nos atrapó desde el primer instante. ¿Cuál es la historia de esta canción?
Juan: Es una canción que surgió hace tiempo. A raíz de un concierto que hicimos allí. En primera instancia se trataba de una composición que se había quedado ahí, nos gustaba pero le faltaba algo. Hasta que no surgió la idea del acantilado no la vimos demasiado clara. Es un tema que habla de ir cuesta abajo y de saltar al vacío. Es una sensación que todos hemos sentido en alguna ocasión.
El disco ha sido grabado en Madrid, concretamente en vuestros estudios “O Gato Negro”, bajo la co-producción de Juan de Dios Martín y vuestra, pero ha sido mezclado en Electry Lady y masterizado por Greg Calbi. ¿A qué responde esta múltiple dicotomía?
Juan: Lo grabamos en nuestro estudio porque allí estamos cómodos, tenemos nuestro equipo y además sabemos sacarle el mejor sonido a nuestros amplis. Por otro lado nos venía genial como base de operaciones para todos. Nos fuimos a mezclarlo a Electry Lady porque allí es donde trabaja Michael, además Juan de Dios había hecho un cursillo con él y vino alucinado de como trabaja. Creyó que podría aportar mucho al sonido. Lo masterizamos con Greg Calbi porque era un tipo también muy experimentado.
Eva: A Greg Calbi nos le recomendó Michael. Ha sido todo como una cadena.
Juan: Era un tío que había hecho el “Marquee Moon” de Televisión. Eso fue lo que nos convenció.
Y otro de los cambios… licenciado bajo la etiqueta de vuestro propio sello, Antártida, cumpliendo al fin con una idea que rondaba por el grupo desde hace tiempo. ¿Cuáles son las circunstancias que han motivado esta decisión?
Juan: En realidad es el tercero que sale en nuestro sello. Lo que ocurre es que “Gato Negro, Dragón Rojo” y “La Barrera del Sonido” están distribuidos por EMI, y este también está hecho en nuestro propio sello y lo distribuye Altafonte. Es algo que viene del año 2007 lo que ocurre es que ha sido ahora cuando a todo el mundo les ha dado por preguntarnos. De cualquier forma nuestra forma de funcionar siempre ha sido autónoma. Hemos terminado los discos hasta la última nota y nos hemos ocupado de las portadas, después se lo hemos llevado a quien correspondiera para que lo hicieran llegar al público. Tener nuestro sello no es más que una forma de mantener una forma de trabajar que hemos tenido siempre. A pesar de la evolución sonora siempre hemos mantenido la misma filosofía.
Siguiendo el ejemplo de lo que hicieron, o han hecho, compañeros y amigos vuestros como Quique González o José Ignacio Lapido, con desigual fortuna por cierto. ¿Os han dado algún tipo de consejo?
Eva: La verdad que no, ni uno ni otro, nos han dado consejo alguno. Aunque debemos decir que siempre es un placer coincidir con José Ignacio Lapido porque es un tipo inteligentísimo con el que es un privilegio hablar. Hemos aprendido muchas cosas en su compañía, incluso cuando él no lo ha pretendido.
Juan: Le hemos conocido más a raíz de colaborar en su último disco y de vernos bastantes veces. De Quique somos conocedores de su música pero no sabemos con quién graba, ni nada por el estilo. Conozco los discos pero nunca me he fijado en sus ediciones. De todas formas para nosotros esto no implica haber renegado de nada. Simplemente antes se grababa con Virgin que desapareció al ser absorbida por una compañía mayor. Cuando llegó la hora de ver qué hacer nos propusieron cosas, pero ambos vimos que íbamos camino de hacer nuestro propio sello. Estamos muy agradecidos a nuestra anterior compañía, hemos dejado muchos amigos con los que conservamos una relación genial.
Otro de los cambios significativos que presenta este “Hacia lo Salvaje” es la nomina de músicos de los que os habéis rodeado para grabarlo y defenderlo en directo. Destacando sobre todo las figura de Tony Toledo y Jaime Soriano, batería y vocalista respectivamente, de los siempre admirados Sexy Sadie. ¿Cómo surgió la idea de que colaboraran con vosotros?
Juan: Cuando vivíamos en Zaragoza seguíamos a Sexy Sadie, eran una de las bandas que más nos gustaban. Tiempo después yo colaboré con ellos en su Dvd de despedida. Fue ahí donde nos dimos cuenta de que compartíamos muchas influencias musicales. Al entrar a grabar Jaime con su proyecto Eva colaboró con él. “Hacia lo Salvaje” ha sido grabado por Chris Taylor, al bajo, y Toni Toledo, a la batería. Hicimos un cuarteto entre ellos dos, Eva y yo, al que hay que sumar la figura de Juan de Dios en la producción. Cuando estábamos acabando Jaime se pasó por el estudio e hizo algunas voces. Donde realmente ha aparecido ha sido a la hora de echarnos una mano con las guitarras en directo y en los coros. La verdad es que ahora tenemos un directo muy eléctrico entre los cinco. Estamos muy contentos.  
Por cierto, impresionante el trabajo que hace en los coros Jaime en “Van como Locos”…
Eva: En esa canción Jaime aparece, pero realmente somos unos cuantos metiendo voces. Estábamos en la cabina gritando a la vez. La verdad que llevarle haciendo coros en directo y tocando la guitarra es “matar moscas a cañonazos”.
Juan: Jaime es un gran cantante y guitarrista.
Otra de las novedades significativas tiene lugar en vuestros directos donde parece que habéis decidido dejar atrás toda la iconografía recargada que os acompañó en vuestra anterior gira para dar paso a una escenificación más simple o “Espartana”, como la definió Juan Aguirre el día de la presentación del disco en la Sala “El Sol”.
Juan: Eso ha quedado reducido de momento porque las presentaciones estaban pensadas para lugares de mediano aforo, aunque hayamos hecho algunos recintos de más capacidad. Cuando saltemos a los conciertos grandes veremos qué hacer. De todas formas yo creo que esta gira funciona de otra forma con luces y sombras, aparecen proyecciones. Va a haber cambios, como hemos hecho en todas las giras.
Eva: Creemos en una puesta en escena que potencie lo que está sucediendo en torno a la banda. Lo importante es la música.
Ideada además para tocar en recintos más pequeños de los que nos tenéis acostumbrados en giras pasadas y que parece ser una tendencia que están tomando otros compañeros músicos como Manolo García o Bunbury. ¿Os habéis cansado de la distancia que imponen ciertos lugares entre espectador y músico?
Juan: En primera instancia nosotros lo planteamos como una posibilidad para poder tocar todo el disco al completo en directo. Verdaderamente nosotros nos encontramos muy a gusto tocando en sitios tan dispares como “El Sol”, el Palacio de Congresos o el Palacio de Deportes. Lo importante es que suene bien.
Eva: En la gira anterior empezamos tocando en sitios enormes, pero acabamos tocando cinco días seguidos en un recinto menor como el Circo Price. Yo creo que esa experiencia nos gusto mucho, era un sitio tan acogedor y tan bonito. En cierta forma este disco hemos querido presentarlo en sitios donde toda la energía quedara condensada y donde el público se sintiera cómodo.
Habéis citado hace un instante la Sala “El Sol”, donde tuvo lugar la “polémica” presentación de vuestro sello. Aquel día nosotros salimos con bastante mal sabor de boca por lo que aconteció horas después en parte de la prensa, dándose importancia a un hecho que no la tuvo y que apenas ocupó un minuto, restando valor al hecho que realmente nos llevó allí. No vamos a volver a hablar de la polémica, pero me interesa saber la opinión que os mereció la actuación de la prensa ese día. ¿No creéis que es una pena que se no valorará realmente el hecho de que lo que fuimos a hacer allí fue la presentación de un disco?
Juan: Realmente lo que ocurrió… ni siquiera era la presentación del disco, sino del sello, de que nos íbamos a mezclarlo a Estados Unidos, de que estábamos grabando, porque el álbum se presentó meses más tarde. Además no fue la actitud de toda la prensa, sino de una periodista concreta con nombre y apellidos, una persona que debía trabajar para una agencia y que sirvió una tergiversación suya, muy personal, de lo que yo había dicho y de lo que había pasado, y el resto de medios lo difundieron dándolo por cierto. No quiero entrar en detalles al respecto, simplemente quiero decir que fue cuestión de una sola persona. Quiero romper una lanza en favor de la condición de periodista y de los medios de comunicación que normalmente no funcionan así. Esto fue cuestión de uno solo. Si ella entiende que la manera de funcionar es así, yo le remitiría al “Manual de ética periodística” de Juanjo de la Iglesia que salía en “CQC”. (Risas) Creo que hay que reírse de todo, quitarle importancia, además después de seis discos nos tenía que pasar. Yo creo que la mayoría de los periodistas son gente que refleja fielmente las cosas. Agradezco a las web musicales, a los medios musicales más generales y alternativos que recogieron las cosas con fidelidad. Rompo una lanza por vosotros, “El Giradiscos”, Jenesaispop, la web de Efe Eme o Rolling Stone, por contar todo tal y como fue.
¿Qué os parece la situación actual de la industria? ¿Creéis que hay que proponer nuevas fórmulas para llegar al público dado el ocaso de las radios tradicionales y la sobrexplotación de ciertos canales?
Juan: Hablar de la industria es algo aburrido, más que nada por la situación en que se encuentra.  Creo que es más positivo hablar del buen momento que vivimos gracias a propuestas muy validas. Además tenemos una herramienta como Internet que es enorme. No solamente para la música, también para videocreadores, diseñadores, gente que escribe cosas. Creo que es un buen momento para los creativos.
Eva: Gracias a Internet hemos visto una evolución importante. Las posibilidades son infinitas.
Recientemente tuvimos constancia de que Amaral, en colaboración con cervezas Ambar y Borja Bonafuente, sería parte de una colección exclusiva de botellas con un diseño inspirado en las letras de sus canciones. ¿Cómo surgió esta idea?
Juan: Fue una idea que se les ocurrió a la gente de Ambar que de alguna manera siempre han estado relacionados con la música de la ciudad. A nosotros nos pareció bien lo que se les ocurrió, una canción por cada botellín. Al ser una historia que venía de Zaragoza nos ganó, aunque nosotros no somos muy dados a este tipo de cosas.
Eva: Después al ver todos los diseños nos encantaron.
Juan: Creo que lo han hecho dos veces. La primera con la reunión de Héroes del Silencio y después con la edición que han sacado de “Hacia lo Salvaje”. Además nos encanta porque la gente que lo lleva es cercana y relacionada con el mundo de la música zaragozana.
En nuestra última charla Juan nos habló de las bondades de bandas como Copiloto, Standstill o Love of Lesbian. ¿A día de hoy qué destacaríais del panorama nacional?
Eva: A mi personalmente me gusta mucho Nacho Umbert. Le vimos hace poco en el teatro Lara y a mí me encantó.
No hemos tenido la oportunidad de hablar con vosotros sobre el fallecimiento de Enrique Morente. Fuisteis de los privilegiados que tuvieron la oportunidad de colaborar con el maestro. ¿De qué manera os afectó su perdida?
Juan: Nos afectó como fans y como amigos. Es difícil de explicar. Fue algo que ocurrió de manera muy rápida e inesperada. Para nosotros fue una pena muy grande por ser una gran pérdida.
Vamos a finalizar con una última pregunta. Próximamente se cumplirán catorce años desde que viera la luz vuestro primer álbum. Un trabajo que vino precedido de mucha dedicación y esfuerzo. Ahora que vuestras actuaciones se cuentan por llenos y sois uno de los grupos más reconocidos de nuestra música. ¿Qué valoración hacéis de todo este periplo vital?
Juan: La verdad que no nos hemos parado mucho a pensarlo. Todo ha pasado muy deprisa. Hemos hecho muchos viajes y conciertos, hemos aprendido muchas cosas. Nos han dado la oportunidad de vivir muchas vidas en poco tiempo. La verdad que estamos muy agradecidos a toda la gente que nos ha traídos hasta aquí. Han sido ellos los que nos han traído.
Eva: Yo no sabría que valoración hacer. Para mí fue ayer. No hemos parado de hacer conciertos, grabar y viajar. Cuando haces tantas cosas el tiempo se pasa volando.
Por: Javier González e I.G.
Foto: Iván González