Mac DeMarco: “This Old Dog"

Por: Txema Mañeru

Si todavía no tienes el nombre del canadiense Mac DeMarco en tu agenda de jóvenes a seguir, es que andas un poco despistado. En los últimos tres años nos ha entregado ya otros tantos LPs y dos EPs -mucho más que meros apéndices a su obra- que lo colocan como uno de los artistas más importantes de la última década. Su música se mueve por territorios cercanos al folk-rock-indie de los últimos tiempos con matices lo-fi, pero con grandes destellos de (mucha) personalidad propia. Por si fuera poco también está al frente de otro proyecto complementario y que puede darnos también muchos momentos de disfrute como son Homeshake Walter TV

Está desde sus comienzos en el interesante sello Captured Tracks, que es aquí distribuido por Everlasting / Popstock! Su música parece muy sencilla, pero tiene muchos bonitos y cuidados detalles que se van apreciando con sucesivas escuchas. Eso ya ocurría en discos anteriores como en el también destacado “Salad Days” y lo corrobora ahora en este muy completo “This Old Dog”. Este perro viejo le canta sin pudor hasta a su padre alcohólico que le dejó abandonado muchos años atrás en la inicial "My old man", en la que se ve reflejado en él entregándonos una combinación de electrónica y folk, pero con auténtica magia. También habla de cómo ve que se desvanece en la final "Watching him fade away". Pero este disco y este artista no se desvanece en estas canciones. 

Es normal que se hable de Kurt Vile, Chad Vangaalen o de los Wilco más experimentales. También que se cite a figuras ya consagradas totalmente autónomas e independientes como Bon Iver, M.Ward o Connor Oberst. Incluso ciertos arreglos y melodías pueden recordarnos al mismísimo Rufus Wainwright o al más arriesgado Daniel Romano. Pero hay mucho más. Por ejemplo, los aires pop-folk del tema titular tienen algo del gran Elliott Smith o los magníficos aires playeros de su nuevo single y videoclip "One another". Está la magnífica melodía vocal de "Still beating", adornada por el juego mágico entre una guitarra acústica y otra eléctrica. 

En "Dreams from yesterday" y otros momentos nos sorprende con leves ritmos sintéticos de aromas brasileños. La armónica y otros arreglos lo-fi irradian optimismo a lo Jack Johnson en temas como "A wolf who wears sheeps clothes", con tan divertido título. Hasta se permite sorprendernos con cálidos arreglos entre soul y jazz en "One more love song", como si fuera una maqueta primeriza de los Steely Dan. Tras el primer single, "On the level", llega la canción definitiva. "Moonlight on the river", una locura total de más de 7 minutos cargados de originalidad que hay que escuchar y juzgar. Luego el tipo es también un encanto en directo y sabe pasar estos temas a dicho formato. Y es que hay quienes lo tienen y quiénes no. ¡DeMarco lo tiene y se hará más grande!