Ezra Furman: "All Of Us Flames"


 Por: Àlex Guimerà

Su carrera arrancó en 2006 como Ezra Furman & The Harpoons, pero no fue hasta 2015 que lo petó con uno de los mejores álbumes pop de la década, "Perpetual Motion People", en el que fusionaba estilos con maestría, aunque lo que le dio el impulso definitivo y la popularidad fue su colaboración con la serie "Sex Education", a la que aportó la banda sonora con sus canciones sobre adolescencia enrevesada del que se editó una compilación en 2020 que daba buena muestra de su largo cancionero.

Pero ha sido su transición a género femenino lo que le ha ido marcando estos últimos años a nivel personal y creativo. Por ello sus sentimientos más profundos, experiencias personales y miedos han sido plasmados primero en el oscuro "Transangelic Exodus" (2018), en la que se incluía el himno "Love You So Bad", más tarde en el álbum punk "Twelve Nudes" (2019), en dnde sacaba toda su rabia, y ahora con este madurado "All Of Us Flames", que nos vuelve a confirmar el enorme talento de esta cantautora de origen judío.

Producido por un maestro como John Congleton (Bob Dylan, Bruce Springsteen o Patti Smith), con este nuevo disco Ezra reivindica romper con los lazos de la sociedad patriarcal y dar voz al colectivo transgénero. Un mensaje que riega todas las canciones, en las que si bien el sonido punk queda aparcado, su tono enérgico se mantiene como siempre.

Con "Train Comes Through" abre las puertas a modo de himno, y la metáfora del tren simbolizando el cambio de sexo, de un convencido repertorio. En "Throne" las guitarras sucias a lo PJ Harvey derivan en épica bajo unos coros celestiales, mientras que en "Book Of Our Names" cita el título del álbum en medio de una letra que clama a favor del respeto de la comunidad ante su colectivo. A destacar también "Dressed In Black", con sus ecos retro y soberbia interpretación vocal, una garganta que se vuelve a lucir en la sosegada balada "Point Me Toward The Real".

Las etéreas "Ally Sheedy In The Breakfast Club" y "I Saw The Truth Undressing" llevan mucho de Dream Pop, aunque con unos efectos instrumentales ensuciados y distorsionados. Lo mismo sucede con el tecno-pop de "Lilac and Black" y "Poor Girl A Long Way From Heaven". Finalmente "Come Close" y su pop naif cierra este interesantísimo álbum que nos muestra una cara musical algo relajada de esta artistaza cuya música es tan universal como el loable mensaje que nos lanza. Para ello debería servir la música.