Entrevista: Santi Campos

"Mientras te muevas en terrenos confortables es más difícil que hagas algo que merezca la pena"

Por: Kepa Arbizu
Fotografías: Vicente Núñez

A lo largo de estos últimos años hemos compartido las composiciones de Santi Campos a través de Malconsejo o de sus Amigos Imaginarios, todo ello, con variantes, dentro de un personal modo de desarrollar un pop-rock clásico. Tras unos años alejado del mundo musical, regresa con un disco, bautizado con el explícito nombre de “Cojones”, con el que se aleja de esos parámetros, se mete a trabajar con la electrónica y diferentes texturas sonoras que dan como conclusión un resultado que parece una inaudita mezcla entre Leonard Cohen y Kraftwerk o Mark Kozelek con Suicide. Un cambio tan estimulante nos obliga a ponernos en contacto con su autor y conocer de sus propias palabras a ese “nuevo” (¿o no tanto?) Santi Campos

Has estado durante una época alejado de la música, ¿tenias claro que iba a ser algo temporal o no había una intención clara? 

Santi Campos: Yo tenía claro que era definitivo, pero nadie me creía (risas) y efectivamente tenían razón. Cuando dejé de tocar creía que no iba a volver porque acabé bastante quemado y sin ideas que me parecieran nuevas. Pero hay que matizar, una cosa es tocar y hacer canciones y otra es la exposición pública, yo nunca dejé de hacer canciones, de lo que me cansé es de toda la parte no musical que hay, y también de no ver una evolución que a mí me gustara. 

¿Y hubo algún hecho concreto que despertara tu interés por regresar? 

Santi Campos:  Yo creo que el detonante fue el hecho de encontrar unas canciones y una forma de hacerlas que me motivaba. No voy a utilizar la palabra original, porque nada lo es, pero sí me parecía distinto a lo que había estado haciendo hasta ese momento. Creo que fue culpa de una de ellas, “Gigantes”, que en su parte rítmica había algo que yo no había usado nunca. Cuando la maqueté y me di cuenta de un camino que había abierto y me excitaba decidí seguir por ahí.

Regresas con un cambio de estilo evidente, con mayor presencia de la electrónica, jugando con las capas sonoras, los ambientes.. ¿es un tipo de música, unos gustos que siempre has tenido aunque no se manifestaran claramente en tu trabajo hasta ahora o son reflejo de descubrimientos más recientes? 

Santi Campos: Es un poco de las dos cosas, tiene mucho que ver con descubrimientos recientes que me han hecho ver las cosas que me gustaban de otra manera. Cuando me vine a Barcelona y conocí a una gente que tenia unos gustos musicales más abiertos de los que yo creía tener, empecé a escuchar, sin mucho afán de investigar, ese tipo de músicas, y me empezaron a gustar cosas que incluso antes había demonizado. A raíz de querer hacer algo más enérgico, más sencillo a nivel acordes, me di cuenta de que era lo que escuchaba con 13, 14, 15 años...Radio Futura, Television... canciones bien vestidas pero sencillas en cuanto a estructura. Me di cuenta de que Television y Kraftwerk no están tan lejos, y la Velvet y Tinariwen tampoco. La intención del disco es que todo eso estuviera ahí dentro.

Es un disco por lo tanto hijo en parte del contexto geográfico... 

Santi Campos: Lo es... igual hubiera llegado de otra manera, porque mis ganas de no repetirme siempre han estado... Lo que pasa es que en cada trabajo anterior creía que no me estaba repitiendo y ahora al hacer un cambio más grande me he dado cuenta de que si. Mi intención era que cada disco fuera diferente al anterior, pero no de una manera tan atrevida. Y en eso el entorno desde luego ha sido fundamental. 

 El hecho de ofrecer algo diferente a lo que estábamos acostumbrados asociado a tu nombre, ¿en algún momento te ha creado cierta sensación de miedo o vértigo? 

Santi Campos: Pues en parte sí y no. Tengo claro que no me puede influir la gente en lo que hago, pero por otro lado a los que le gusta mi música son muy cariñosos, son pocos pero muy cariñosos. Decepcionar a esas personas tan fieles sí me preocupaba en cierto modo. Pero sino no avanzas, es una metáfora de la vida, si por no decepcionar a la gente que te quiere no haces cosas te quedas parado. 

Y una vez que el disco ya está algo rodado, ¿crees que ha habido más decepcionados o contentos? 

Santi Campos: Pues creo que habrá habido de todo, gente a la que le parezca una aberración, peor, mejor.. Yo creo que a los que no les gusta ni siquiera me lo han dicho. Lo que sí he notado es que había gente con la que nada más sacar un disco sentía un feedback inmediato y ahora no me ha llegado ninguno, por lo que supongo que no les ha gustado; otros en cambio han visto la intención y han creído que era bueno el avance y me han echado muchos piropos.

Personalmente no sé si te asombrará si te digo que me costó al principio hacerme al disco, pero que tiene algo de emocional, de sincero, que me fue ganando con las escuchas, ¿contabas con ello, tener que ganar la partida poco a poco? 

Santi Campos: Eso seguro, desde luego en los discos que yo hago no hay pose, aunque está mal que yo lo diga, pero es así. Entonces lo que suena es una verdad y el que tenga paciencia de escucharlo verá una cosa sincera y no le parecerá tan aberrante. Lo que es cierto es que es un disco que si no te gustara lo mío anterior no le habrías dado ni dos oportunidades, si no fuera por el aprecio que le tienen a mi música muchos no lo habrían intentado.


Respecto a los músicos de los que te has rodeado para que te acompañen en este proyecto, (Martí Perarnau, Ricky Falkner, Julián Saldarriaga y Nacho García) ¿tenías clara su elección desde el primer momento o los eliges en función del tipo de disco que querías hacer? 

Santi Campos: Los elegí en función del camino que habían tomado las maquetas, en ellas está, de una manera peor ejecutada, todo lo que hay en el disco. Quería un guitarrista muy poco virtuoso pero muy rítmico, y conozco bien la forma de tocar de Julián y tenia que ser él. Nacho, el batería, estaba clarísimo, el está en una situación muy parecida a la mía, viene del power pop, de un mundo más mod, y hemos evolucionado de una forma paralela, hasta un punto en el que cabe casi todo en nuestra forma de hacer las cosas. Martí porque es el tío más marciano que conozco a nivel instrumentista y Ricky porque... es la hostia. Todos fueron la primera opción y tuve la surte de que me dijeron que si.

A la hora de buscar un titulo para el nuevo disco, ¿siempre tuviste claro este “Cojones” tan directo y explicito? 

Santi Campos:  El título me buscó a mí. El invento de la portada, el corazón, existe mucho antes incluso que las canciones. Es una cosa que tengo yo colgada en el pasillo de mi casa y la hizo hace muchos años Noemí Llantada, que es la ilustradora de la portada de los dos discos anteriores de Los Amigos Imaginarios. Incluso en un momento dado en vez de poner "Cojones" pensé en "Gigantes" y llamarlo así, pero como me di cuenta de que este disco estaba siendo un cambio muy claro y era como un puñetazo en la mesa, con respecto a mi música, el titulo creía que tenia que ser algo contundente. Cuando perdí el pudor lo llamé así, ya estaba claro.

A pesar de ese nuevo estilo del que hablamos hay varios temas que parecen tener una base muy tradicional como "Fuego", "Arco del triunfo" o incluso "Aire y plomo", ¿a la hora de componer partías de unas ideas mas clásicas y desnudas para ir agregando otras texturas o capas? 

Santi Campos: Yo tenia claro que las canciones tenían que ser muy básicas en la parte de la estructura, que tuvieran dos-tres acordes, como puede ser un rock and roll, un blues o la música tradicional.. una jota por ejemplo (risas), y que ese vestido, y lo que estaban contando, fuera lo que las hiciera más raras.

¿Y ese revestir de las canciones fue un trabajo más solitario o en grupo? 

Santi Campos: La intención estaba ya en todas las canciones, lo que pasa que muchas cosas estaban grabadas con ordenador y las posibilidades que te dan ese tipo de programas. El espíritu y el camino estaba muy claro en las maquetas, luego lo cogen estas personas tan hábiles y hacen cosas que para mi fueron mágicas .La grabación fueron muy pocos días y fue increíble, yo casi no toqué, estaba mirándoles hacer mi disco.

En una canción como “Corazon de cuerda” hablas claramente de hacer lo que uno cree sin, usando tus propias palabras, importarle respetar las reglas, ¿hay que ver en ella un reflejo del espíritu que te ha llevado a hacer un disco así? 

Santi Campos: Sí. Es una canción que tiene ver con la actitud de cabreo previa a hacer ese cambio que luego llevas a cabo de una forma menos enfadada. Es la rabieta previa a dejar que todo se pose, después de eso viene el cambio.

Cierras el disco con “Solo quiero yo quiero”, que me parece la canción que mejor podría encajar en discos pasados tuyos, ¿tiene alguna significación especial acabar con ella? 

Santi Campos: La tiene... Es una canción que no quería meter en el disco precisamente por eso, porque recuerda a lo que hacia antes, pero Julián, el guitarrista, se empeñó en meterla. Yo la tenia con un arreglo muy distinto, es el tema que curiosamente más ha cambiado con respecto a la maqueta. Él estaba empeñado en incluirla y al final me convenció, lo que pasa es que no la veía en ningún lugar del disco y por eso la dejé para el final. Pero es un tema que está metido porque otra persona se empeñó, y estoy agradecido.


En estas nuevas canciones me da la sensación de que utilizas más que nunca la tercera persona, ¿significa que hay más observación que vivencia en ellas? 

Santi Campos:  Exacto (risas), es totalmente así, no tengo más que añadir.. Lo de la tercera persona es buscado y que no fuera estrictamente autobiográfico también, con todos los matices que eso tiene, porque es casi imposible hacerlo. Cualquier disco anterior mío era un diario, veías la fase de mi vida en la que estaba, y en éste no, o por lo menos no en las letras.

¿Un cambio musical, como el que has realizado, debía de ir acompañado de una forma diferente de contar las cosas también? 

Santi Campos: Es que yo quería que el cambio fuera real, de hecho con el tiempo me jode que no haya sido más radical, porque es lo que pasa siempre, y Marti me lo dijo cuando estaba grabando su último disco de Mucho, creía que estaba haciendo algo muy revolucionario respecto a lo anterior, y se dio cuenta, y lo dijo de forma cómica, que había hecho la misma mierda, y yo en el fondo he hecho también la misma mierda. Y no ha sido por falta de valor, sino porque todos por mucho que queramos desencorsetarnos no podemos, no estás tan abierto como crees estarlo y hablo con todo los matices, porque estoy muy contento con el disco, pero me hubiera gustado ser más valiente. 

 Al final un creador no puedo escapar de su personalidad... 

Sí, pero eso no es malo, yo no renuncio a mi forma de hacer, a lo que tiene de personal. Se tiene que notar que el disco es del que lo hace, porque es lo poco que puedes aportar a la música. Lo que no me gusta es ceñirte a patrones que tradicionalmente son en los que te sientes confortable, mientras te muevas en terrenos así es más difícil que hagas algo que merezca la pena.

¿Y esta nueva cara de Santi Campos pretende tener continuidad o de momento lo has tratado como un episodio aislado?

Santi Campos:  No, no se trata de una rabieta (risas), se trata con más o menos fortuna de ser valiente. Ahora estoy en proceso de tocar con banda otra vez y es un poco complicado ese tipo de apertura, por lo menos para mi, veremos lo que viene luego...

Como banda en directo creo que vas a llevar una diferente a la utilizada en la grabación, ¿se va a tratar de intentar reproducir lo hecho en el disco o habrá vía libre para dejar fluir su personalidad en las canciones? 

Santi Campos:  A priori la intención fue reproducir lo que había en él, lo que sucede es que según pasan los ensayos, y que también el disco son cuarenta minutos y necesitamos montar otras canciones, ahí empezamos a recrear la personalidad de estos miembros, en una dirección parecida al disco pero metiendo el estilo de cada uno. Así será por lo menos en estas primeras presentaciones, luego ya podremos evolucionar hacia donde vayamos, que no se dónde será.

Eso quiere decir que en los conciertos se podrán escuchar canciones, dentro de este estilo, pero inéditas... 

Santi Campos: Exacto, son canciones que estaban en las maquetas pero se quedaron fuera del disco...