Entrevista: Vetusta Morla



“Las canciones tiran de hilos que tienen que ver con el folclore” 

Por: Javier González 

El recogimiento y reencontrarse con sus instrumentos en casa ha posibilitado que Vetusta Morla haya facturado este “Cable a Tierra”, un trabajo reconocible donde la banda no ha dudado en echar una mirada nuestro folclore más sentido, facturando unas canciones que por momentos miran a los ojos y a la grandeza de aquellos textos eternos firmados por los maestros León, Quintero y Quiroga pasados por el acertado filtro de los de Tres Cantos

Nuestro pasado que vuelve remozado para presentarse como la mejor puerta de acceso al futuro, donde esas músicas eternas que acompañaron al dolor de nuestros mayores, resuenan intensas para acompañar en la incertidumbre de una pandemia sin fin a sus nietos y nietas. 

Contactamos con Álvaro B. Baglietto con idea de mantener una bonita charla donde nos presenta a este “Cable a Tierra”. 

¿Cómo estáis sobreviviendo en mitad de la tormenta? 

Álvaro: Teníamos una incertidumbre rara en 2020 antes de que llegara la vacuna. No conocíamos las condiciones del juego, sabíamos que haría falta una vacuna, pero los informativos hablaban de que quizás podría tardar años en llegar. Hubo incertidumbre y miedo. Después el sector se ha visto muy afectado económicamente, gracias a la vacuna se ha medio activado, aunque lo ocurrido el año pasado no dio para que la industria levantara el vuelo del todo. En 2021 se ha vuelto a ver a los promotores ilusionados, tratando de normalizar la situación, lamentablemente hemos perdido profesionales por el camino que se han buscado otras profesiones y también mucho talento de artistas que no han aguantado el tirón. Ahora que gran parte de la sociedad está vacunada no nos queda más remedio que mirar con optimismo al horizonte, es lo único que vale. Nosotros tenemos una declaración de intenciones muy clara que es el concierto del Wanda Metropolitano el 24 de Junio de 2022 para dar por finalizada la pandemia. Ojalá pueda ser así. A menos que venga una cepa nueva que nos deje planchados. Toda la industria y Vetusta Morla desea dejar esta situación atrás. 

Me gusta especialmente el concepto musical de este disco, los que hemos estado en casa de nuestros abuelos y abuelas muchas horas de pequeños nos hemos reconfortado al escuchar esas querencias antiguas. ¿Es complicado hacer un disco que recupere el sentido del calor del hogar? 

Álvaro: Qué bonito de verdad. En nuestro mundo creativo no podemos hablar de complicado porque cuando haces algo que te gusta y fluye sale solo. No nos ha costado. No es algo duro, sí bonito. Al comenzar a juntarnos para componer no sabíamos por dónde iba a salir, más tarde nos dimos cuenta que habíamos pasado mucho tiempo en nuestro hogar y nos habíamos replanteado la identidad e instrumentación. Ten en cuenta que al estar en casa no se toca con distorsión, ni los amplis están al mismo volumen, vienes de otro lugar. Es cierto que tiene ese sabor a hogar, igual que la banda sonora de “La Hija”, donde uno de los protagonistas es la casa en sí misma. Al fina los elementos se juntan de forma casi inconsciente. Las canciones tiran de hilos que tienen que ver con el folclore y una instrumentación mamada sin darnos cuenta. Pucho nos recordó que sus padres le llevaron a ver un concierto de Rocío Jurado cuando tenía ocho años y flipó. Sin darte cuenta descubres que no solo te gustan The Beatles, Radiohead o Pearl Jam, en la puerta de casa sonaban coplas y pasodobles que en este confinamiento han resurgido. Tus años de vida se ven reflejados en las canciones y Vetusta llevamos muchos años tocando juntos y todo sale de forma fluida. 

El disco tiene ese aroma a temas de León, Quintero y Quiroga que se asocian a un tiempo de dolor de nuestra historia para mucha gente, algo que bien podría emparentarse con esta locura que estamos viviendo. ¿Qué os ha impulsado a mirar tan atrás en este momento? ¿Tiene algo que ver con eso que comento? 

Álvaro: Fíjate puede que sean procesos inconscientes, quizás en épocas de dolor e incertidumbre se conecten puntos que tengan el dolor como común denominador. En nosotros han surgido. Es verdad, pero no lo había pensado hasta ahora. Es una música utilizada por élites dictatoriales, siendo de alguna manera usurpada de sus orígenes. Quizás a estos ritmos y estilos se les ha dado la espalda durante la democracia. 

““Cable a Tierra” es una reivindicación que tiene que ver con el pueblo, la casa y el origen” 

Es una mirada al pasado que es recurrente en nuestra música: Sabina, Bunbury, Rosalia. ¿Alguna vez seremos conscientes de la grandeza de nuestro pasado musical? 

Álvaro: Sí, yo creo que ya está sucediendo. A mí me sorprende que cada vez que saca disco Vetusta Morla tiene que ver con el contexto social. Nos ocurre que nosotros nos damos cuenta a posteriori, una vez que el trabajo está en el mercado, pero no es un hecho aislado. Todo lo que ocurre se plasma en esos artistas citados, pero también en literatura y fotografía. Este “Cable a Tierra” es una reivindicación que tiene que ver con el pueblo, la casa y el origen. 

Semanas atrás bajé al “Monkey Week” y creo que el momento del festival ocurrió durante el homenaje a Serrat, cuando Miguelito García se cantó “Saeta”, dejándonos al borde del llanto a todo el respetable. 

Álvaro: Son canciones que tenemos en el ADN, tiene que ver con lo ya citado. Ahora se reivindica cierto pasado desde muchas vertientes artísticas. 

Si te digo que escuchando este trabajo me he acordado muchísimo del Xoel López de “Atlántico”. 

Álvaro: En ese álbum nos lo encontramos por Argentina, andaba reencontrándose. Sí, tienen mucho que ver. 

¿Cómo de complicado ha sido conjugar ese concepto antiguo con la electrónica y la electricidad? 

Álvaro: Al componer no hay premisas en la cabeza. Somos nosotros sin más. Luego en las entrevistas y en charlas es cuando nos lo replanteamos. En cierta medida son reflexiones a posteriori. El disco lo comenzamos a componer con “Filomena”, otro momento raro de la historia de España. Fue un grito, un sacarlo todo de golpe. En tres meses estaba compuesto y grabado. Ha sido nuestro disco más rápido. No queríamos hacer algo diferente, nos sale por un tema de investigación. Nos ponemos a tocar sin más, no pensamos que dejaremos de sonar a Vetusta. De hecho, es un disco que me suena muy Vetusta y creo que era un trabajo que nos faltaba en nuestra discografía. 

Al escuchar “La Virgen de la Humanidad”, he sentido un deja vu, la misma sensación que al escuchar “Golpe Maestro”. ¿Se está convirtiendo en costumbre dentro de Vetusta Morla comenzar los discos con canciones a tumba abierta? 

Álvaro: No me recuerdan, sinceramente. En cuanto a temática para mí “La Virgen de la Humanidad” es un collage que habla de lo viejo y nuevo. Te mete cosas de América, hay una frase de Charly García y un sampler de Concha Piquer. Es una mezcla curiosa, pero encierra una declaración de intenciones del disco, tenía sentido que fuera de las primeras. Es una canción que abandera “Cable a Tierra” ya que tiene todas las patas. “Golpe Maestro” era una queja sobre tanta corrupción de la clase política y empresarial. No las veo mucha relación, aunque es recurrente que la gente busca otros significados totalmente válidos a nuestros temas. Nos gusta mucho cuando nos cuentan sus significados, me parece genial.

“No Seré Yo” es una crítica a redes sociales y a la equidistancia, al servilismo y a la traición… 

Álvaro: Hay una frase que me encanta la del “sheriff con la estrella de papel albal”. Se nos infla el pecho en el balcón y en redes de una manera lamentable, deberíamos hacer autocrítica. Las redes sacan una parte de nosotros que conviene educar y no sacar a relucir. 

“El Imperio del Sol” y “Al Final de la Escapada” se han colado en nuestras cabezas por frases dedicas a las bandas y porque en el fondo es un cierre con optimismo y aliento. ¿Es el mejor momento para tratar de estar juntos en este sector? 

Álvaro: Desde luego. Estoy totalmente de acuerdo. En la pandemia yo esperaba que esto nos uniera más. Debemos vernos en global, formamos parte de un todo. Es un concepto para familias, barrios y sociedades. Esas canciones yo no veo que hablen de eso, aunque quizás sea su trasfondo real. 

Os conocí en la etapa final de picar piedra en salas de mediano aforo. ¿Cómo veis está situación tan crítica para el talento emergente? 

Álvaro: Ha habido mucho talento que se ha quedado fuera, ni han llegado al embudo. La industria ha estado dañada. No hemos sabido gestionar el talento de esta sociedad, se ha perdido. Mucha gente no es consciente porque no lo ve. Tengo nostalgia por muchas cosas que no han sucedido. Me refiero a una creación que pudo haberse dado y no se da por falta de apoyo. Es algo que ocurre a menudo.

¿Qué valoración hacéis del concierto que distéis a través de “Tik Tok”? 

Álvaro: Salió muy bien, tenemos ganas de usar esas imágenes, ya que nos las han cedido. Fue un concierto de presentación. Decidimos decir que sí a su oferta ya que era una rampa de lanzamiento bonita para llegar a todo el mundo en una plataforma que está arrasando. Tuvimos más de 260.000 visitas. Nos importaba la calidad del audio y la estética de la imagen, trabajamos mucho y salió muy bien. Hubo muy buena escenografía y luces, también la tocata salió muy bien. Nos dejaron un dinero de producción que nos gastamos, bueno eso y mucho más. Hacemos las cosas si tienen garantía de calidad Vetusta. Otra cosa es que se tengan que tomar decisiones con playbacks y con estéticas feas y sonido no profesional, nosotros no lo hacemos. En este caso estamos contentos y satisfechos, nos felicitamos todos los equipos que participamos en aquello por hacer algo potente. 

¿Dónde os llevara el futuro más próximo? 

Álvaro: Hay una gira anunciada y nosotros en cuanto acaben las vacaciones comenzaremos a trabajar los directos y la personalidad de “Cable a Tierra” para presentarlo al mundo. Queremos superar esta prueba dura que nos ha puesto la vida. Tenemos mucha ilusión que es lo que nos mantiene unidos.