Xavi Malacara: “The Man And The Ocean"


Por: Txema Mañeru

Sigue de cambios en plena pandemia el gran Xavi Malacara. Hace dos años sacó un currado y chulo “The Rookie”, como si fuera un debutante. Claro que ese disco, de aires más folks y de música de raíces americanas, además de su amado blues, ponía fin a una relación de años con el guitarrista británico Tony Wilson, con quien había entregado trabajos tan recomendables como “Summer Camp Blues” (Hotsak) o “Miles Down Blues”, en el todavía reciente 2019. Ese “The Rookie” vino a nombre de la Malacara Blues Band, pero es que el actual “The Man And The Ocean (Producciones Acaraperro / Rocksound) aparece ya bajo su nombre,  Xavi Malacara, por lo que puede ser considerado su debut en solitario y nos hace pensar que estamos ante su trabajo más personal hasta la fecha. Y eso tras más de dos décadas de tocar y crear música y de trabajar en muchas ocasiones, codo con codo, con el gran Mario Cobo (Nu Niles, Loquillo, Los Locos Del Oeste).

El nuevo disco está grabado con una mayor intimidad y cerca del mar, sí, más concretamente en la bella Port Bou, además de rodeado por amigos y personas queridas. Tonos melancólicos y crepusculares, historias de amor y desamor, amistad y muchas brillantes metáforas encontramos en sus buenas historias. De nuevo, sin perder su sempiterna base blues, cede más espacio a agrestes y relajados tonos folk o del mejor rock de raíces americanas. Xavi se presenta con su acústica, su armónica y su voz. Voz que acompaña muy bien en bastantes temas la de Sabrina Soto. A ambas las arropa, y mece a menudo, la pedal steel de Dakota Holden. Las canciones son también acariciadas por el emotivo piano de Abel Boquera, poniendo los tonos más fronterizos y crepusculares el acordeón de Dejan Nikolic, al estilo del de Kenny Margolis con Willy DeVille o Elliott Murphy. Un sugerente trabajo que se puede conseguir, y te lo recomendamos hacer,  en https://xavimalacara.bandcamp.com/album/the-man-and-the-ocean-2022 .

Al dejar la compañía de Wilson, el músico ha pasado a sonar mucho más “americano”, y eso nos gusta particularmente. Igualmente han quedado fuera esos toques latinos que estaban presentes en “The Rookie”, sobre todo en esa buena versión del "Ansiedad" de Nat King Cole, que no de Albert Hammond. Pero no hay más que poner temas como ese cálido arranque con la desnuda y acústica "My Ruined Day" y dejarse llevar por esos tonos entre Neil Young en solitario, sobre todo cuando predomina su armónica, y Mark Lanegan. La steel guitar brilla melancólica y resplandece en esos "Bright Angels". El toque, al estilo del acordeón de Margolis, combinados con aromas mediterráneos, se huelen en el precioso tema titular, mientras que "Motorbike" es de esos temas que parecen sacado del ”Harvest” del canadiense, y además con la voz de Sabrina nos hace acordarnos de las Emmylou Harris, Nicolette Larson o Linda Ronstadt. Al entrar el órgano en "Your Golden Heart", y sonar más oscura aún, nos vuelve a llevar a Mark Lanegan o al Young del “Unplugged”. Igual es mi tema favorito hasta la fecha, y llevo ya unas cuantas audiciones. 

El breve pero intenso disco acaba magistralmente con "Call Me If You Feel Blue", más calma por medio de la acústica y armónica y más folk crepuscular que blues. Por eso también puede gustar mucho este nuevo trabajo a seguidores de Will Oldham, Smog o los Red House Painters de Mark Kozekek. Yo lo prefiero por estos nuevos territorios y con estas historias más personales y desgarradoras en ocasiones.