Por: Txema Mañeru
¡Lo primero de todo la buenísima noticia! Dentro de una gira de cinco fechas, desde el 21 al 25 de octubre en Madrid, Barcelona, Bilbao, San Sebasián y Burgos, tendremos al más grande supergrupo de los últimos años.
Están liderados por el gran cantante, frontman y compositor de los suecos Diamond Dogs, Sulo Karlsson. Pero le acompañan Terry Chimes, batería de The Clash y de Johnny Thunders And The Heartbreakers. Dave Tregunna estuvo en la patrulla del primer punk británico. Sham 69 y luego en The Lords Of The New Church con Stiv Bators. Mick Geggus fue bajista de los también punk primigenios Cockney Rejects. Además ahora se ha incorporado como miembro definitivo en la banda Iddle Schultz que ya participó como colaboradora en el excelente debut de hace dos años, “Busy Making Noise” (Legal Records / PopStock!).
Pero se muestran más conjuntados aún en este calentito, flamante y nuevito como su título, "Brand New Brand” (Cargo Records / Everlasting Records).
Todas las composiciones siguen siendo de Sulo, pero los restantes miembros han participado más en la creación de los temas. Comienzan con garra para el fin de semana a la noche y una espectacular ‘Lonely beat of the heart’. Bordan estribillos nueva-oleros como los de ‘Limited edition’ o ‘Banner of faith’, en la que Geggus se marca unos impecables punteos con la eléctrica y que acaba con guiño al ‘Walk on the wild side’ de Lou Reed.
El primer single y videoclip es ‘Neon Madonna’ y tiene un ritmo reggae como los Clash del “London Calling”. También un estribillo que te captura con facilidad. El tema titular es una pieza de cromado power-pop y el medio tiempo ’25 hours a day’ es otro single claro que suena como los primeros Graham Parker & The Rumour. En ‘Solid rock
steady’ la voz solista es para Iddle y lo borda sonando como los Blondie del “Parallel Lines”, pero con guitarras más punk. Se ponen casi tiernos, pero luchadores en la hermosa ‘Barricade blues’.
El precioso lento es ‘Save the glow’ y tiene la magia del Elvis Costello de los comienzos. Se despiden con un ‘Go back to go’ que por la historia que nos cuenta y por su frescura en el pegajoso estribillo puede ser un buen cierre a sus actuaciones, aunque esperemos que también caiga alguna versión de The Clash en los bises como han hecho en otras ocasiones en homenajes a Joe Strummer. ¡Banda, disco y actuación para disfrutar de lo lindo!