Entrevista Hendrik Röver

“Últimamente he conseguido ser mejor letrista”
Hace algunos meses tuvimos la oportunidad de mantener una agradable charla con Hendrik Röver, el motivo no era que la publicación del que hasta la fecha es su segundo álbum en solitario, cuyo título es “No Temáis por Mí”. Con el mismo aparcaba momentáneamente la carrera de la banda con la que se dio a conocer ante el púbico rockero de nuestro país. Estamos hablando, por supuesto, de los enormes Deltonos.

Por azares del destino aquella entrevista quedó congelada en un cajón secreto durante mucho tiempo. No hay una razón clara para explicar a nuestros lectores porqué motivo quedo relegada al olvido momentáneo. Simplemente ocurrió.

Pero nada es eterno ni tan siquiera el olvido y desde hace algunos días venimos trabajando para acometer un acto de justicia con uno de los músicos más sinceros que nos hemos echado a la cara. Finalmente lo hemos conseguido. Y ahora hacemos vuestro el contenido de aquella interesante charla.

Esperamos que os guste y que sepáis perdonar la demora, porque, aunque parezca mentira, paradójicamente esta entrevista es muy importante a nivel emocional y personal para algunos de los que hacemos posible esta web. Ese día quedó y quedará marcado en nuestras memorias de por vida. Ahora sí, con todos vosotros el gran Hendrik Röver.

En 2007 vio la luz tu primer disco en solitario, “Esqueletos”, y en 2010, vio la luz tu segundo disco, “No temáis por Mí”. ¿Cómo fue todo el proceso de grabación como han ido surgiendo las canciones?

Hendrik: Así como “Esqueletos” fue una cosa casi accidental que surgió a raíz de que me diera cuenta que tenía una cantidad de canciones que no servían para Los Deltonos, pero me gustaban para sacarlas por separado. Este disco supone un paso más en mi carrera. Ha contado con una mayor producción, las canciones están más pensadas porque le he dado más vueltas al concepto en el estudio. En definitiva, está más currado.

Un trabajo en el que profundizas en sonoridades muy americanas como el country, el blue grass o el rock and roll.

Hendrik: Y lo que me queda. Realmente toco esos palos porque son los sonidos que me gustan. Tanto en Los Deltonos, que es mi vida, como en solitario me muevo por el gran árbol de la raíces americana en todas sus ramas. Con mi banda madre quizás he profundizado más el blues o el rock, pero me quedan muchas sonoridades por explorar que se pueden combinar de diversas maneras distintas. Puede que este disco suene reiterativo, pero para mí supone un paso adelante respecto al disco anterior.

Nos ha llamado la atención la temática de las canciones y la forma que tienes de presentarlas en la hoja de prensa, donde dices que son “la crónica accidental de un amargo viaje a través de una dura y azarosa vida”. ¿A qué responde este hecho?

Hendrik: Al grabar todas las canciones, me di cuenta de que si quería podía colocarlas en un orden cronológico que les daba cierto sentido de continuidad. Finalmente no me gustó como quedó por lo que las volví a poner tal y como estaban antes. Intenté realizar un experimento que no me salió. El disco se puede interpretar como la crónica de una vida difícil y se cierra con “Adiós” que supone el suicidio de su protagonista.

Al escuchar el álbum se nota mucha sinceridad en lo que cantas. ¿Hasta qué punto los textos de este disco son autobiográficos?

Hendrik: Por suerte no son nada autobiográficas, porque si no yo llevaría una vida muy miserable (Risas). Hay muchos perdedores, moribundos y muertos. Supongo que es el reflejo de lo que he visto, leído y he oído durante todos estos años lo que me ha llevado a hablar de todos estos personajes.

Vuelves a producir el disco. ¿Ni por un momento te planteaste que otra persona se encargara de esa parte del trabajo?

Hendrik: Tampoco sabría muy bien a quien encargarle la producción. Al menos no en este país. Quizás no sea del todo bueno, pero llevo muchos años instalado en el “Juanpalomísmo”. Me resulta difícil delegar. Además cuento con un estudio de grabación en casa lo que me ofrece la posibilidad de dar varias vueltas a las canciones y enredar en las mismas.

“En mi Mansión” haces una defensa de un estilo de vida sencillo y en la misma incluyes una frase muy llamativa en la que dices, “Algo que no es tuyo, nunca puede ser tu hogar”.

Henrik: Eso es un concepto muy latino, muy español. Así como en los demás países de Europa la gente vive de alquiler y son súper felices, aquí no ocurre eso. Parece que si no lo comprar, si no es tuyo, jamás los disfrutarás del todo. Me parecía muy característico y definitorio del espíritu latino y español.

A colación de frases como esa que hemos rescatado sí que percibimos que, sin querer menospreciar todo tu trabajo anterior, el nivel de las letras que fabricas ha crecido exponencialmente. Un claro ejemplo es “Te lo Prometo”, de tu anterior disco, que es de lo mejorcito que se ha escrito últimamente.

Hendrik: Creo que ha sido bueno, incluso para Los Deltonos, que yo haya empezado este rollo. Inclusive creo que las mejores letras que tenemos en la banda son las de “Buenos Tiempos”, nuestro último disco. Todo es práctica y aprender. Creo que últimamente he conseguido ser mejor letrista y contar de una manera más sencilla las cosas.

También nos ha gustado mucho el hecho de que hayas incluido con las primeras copias del disco incluir otro con canciones propias al estilo “Bluegrass” en las que te arropas con “La West Bluegrass Band”.

Hendrik: Se repite “Adiós”, el resto son propias e inéditas. Al empezar a grabar el disco me di cuenta de que tenía dieciocho canciones lo que me parecía demasiado para un solo álbum. Y por otro lado hace años que tenía la idea de hacer un disco de “Bluegrass”, así que decidí apartar las que mejor se adaptaban al estilo y grabarlas de una forma distinta.

¿Tienes intención de profundizar por ese sendero y salir de gira con ellos?

Hendrik: Girar con ellos va a ser difícil porque son gente mayor y les da mucha pereza salir de casa. Ellos son de Bilbao y el mero hecho de tener que desplazarse al concierto veraniego de Laredo, que está a cuarenta kilómetros, ya les da una pereza enorme. El mero hecho de proponer una gira ni se me ocurre. Quizás con otros músicos podría plantearlo. De todas formas la gira la estoy planteando en formato cantautor. Ahora estoy mucho más seguro y me gusta defender las canciones tal y como nacieron. Tengo las cosas bien preparadas para que todo funcione. Además con esta forma de salir al escenario si alguien te sugiere una canción se puede hacer. Me gusta esa interactividad.

Hablando de proyectos distintos. ¿Qué ocurrió con Hank donde dabas rienda suelta a tus inquietudes más power-pop?

Hendrik: Lo de Hank creo que fue el momento equivocado. Yo lo hice con mucha ilusión, pero la gente no lo entendió. No conseguí conectar con el público power-popero, porque era el cantante de Los Deltonos, un grupo de blues. Y por otro lado los fans de Deltonos venían a los directos y pedían canciones de la banda. Existe un tercer disco de Hank, no grabado como tal pero sí maquetas perfectamente editable. A ver si una semana que me aburra, lo ordenó y lo pongo a la venta para los que estén realmente interesados. Sé que hay gente a la que aquello le gustó, pero no tuvo mucha mayor repercusión.

A lo largo de 2011 se cumplirán veinticinco años desde que debutaste en el mundo de la música. ¿Qué te parece la evolución que ha sufrido el mundo de la música?

Hendrik: Sí, empezamos un poco antes. Aunque las primeras inscripciones escritas en piedra de Los Deltonos datan del año 1986. Nosotros contamos con la paradoja de ser un grupo de culto y eso no te ayuda a comer mejor. Por otro lado me gustaría ver un mayor respeto. No me gusta el fenómeno de Internet ya que no hay respeto por la canción como obra. Me da rabia perder el derecho a decidir sobre toda tu obra. Si me levanto un día y me apetece regalar toda mi obra ya lo haré. No me gusta que nadie haga eso en mi nombre.

Tu anterior trabajo, “Esqueletos”, se puede encontrar en Spotify. ¿Qué opinión te merece este sistema?

Hendrik: Lo puse en su día, pero después me arrepentí de haberlo hecho. Es tipo de cosas son un fraude para los músicos. Ni aunque todos los chinos del mundo, escuchen tu música todos los días del año en Spotify, con lo que te llega no te da para vivir ni un solo mes. Ahora la gente dice que hay que tocar en directo, pero me pregunto, ¿dónde y para qué? Y más en un país en el que la música en vivo aún no está normalizada. A día de, para el músico, lo más rentable sigue siendo el disco. Personalmente ofrezco un disco con un puñado de canciones interesante, en formato digipack, por tan sólo diez euros si lo adquieres en uno de mis directos y por dos euros más de gastos de envío a través de la web. Me parece un precio bastante justo.

Durante una época tuvisteis problemas con la Fábrica Magnética para editar discos, llegando a tener un juicio donde se dijo que “estabais teniendo un comportamiento intelectualmente peligroso”. ¿Qué ocurrió exactamente?

Hendrik: Recuerdo que en el juicio el juez dijo “levántese el acusado”, y yo tardé un rato en darme cuenta de que se refería a mí. Aquello fue un rollo kafkiano sobre el que algún día debería escribir un libro. Nos calificaron así porque la Fábrica Magnética pidió medidas cautelares para que no pudiéramos tocar las canciones en litigio en directo, pero claro nosotros éramos músicos y vivíamos de eso. Es una historia que vosotros sacáis de vez en cuando pero yo ni me acuerdo la verdad, y si me lo recuerdan no me queda otra que reírme.

Actualmente andas presentando tu nuevo trabajo en solitario alejándote de la disciplina de una banda ¿Cómo disfrutas más a la hora de afrontar un directo?

Hendrik: A mí lo que me gusta es tocar porque en el fondo las canciones son todas mías. Ir con Los Deltonos es un rollo más energético, toca sudar más. Al principio al salir al escenario solo me sentía un poco desvalido, pero ya le he cogido gusto y cariño al formato. Ahora toco donde sea y lo que haga falta porque me encuentro muy bien haciéndolo de las dos formas.

Por último y para finalizar. ¿Qué planes tienes de gira con “No Temáis por Mí”?

Hendrik: La idea es tocar este disco. En principio voy yo solo. Si en alguno me coincide un amigo cerca le invitaré. Y en cuanto este álbum ruede empezaré a maquinar el siguiente de Los Deltonos.

Por: Javier González e Iván González.
Fotos: Iván González.